Paso adelante para la eutanasia en M¨¦xico

Problemas r¨ªspidos e irresolubles abundan. Basta mirar el mundo y leer los peri¨®dicos o cavilar en la respuesta del sastre de Samuel Beckett, entra?able pesimista:

¡ªCliente ¡ªle dice al sastre-: Dios fue capaz de hacer en seis d¨ªas el mundo y usted no es capaz de hacer un pantal¨®n en seis meses.

¡ªSastre: Pero se?or, mire el mundo y mire su pantal¨®n.

En los rotativos abundan malas noticias. El n¨²mero de ¡°datos negros¡± supera con mucho el de informaciones optimistas. Lo mismo pensaba el entra?able personaje beckettiano: el mundo cojea sin cesar.

En 2023, de acuerdo a la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas, hay en el mundo 195 pa¨ªses. La eutanasia es legal solo en nueve naciones: Pa¨ªses Bajos (2002), B¨¦lgica (2002), Luxemburgo (2009), Canad¨¢ (2016), Colombia (2014), Espa?a (2021), Nueva Zelanda (2019), Portugal (2023) y en cinco estados de Australia. El suicidio asistido es legal en los pa¨ªses donde se permite la eutanasia, as¨ª como en Suiza, desde la d¨¦cada de los cuarenta, en Austria (2022) y en diez estados de Estados Unidos: Oreg¨®n fue el primero en legalizarlo (1994). Si se toma en cuenta el n¨²mero de naciones registradas en la ONU y la escueta cifra de pa¨ªses donde se permite llevar a cabo uno u otro procedimiento, se comprende la complejidad del brete.

Eutanasia, ¡°es el acto que se aplica para producir la muerte sin dolor y as¨ª finalizar con el sufrimiento en pacientes terminales y sin esperanza. El procedimiento se lleva a cabo por medio de la inyecci¨®n de sustancias intravenosas. La inmensa mayor¨ªa de las veces la realiza un galeno¡±. El suicidio asistido consiste en la ayuda y el apoyo a personas que desean terminar con su vida. El m¨¦dico provee los f¨¢rmacos y quien solicita la ayuda decide cu¨¢ndo ingerirlos; la mayor¨ªa de las veces el acto se lleva a cabo en casa y con la compa?¨ªa de allegados. La diferencia entre eutanasia y suicidio asistido radica en que en la primera es el doctor quien lleva a cabo la acci¨®n y en el segundo es el interesado quien decide cu¨¢ndo, con qui¨¦n y d¨®nde ingerir los medicamentos.

En M¨¦xico, tanto la eutanasia como el suicidio asistido no est¨¢n permitidos, lo cual, afortunadamente, no significa que ambas ayudas para morir no se realicen sotto voce. La prohibici¨®n mezcla leyes, religi¨®n y falta de movimiento de las autoridades de salud. La suma de los tres factores ha impedido legalizar ambos m¨¦todos. El 10 de octubre, doce diputados de Morena, Movimiento Ciudadano, PRI, PVEM y PRD, de un total de 500 pares, presentaron una iniciativa para incorporar la eutanasia a la Ley General de Salud. La iniciativa propone derogar el art¨ªculo 166 Bis 21 de la Ley General de Salud, en el que se proh¨ªbe la pr¨¢ctica de la eutanasia, la cual se describe como un ¡°homicidio por piedad¡±, as¨ª como el suicidio asistido conforme al C¨®digo Penal Federal.

La iniciativa enlista los factores para aplicar la eutanasia:

¡ªSufrir una enfermedad terminal.

¡ªSufrir una condici¨®n m¨¦dica irreversible que, aunque no produzca la muerte inmediata, genere dolor f¨ªsico o emocional y limite el ejercicio de la vida libre.

¡ªSufrir agon¨ªa con pron¨®stico de vida de 2 a 3 d¨ªas.

Tambi¨¦n subraya los requisitos necesarios para solicitar eutanasia:

¡ªSer mayor de edad.

¡ªEstar en pleno uso de sus facultades mentales.

¡ªEstar libre de cualquier influencia o presi¨®n para presentar una solicitud por escrito firmada en presencia de un federativo p¨²blico y dos testigos independientes.

El movimiento de los diputados agrega ¡°que se lleve a cabo una evaluaci¨®n exhaustiva tanto a nivel f¨ªsico como psicol¨®gico del paciente, y que un m¨¦dico o un comit¨¦ m¨¦dico supervise la solicitud¡±, am¨¦n de que ¡°la evaluaci¨®n incluir¨¢ la comprensi¨®n del procedimiento y sus posibles resultados, la capacidad del paciente para considerar las opciones disponibles y su habilidad para mantener una decisi¨®n constante a lo largo del proceso de solicitud de la eutanasia¡±. Asimismo, se especifica que ¡°¡­ Deber¨¢n transcurrir al menos 15 d¨ªas naturales entre la presentaci¨®n de la solicitud, su recepci¨®n y la realizaci¨®n de la eutanasia¡±.

Bienvenido el proyecto. Bienvenida la iniciativa de los muy escasos diputados firmantes. Como todo proyecto adolece de pifias. Falt¨® la opini¨®n de facultativos conocedores. Me inquietan, inter alia, afirmaciones como ¡°tener un pron¨®stico de vida de 2 a 3 d¨ªas¡±, sentencia que choca con la idea de que ¡°¡­ Deber¨¢n transcurrir al menos 15 d¨ªas naturales entre la solicitud de la eutanasia¡­¡±, a lo cual agrego mi incomprensi¨®n sobre el significado, en el contexto de vida/muerte, de ¡°d¨ªas naturales¡±. La iniciativa deber¨ªa tambi¨¦n agregar, en pocas palabras, la necesidad de difundir la idea de instrucciones anticipadas (testamento en vida) y una muy breve explicaci¨®n sobre cuidados paliativos, opci¨®n cuyo prop¨®sito radica en disminuir dolores f¨ªsicos y mentales; en nuestro pa¨ªs dicha posibilidad es magra por falta de recursos econ¨®micos.

En M¨¦xico hay 500 diputados. La iniciativa fue firmada por 12. La enorme diferencia augura inmensas dificultades para la aprobaci¨®n de la Ley. Faltan muchas voces. Tela por cortar sobra. Los 12 diputados deber¨¢n acercarse a sastres mexicanos como el de Samuel Beckett en busca de ayuda.