Lecciones de Canad¨¢
Las protestas de los camioneros, explotadas por la extrema derecha, pueden reflejar el cansancio y el hartazgo de buena parte de la sociedad tras dos a?os de duras restricciones
La polic¨ªa canadiense inici¨® este viernes el desmantelamiento de la protesta de camioneros que tiene colapsada la capital Ottawa desde hace tres semanas, tras haber desbloqueado en los ¨²ltimos d¨ªas varios pasos en la frontera con Estados Unidos que imped¨ªan el comercio de mercanc¨ªas entre los dos pa¨ªses. Las demandas de los camioneros se iniciaron precisamente contra la exigencia de que los transportistas que cruzan la frontera est¨¦n vacunados contra la covid-19, pero a estas alturas las protestas ya aglutinan tal amalgama de reivindicaciones que su principal nexo es el profundo descontento que muestran con el Gobierno que preside Justin Trudeau.
La elevada tasa de vacunaci¨®n de Canad¨¢ (m¨¢s del 80% de la poblaci¨®n ha recibido al menos una dosis) resulta incompatible con la ret¨®rica antivacunas que han exhibido los organizadores de las protestas. De hecho, las asociaciones de transporte terrestre aseguran que el 90% de los camioneros est¨¢n completamente vacunados. Lo que s¨ª puede reflejar el plante es el cansancio y el hartazgo de buena parte de la sociedad ¡ªno solo en Canad¨¢¡ª despu¨¦s de dos a?os de duras restricciones e imposiciones por la pandemia, un elemento a tener en cuenta ¡ªno solo en Canad¨¢¡ª a la hora de adoptar decisiones en el futuro ante lo que parece que todav¨ªa va a ser una larga convivencia con el virus.
En Australia y Nueva Zelanda se han desarrollado algunas protestas similares e incluso el pasado fin de semana hubo intentos de replicar las marchas en Francia y en Bruselas, pero ninguna ha tenido hasta el momento la repercusi¨®n de lo acontecido en el pa¨ªs norteamericano. El primer ministro ha invocado la ley de Emergencia, que est¨¢ pendiente de aprobaci¨®n en el Parlamento, a la vista de los costes que los bloqueos fronterizos empezaban a tener para la econom¨ªa del pa¨ªs, de alrededor de 300 millones de d¨®lares canadienses (unos 208 millones de euros) al d¨ªa. Pero tambi¨¦n por las se?ales de violencia que la protesta comenzaba a mostrar, como demuestra la incautaci¨®n de numerosas armas de fuego entre los participantes en los bloqueos en la frontera.
Movimientos pr¨®ximos a la extrema derecha ya han empezado a explotar ese sentimiento de hartazgo y a apoyar con financiaci¨®n al llamado Convoy de la Libertad. Hasta el punto de que el Gobierno de Trudeau ha autorizado a los bancos a congelar cuentas y fondos vinculados con las protestas y ha bloqueado varias billeteras de criptomonedas en las que se hac¨ªan donaciones para esos camioneros.
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