C¨®mo deshacer el Brexit. Manual de instrucciones
Los conservadores culminaron la salida del Reino Unido de la Uni¨®n Europea, pero no fueron capaces de concretar una estrategia para despu¨¦s. Esto refuerza los argumentos a favor de su revocaci¨®n
La tragedia del Brexit es cada vez m¨¢s evidente: los que m¨¢s lo quer¨ªan no han sabido qu¨¦ hacer con ¨¦l. Boris Johnson ve¨ªa en la salida de la Uni¨®n Europea su principal legado, pero se le olvid¨® hacerse la pregunta m¨¢s importante: y luego, ?qu¨¦?
Consideremos primero qu¨¦ podr¨ªa haber hecho el primer ministro. Podr¨ªa haber empezado por liberar al Reino Unido de las normativas comunitarias con el objetivo espec¨ªfico de promover un modelo econ¨®mico determinado. El thatcherismo no es un modelo econ¨®mico. Ahora todos somos m¨¢s o menos thatcheristas. Por modelo econ¨®mico entiendo algo diferente. Por ejemplo, uno que favorezca a las peque?as empresas de alta tecnolog¨ªa. Eso requerir¨ªa cambios en el impuesto de Sociedades, la privacidad de los datos y las libertades digitales. Ser¨ªa lo contrario de la pol¨ªtica industrial de la UE, orientada a la protecci¨®n.
El Reino Unido podr¨ªa gastar m¨¢s dinero en sus excelentes universidades, y en investigaci¨®n y desarrollo. Podr¨ªa modernizar su antediluviano sistema educativo y ense?ar a los ni?os aptitudes para el siglo XXI. Podr¨ªa llevar a cabo una reforma de la agricultura, un proyecto que la Uni¨®n Europea va a ir postergando eternamente. Despu¨¦s de la energ¨ªa, el sector agr¨ªcola ser¨¢ la siguiente etapa de la revoluci¨®n verde. Se podr¨ªan dise?ar estrategias diferentes de la que yo he esbozado. La que yo propongo se basa en lo que Reino Unido ya tiene, y es b¨¢sicamente no ideol¨®gica.
Ya s¨¦ que la covid se ha entrometido. El mundo ha perdido un a?o. Pero esto no explica la persistente inacci¨®n. El verdadero fracaso de Downing Street no son las fiestas, sino no haber aportado un poco de pensamiento estrat¨¦gico a lo que seguir¨ªa al Brexit. Se conformaron con lo simb¨®lico, con los pasaportes azules y las medidas imperiales, y cerraron acuerdos comerciales con pa¨ªses lejanos con lo que apenas comerciamos.
Coincido con lord Adonis, presidente del Movimiento Europeo: si Boris se va, se acab¨® el Brexit. Esto no va a pasar dentro de poco, por supuesto. Y no ocurrir¨¢ de manera directa. Pero si ocurriera en un futuro lejano, la marcha de Boris Johnson se considerar¨ªa el primer paso, al igual que el Brexit empez¨® cuando Margaret Thatcher pronunci¨® las palabras pol¨ªticamente fatales sobre la integraci¨®n europea en la d¨¦cada de 1990: No, no, y no.
Sir Keir Stramer no devolver¨¢ el Brexit a la agenda pol¨ªtica, pero hay un gran paso que s¨ª que dar¨¢ si sale elegido: renegociar el tratado de comercio y cooperaci¨®n entre la Uni¨®n Europea y el Reino Unido. Hay m¨²ltiples relaciones posibles. Se puede ser miembro del mercado ¨²nico y no de la uni¨®n aduanera, como Noruega. O al rev¨¦s, como Turqu¨ªa. La UE, mortalmente ofendida por el Brexit, fue inflexible en las negociaciones, pero ahora tambi¨¦n est¨¢ empezando a contar los costes de la salida del Reino Unido en t¨¦rminos de p¨¦rdidas comerciales e influencia en el mundo. El mermado papel de la Uni¨®n a escala mundial est¨¢ quedando dolorosamente claro en el actual conflicto con Rusia. Otra generaci¨®n de l¨ªderes europeos podr¨ªa tener una visi¨®n de la relaci¨®n con el Reino Unido muy diferente de las de Michel Barnier y Ursula von der Leyen, por ejemplo.
