Cambio contra desgaste
La crisis de Gobierno revela la severidad de la erosi¨®n en el equipo de S¨¢nchez
El presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, acometi¨® el s¨¢bado una profunda remodelaci¨®n de su Ejecutivo que busca dejar atr¨¢s el desgaste acumulado en a?o y medio de gesti¨®n en circunstancias extraordinariamente dif¨ªciles, quiz¨¢ las peores en d¨¦cadas. Entre los elementos centrales de la maniobra destacan la afirmaci¨®n de la continuidad de la pol¨ªtica econ¨®mica, un mayor protagonismo del PSOE en el Ejecutivo, y una renovaci¨®n de cargos que rejuvenece el Gabinete y aparta las figuras con mayor desgaste. La profundidad de la remodelaci¨®n supone de facto el reconocimiento de la dificultad del momento pol¨ªtico para los socialistas, especialmente tras la derrota electoral en Madrid.
La crisis de Gobierno cierra una primera etapa de la legislatura marcada por el brutal impacto de la pandemia. En su activo, el Ejecutivo cuenta con el despliegue de un escudo socioecon¨®mico de considerable eficacia, con l¨ªneas de actuaci¨®n acertadas en los pr¨¦stamos del ICO y en los ERTE, mejor dise?ados que esquemas parecidos en otros pa¨ªses europeos. Estas acciones han evitado mucho sufrimiento y han contenido el ascenso del paro de forma m¨¢s eficaz que en anteriores crisis. Fue positivo el productivo di¨¢logo con los agentes sociales en materia laboral y de pensiones, y tambi¨¦n lo fue la notable capacidad de producci¨®n legislativa, con apreciables iniciativas como el ingreso m¨ªnimo vital o la ley de eutanasia. En el pasivo, la gesti¨®n sanitaria tuvo episodios desacertados, la din¨¢mica de coalici¨®n vivi¨® momentos desafortunados, y demasiadas veces se produjeron reflejos equivocados, como la tentaci¨®n de rebajar la mayor¨ªa necesaria para renovar el Poder Judicial, entre otros. La gesti¨®n de la cuesti¨®n de los indultos, con los consabidos argumentos a favor y en contra, ha marcado a fondo el ¨²ltimo periodo.
La nueva etapa se abre bajo el signo del continuismo econ¨®mico. El ascenso de Nadia Calvi?o a la vicepresidencia primera, sobre todo, y la confirmaci¨®n de otros ministros del sector, env¨ªan un claro mensaje a la Uni¨®n Europea, a los agentes sociales, a los mercados y, quiz¨¢ de forma especial, al socio menor de Gobierno. Es un buen mensaje. En segundo lugar, destaca el intento del presidente de reforzar la presencia del PSOE en el Ejecutivo, que va de la mano de gestos de distensi¨®n con ¨¢reas del partido tras la guerra fratricida de los a?os pasados.
La inesperada salida de Iv¨¢n Redondo como jefe de Gabinete, sin carn¨¦ socialista pero con una considerable influencia sobre su jefe, para ser sustituido por el hist¨®rico dirigente del PSOE ?scar L¨®pez, encarna quiz¨¢ m¨¢s que cualquier otro movimiento ese cambio de corriente. El nombramiento de L¨®pez, sumado al de figuras que no apoyaron a S¨¢nchez en los momentos m¨¢s cr¨ªticos, muestra el intento de mejorar el clima interno del partido en un momento muy dif¨ªcil. El ascenso de F¨¦lix Bola?os, a partir de ahora ministro de Presidencia, tambi¨¦n es una noticia positiva para el PSOE. La salida de Jos¨¦ Luis ?balos deja abiertas inc¨®gnitas en los nuevos equilibrios del partido que se ir¨¢n aclarando con vistas al pr¨®ximo congreso, previsto dentro de tres meses.
La renovaci¨®n aparta del Gobierno a ministros muy desgastados o que hab¨ªan demostrado baja eficacia, y abre paso a una renovaci¨®n generacional que claramente busca una nueva conexi¨®n con la opini¨®n p¨²blica. La remodelaci¨®n no afecta, sin embargo, a los ministros del ¨¢rea del socio menor del Ejecutivo que, con la destacada excepci¨®n de Yolanda D¨ªaz, han mostrado una escasa capacidad de gesti¨®n, salpicada por desaciertos continuos. La oposici¨®n, por su parte, consider¨® la remodelaci¨®n una suerte de autoenmienda a la totalidad y reclam¨® elecciones anticipadas. Estas tienen claro encaje en la l¨®gica de sus deseos, pero ninguno en la aritm¨¦tica del Parlamento ni en la necesidad de Espa?a de afrontar con estabilidad el reto de la recuperaci¨®n despu¨¦s de la devastadora pandemia. El tiempo mostrar¨¢ si el nuevo Gobierno sabr¨¢ gestionarla. Y los ciudadanos tendr¨¢n en su momento la oportunidad de juzgarlo.
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