La letra peque?a de la inmortalidad que vende Jeff Bezos
Ser viejo es cada vez m¨¢s un asunto de pobres: el rejuvenecimiento no es para todas las personas sino solo para quienes se lo puedan pagar
Jeff Bezos, el hombre m¨¢s rico del mundo, tiene 57 a?os y se ha dado cuenta de que no va a poder gastar su fortuna por muchos a?os que viva. Ni quemando billetes en forma de cohetes ser¨ªa capaz de acabar con todos sus millones. Y este pensamiento es un terror peor que la muerte para ¨¦l, porque hace que su vida parezca una estafa. As¨ª que ha creado una startup con otros colegas multimillonarios ¡ªcomo el ruso Yuri Milner¡ª para revertir el envejecimiento humano. En vez de pincharse botox, han preferido infiltrar millones de d¨®lares en la empresa Alta Labs, donde han fichado en secreto a algunos de los mejores cient¨ªficos del planeta para conseguir la f¨®rmula de la eterna juventud. L¨¢stima que la letra peque?a de esta noticia la escriba el dinero y no la ciencia, ni siquiera la mano firme de Bezos. El pobre no sabe que hace tiempo que empez¨® a pensar con billetes en vez de con ideas. Despu¨¦s de todo, es lo ¨²nico que tiene.
La primera premisa poco visible de este esfuerzo m¨¦dico y cient¨ªfico por revertir el envejecimiento es asumir que la enfermedad m¨¢s grave a erradicar en el mundo es la vejez. Si pregunta a las instituciones o a los ciudadanos a lo mejor descubre que les preocupa m¨¢s el c¨¢ncer, la enfermedad mental, la esclerosis m¨²ltiple, el sida, la fibrosis qu¨ªstica o hasta la covid-19, por citar solo algunas preocupaciones mortales. Puede incluso que a mucha gente la vejez no le parezca siquiera una enfermedad a erradicar. Pero esas personas no tienen su dinero, as¨ª que no pueden decidir a qu¨¦ deber¨ªa dedicar sus esfuerzos la ciencia. Lo de que la vejez es una enfermedad no es una interpretaci¨®n personal, sino que es la misi¨®n que inspira a Alto Labs. Bezos sabe que la ciencia ya ha conseguido rejuvenecer a ratones ancianos, lo que significa que han sido curados y eso llena de esperanza juvenil al magnate.
La segunda cl¨¢usula de la eterna juventud tambi¨¦n est¨¢ escrita en letra diminuta y viene a explicar que el rejuvenecimiento no es para todas las personas sino solo para quienes se lo puedan pagar. Esto, por lo dem¨¢s, no es un invento de Bezos sino una realidad de nuestro tiempo. Preservar la vida es cosa de todos pero el rejuvenecimiento es cuesti¨®n de cada uno. Me da igual que sean implantes dentales, semillas de pelo nuevo, botox, ¨¢cido hialur¨®nico o las pastillas rejuvenecedoras que a Bezos le gustar¨ªa vender en Amazon¡ Ser viejo es cada vez m¨¢s un asunto de pobres. Lo que diferencia el sue?o de Bezos de la cirug¨ªa es que ya no se trata de maquillar el envejecimiento sino de aniquilarlo. Si hay que morir, se muere, pero habr¨¢ que ser realmente pobre para tener el mal gusto de palmarla de viejo. De modo que si la empresa de Bezos triunfa vamos a conseguir dos cosas: que el estigma de la vejez se agrave y que se cebe con los pobres.
Pero la obsesi¨®n de Bezos no es est¨¦tica ni cient¨ªfica, ni siquiera personal. Me refiero a que no le mueve el inter¨¦s sino la ideolog¨ªa y el deber. Ya digo que el pobre no tiene ideas para pensar, solo ceros, unos y big data. Por eso no entiende la vida y mucho menos su sentido. ?l cree que la vida est¨¢ hecha de tiempo y est¨¢ convencido adem¨¢s de que el tiempo humano es sin¨®nimo de dinero. Por eso no es la inmortalidad lo que persigue su empresa sino la justicia. Clama justicia para toda la gente que ha dedicado su vida a ganar dinero, a generar riqueza y a ser productiva. Gente como ¨¦l que merece (m¨¢s que nadie, por cuanto m¨¢s productivo) el derecho de disfrutar de su tiempo, de gastar lo que ha ganado, de encontrar un sentido a la vida despu¨¦s de todo.
Pobre Jeff. Con todos los asesores que tendr¨¢ y nadie le ha explicado que las cuentas no le van a salir jam¨¢s, que su pensamiento est¨¢ equivocado de partida y que la vida no va de eso que ¨¦l persigue. Claro que en el mundo que ¨¦l habita est¨¢n todos tan obsesionados con las mismas ideas que no creen que puedan existir otras. Por eso no es raro que Larry Page, cofundador de Google, se est¨¦ dejando los cuartos en Calico Labs, una compa?¨ªa con similares objetivos. Al final, si vives rodeado de tecnolog¨ªa terminas pensando con ella. No creo que Bezos me vaya a leer, pero por si lo hace, le dejo de regalo una frase del explorador y poeta John Muir: ¡°La vida m¨¢s larga es aquella que contiene mayor cantidad de un disfrute que borre el tiempo¡±. Yo la encontr¨¦ en un libro de Jenny Odel l¡ªya sabes Jeff, esos dispositivos desfasados de letra impresa¡ª titulado C¨®mo no hacer nada (Ariel), que tambi¨¦n le recomiendo. A lo mejor as¨ª invierte alg¨²n dinero (aunque sea su calderilla) en pensar el mundo antes de actuar (gastar) sobre ¨¦l.
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