Miserables

Es injusto lo que pas¨® con Cuba y, adem¨¢s, es miserable lo que hizo el Gobierno colombiano. Estados Unidos ha ingresado a Cuba, nuevamente, a la lista de pa¨ªses que apoyan al terrorismo. La gran mayor¨ªa de analistas esperaban la decisi¨®n y a pocos sorprendi¨®. La causa es que la isla acoge a algunos de los l¨ªderes de la ¨²ltima guerrilla del hemisferio occidental: el ELN. Obviamente, el tema Venezuela tambi¨¦n influy¨® en la decisi¨®n. Sin embargo, la principal explicaci¨®n fue que el ELN mantiene al m¨¢ximo dirigente en la isla, as¨ª como a la delegaci¨®n que negociaba con el Estado colombiano un posible acuerdo de paz.

Desde el a?o 2011, el Estado colombiano asumi¨® una b¨²squeda pol¨ªtica de una salida negociada al conflicto armado que hab¨ªa padecido el pa¨ªs por varias d¨¦cadas. Dentro de esa b¨²squeda, se opt¨® por evitar ¡°caguanizar¡± esas negociaciones de paz. Como se sabe, entre 1999 y 2002 se realiz¨® una fallida negociaci¨®n de paz entre el Estado colombiano y las FARC. La modalidad era que hab¨ªa una zona de despeje donde la guerrilla era la que controlaba el territorio, la cual se ubic¨® al sur del pa¨ªs, en la zona del Cagu¨¢n. La experiencia no fue buena y por tanto se buscaban alternativas de negociaci¨®n que no incluyeran zonas de despeje militar dentro del pa¨ªs. Entonces, se opt¨® por hacer negociaciones fuera de Colombia.

Cuba acogi¨® la negociaci¨®n con las FARC, la cual lleg¨® a buen t¨¦rmino. Adem¨¢s, luego de que la negociaci¨®n con la guerrilla del ELN fuera pr¨¢cticamente expulsada de Ecuador por el Gobierno de Len¨ªn Moreno, Colombia acudi¨® a Cuba a pedirle que aceptara ser la sede de los di¨¢logos. Cuba acept¨® y adem¨¢s se establecieron protocolos estrictos para resolver contingencias o crisis dentro del proceso. Uno de esos protocolos determinaba los procedimientos a seguir con las delegaciones en caso de ruptura de las negociaciones.

Igualmente, en medio de esas negociaciones, el jefe del ELN, alias Gabino, sufri¨® un quebranto de salud. Entonces, el ELN solicit¨® al Estado colombiano la posibilidad de que, como un gesto humanitario, se le permitiera el traslado a un tratamiento m¨¦dico en Cuba. Luego, el Estado colombiano solicit¨® esa posibilidad a Cuba y con eso se dio el traslado. Esto significa que Gabino lleg¨® a Cuba por petici¨®n del Estado colombiano y no por un asilo pol¨ªtico.

Con la posesi¨®n, el 7 de agosto de 2018, del nuevo Gobierno de Iv¨¢n Duque, la situaci¨®n cambi¨® r¨¢pidamente. El nuevo Ejecutivo le pidi¨® a Cuba que entregara a Gabino y la delegaci¨®n de paz que estaba alojada en La Habana, lo hac¨ªa como pedido de extradici¨®n. Seg¨²n los protocolos, en caso de romperse las negociaciones la delegaci¨®n del ELN deb¨ªa ser internada en Colombia, luego de cumplirse una serie de procedimientos que inclu¨ªan un despeje militar de algunas horas para que dicha delegaci¨®n fuera trasladada a las selvas del pa¨ªs.

Es decir, la petici¨®n del Gobierno de Iv¨¢n Duque significaba desconocer los protocolos y violar las reglas de negociaci¨®n que se hab¨ªan pactado. Esto no solo pon¨ªa en aprietos a Cuba, sino tambi¨¦n a Noruega y en general a los dem¨¢s pa¨ªses garantes del proceso. Como era de esperarse, Cuba manifest¨® que ellos deb¨ªan cumplir lo pactado y, por tanto, el cumplimiento de los protocolos era el camino. Al final, la delegaci¨®n del ELN se qued¨® estancada en La Habana, sin poder regresar a Colombia.

La consecuencia de este debate diplom¨¢tico fue que Cuba ingres¨® de nuevo a la lista de pa¨ªses que apoyan el terrorismo. Es ins¨®lito, pues fue Colombia la que le pidi¨® a Cuba que aceptara ser sede de las negociaciones de paz, Colombia firm¨® unos protocolos, fue el Estado colombiano el que los desconoci¨® y al final Cuba, por hacer un favor y cumplir lo pactado, fue sancionada. As¨ª de miserable es la pol¨ªtica exterior colombiana.