?Me hab¨ªa confundido de peri¨®dico?

Leo EL PA?S todos los d¨ªas desde aquel primer n¨²mero, que a¨²n conservo, y ahora soy suscriptor de su edici¨®n en papel, que espero mantener viva hasta que dure. Tengo la costumbre de leer directamente las p¨¢ginas de opini¨®n. Vi la de Antonio Ca?o en espacio destacado. Pasados unos minutos pens¨¦ si me hab¨ªa confundido: ?estaba leyendo otro peri¨®dico?, me pregunt¨¦. Su alegato contra el Gobierno de coalici¨®n, sus argumentaciones vacuas, impropias de un exdirector, las descalificaciones de ¡°trumpismo de la izquierda¡±, ¡°degradaci¨®n¡±, su loa al PP, su propuesta de un gran acuerdo del PSOE con ¨¦l, como partido fiable y soluci¨®n del futuro, me confirman que Ca?o no solo no es que no est¨¢ informado de la realidad es que no deber¨ªa hacerme dudar de lo que ha sido siempre mi peri¨®dico. Tan m¨ªo, lector, como suyo, exdirector.

Fernando Gonz¨¢lez Cajal. Madrid

Sin respuesta del SEPE

Estamos en plena campa?a de Renta y el SEPE contin¨²a sin ofrecer ninguna respuesta. Desde el inicio de los ERTE son muchos los conflictos del SEPE. Conflictos que han afectado a muchas personas. Los tel¨¦fonos y correos no existen, y no hay posibilidad de conseguir cita previa. Miles de ciudadanos viven con la incertidumbre de qu¨¦ hacer ahora con la declaraci¨®n de la Renta cuando el dinero debido no ha llegado. Sin embargo, los pagos indebidos s¨ª se est¨¢n reclamando. Una cara m¨¢s de la pandemia que contin¨²a sin viajar a la normalidad.

Silvia M. D¨ªaz. Vilafranca de Bonany (Mallorca)

?Qu¨¦ sociedad tan fr¨ªvola!

Mientras la injusticia y el dolor atraviesan el mundo, mientras en Afganist¨¢n los talibanes vuelven a atacar a las mujeres, mientras en India mueren miles de personas por la falta de ox¨ªgeno y de vacunas, mientras en Colombia luchan por sus derechos y por la aut¨¦ntica libertad, en Espa?a, multitud de personas irresponsables y ego¨ªstas se echaron a la calle tras el fin del estado de alarma. La raz¨®n: estar cansado de la pandemia y no poder vivir sin tomar ca?as y sin divertirse sin ton ni son. ?Qu¨¦ poco hemos aprendido!

Ana Alonso Castrillo. Madrid

Inmigrante y menor

Los escolares asturianos que, como recoge EL PA?S del domingo pasado, se cartean con Prince ¡ªel ni?o nigeriano que lleg¨® a Canarias en la pala del tim¨®n de un carguero¡ª le consideran un h¨¦roe. Sin embargo, a quienes como Prince, son inmigrantes y menores, Roc¨ªo Monasterio los califica de delincuentes.

Julio Madrigal Asenjo. Mairena del Aljarafe (Sevilla)

Ya somos libres

En Madrid, despu¨¦s de las elecciones auton¨®micas, ya somos libres, ya tenemos libertad. Pero para lo que no somos libres es para ir al m¨¦dico en nuestro ambulatorio. Despu¨¦s de estar varias horas colgados del tel¨¦fono que nadie contesta, vamos en persona. Tras dos horas largas de cola, nos dicen que la consulta ser¨¢ telef¨®nica y en 15 o 20 d¨ªas. Un m¨¦dico que no sabemos qui¨¦n es ni ¨¦l nos conoce nos llamar¨¢ para que le expliquemos lo que, a nuestro juicio, nos pasa, y si lo cree conveniente nos dar¨¢ una cita presencial dentro de unos cuantos d¨ªas m¨¢s. Que no se puede hacer otra cosa, que faltan 14 o 15 m¨¦dicos y que eso es que hay. Pero hemos conquistado la libertad.

Francisco Arriero Camarena. Madrid

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