Pertenecer al mercado ¨²nico conlleva una p¨¦rdida de soberan¨ªa en materia de emigraci¨®n. Ser miembro de una uni¨®n aduanera no la conllevar¨ªa. Esto har¨ªa suponer, a primera vista, que un Gobierno laborista podr¨ªa negociar una uni¨®n aduanera con la UE. Podr¨ªa hacer algo m¨¢s. Espero que el debate sobre la emigraci¨®n cambie en el momento en que haya un problema de inflaci¨®n. Los envejecidos pa¨ªses del norte de Europa necesitan como el agua la llegada de emigrantes para evitar que los costes salariales colapsen. La generaci¨®n mayor, con sus ingresos fijos, es la que m¨¢s puede perder si los precios suben. Yo creo que el debate sobre la emigraci¨®n dar¨¢ un vuelco en alg¨²n momento. Empezaremos compitiendo por la mano de obra, y al final el Reino Unido necesitar¨¢ un r¨¦gimen de emigraci¨®n mucho m¨¢s liberal que el que tiene ahora. Adem¨¢s, ser¨¢ lo que querr¨¢ la gente. La emigraci¨®n estar¨¢ mejor vista, incluso en el norte.
La manera m¨¢s f¨¢cil de conseguirlo ser¨ªa entrar en el mercado ¨²nico. Si no se tiene una estrategia normativa propia, ser¨ªa la mejor opci¨®n. La nueva relaci¨®n no puede resumirse en un ¨²nico ep¨ªgrafe, como en el caso de Noruega o Turqu¨ªa. Podr¨ªa haber un acuerdo de asociaci¨®n que abarcara las cuatro libertades: de comercio, de servicios, de capital y de mano de obra. Tambi¨¦n se extender¨ªa a una relaci¨®n mucho m¨¢s estrecha en materia de pol¨ªtica exterior. Ser¨ªa un gran incentivo para la Uni¨®n Europea.
En el pasado, el argumento m¨¢s contundente contra la pertenencia al mercado ¨²nico ten¨ªa que ver con el derecho al voto: el Reino Unido estaba sujeto a las normas de la UE, pero no ten¨ªa voto. Un acuerdo de asociaci¨®n duradero tendr¨ªa que incluir derechos de codecisi¨®n en los ¨¢mbitos en los que participa el Reino Unido, y cl¨¢usulas de exclusi¨®n en los que no participa. Si el objetivo del acuerdo de asociaci¨®n es llegar a formar parte del mercado ¨²nico en el futuro, todo esto no tiene importancia. De todos modos, el nuevo miembro tendr¨ªa que aceptar toda la normativa.
Otro refer¨¦ndum sobre la adhesi¨®n podr¨ªa quedar muy lejos todav¨ªa. Si consideramos la d¨¦cada de 1990 como el momento en que el euroescepticismo adquiri¨® carta de naturaleza, hasta la consulta sobre el Brexit pasaron 25 a?os. Su revocaci¨®n total podr¨ªa tardar tambi¨¦n su tiempo, pero a lo mejor no tanto. No hay que subestimar el poder de las perturbaciones previsibles como la inflaci¨®n, el clima extremo y las pandemias. Y no subestimemos tampoco las necesidades de los sectores industriales y financieros m¨¢s pr¨®speros del Reino Unido. Si el Reino Unido no saca partido de sus libertades normativas, puede que le fuera mejor dentro de la Uni¨®n Europea.
Por eso lord Adonis tiene raz¨®n. Si los conservadores no lo gestionan bien, yo tambi¨¦n imagino que el Brexit habr¨¢ llegado a su fin. La negligencia ser¨¢ la causa de su muerte.
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