La v¨ªa del consenso
Sindicatos, patronales y Ministerio de Trabajo dan otra vez ejemplo con el pacto sobre repartidores de plataformas digitales
En medio del t¨®xico escenario pol¨ªtico espa?ol, el di¨¢logo entre agentes sociales y el Ministerio de Trabajo ha vuelto a demostrar que otra v¨ªa, mejor, de abordar las cuestiones colectivas es posible. El pacto sellado en esta ocasi¨®n por el departamento que dirige Yolanda D¨ªaz con los sindicatos y las patronales establece que los repartidores de las plataformas digitales son asalariados, acabando con el uso de falsos aut¨®nomos, y obliga a las empresas a dar informaci¨®n sobre los algoritmos cuando tengan incidencia en las condiciones laborales. Van siete acuerdos en poco m¨¢s de un a?o, seis en una situaci¨®n econ¨®mica y sanitaria de emergencia y en un escenario pol¨ªtico de confrontaci¨®n extrema.
El alcance del acuerdo puede parecer corto a primera vista. El recurso a los falsos aut¨®nomos no es patrimonio exclusivo de las plataformas digitales de reparto, hay muchos otros sectores que recurren a esta forma de fraude laboral, y esto deber¨ªa abordarse sin demora en el estatuto del trabajo del siglo XXI que el Gobierno pretende elaborar en la segunda parte de la legislatura. No obstante, en los ¨²ltimos a?os pocas empresas como estas plataformas han provocado tantas actuaciones de la Inspecci¨®n de Trabajo y, luego, han mostrado tanta resistencia a asumir las decisiones de las autoridades laborales y las sentencias de los jueces. La nueva regulaci¨®n, adem¨¢s, usa el fallo del Tribunal Supremo que zanj¨® judicialmente el asunto para deshacer la confusi¨®n legal que hubo y deja sin excusas estas actitudes.
M¨¢s ambicioso es el otro aspecto del acuerdo. La regulaci¨®n de las implicaciones laborales de los algoritmos ha sido demandada por instituciones como la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT). El real decreto que se apruebe dar¨¢ el derecho a los representantes de los trabajadores de todas las empresas ¡ªno solo de las plataformas¡ª a recibir informaci¨®n sobre el funcionamiento de los algoritmos que afecten a las condiciones laborales. Este es un paso importante para arrojar transparencia sobre unas herramientas tecnol¨®gicas que est¨¢n revolucionando las formas de organizar el trabajo.
Y a este punto se ha llegado con di¨¢logo social, como reclama, precisamente, la OIT. El camino ha sido arduo: cinco meses para pactar una regulaci¨®n de apenas una p¨¢gina. Sin embargo, en el enrarecido clima pol¨ªtico y social espa?ol, esto es un ejemplo. Todas las partes han tenido la paciencia y la determinaci¨®n para alcanzar el pacto. Sindicatos y patronales dejan en cierta evidencia a los partidos espa?oles, tan poco capaces de pactar; la ministra D¨ªaz, a su vez, muestra que una izquierda situada m¨¢s all¨¢ del PSOE en el espectro parlamentario puede ser responsable, eficaz y alejada de los maximalismos e hip¨¦rboles que lastran el desempe?o de tantos de sus compa?eros de partido con serio da?o para Espa?a.
EDITORIAL | La da?ina excepci¨®n Ayuso
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.