Consecuencias de la guerra
Los lectores escriben sobre los efectos de la ofensiva de Rusia en Ucrania, la investigaci¨®n sobre lo ocurrido durante la pandemia en las residencias, el papel de los nuevos partidos provinciales y la necesidad de pagar impuestos para una sanidad de calidad

Las consecuencias de esta maldita guerra, fuera de las evidentes en la zona de contienda, en el resto del mundo ya las estamos viendo. Crisis de comercio y econ¨®mica, aumento insoportable de los precios de la energ¨ªa, inflaci¨®n desbocada, perspectivas de crecimiento a la baja, cuando no de franca recesi¨®n, con toda la repercusi¨®n social que eso conlleva. En el mejor de los casos, aun en el supuesto improbable de una guerra de breve duraci¨®n, se avecina una era de nuevos telones de acero, una nueva guerra fr¨ªa, un periodo de desconfianza entre pa¨ªses y entre bloques lo que conlleva al rearme y el aumento de los presupuestos en defensa, que ya se anuncian en medio de la alegr¨ªa de las empresas armament¨ªsticas, con la consiguiente reducci¨®n de los presupuestos en cooperaci¨®n, en desarrollo, en gasto social, en ciencia, en lucha contra el cambio clim¨¢tico y en tantas otras cosas mucho m¨¢s perentorias, como si no hubiera ya suficientes problemas en el mundo. Y eso en el mejor de los casos; los peores escenarios no quiero imaginarlos.
Sebasti¨¢n Fern¨¢ndez Izquierdo. Petrer (Alicante)
Investigaci¨®n de las residencias
Leo de cerca la informaci¨®n sobre el problema de las residencias de mayores porque quiz¨¢ est¨¦ cercana mi propia necesidad de alguna. Es triste ver como la derecha ha negado cualquier investigaci¨®n a fondo sobre unas muertes nada claras y sobre las que decidi¨® no se sabe quien. S¨¦ que los mayores parecemos ya un estorbo, pero aquellos que m¨¢s se enfrentan al derecho al aborto o a la eutanasia no tienen ning¨²n escr¨²pulo ante los que ya no producen. ?Quiz¨¢ porque algunos fondos buitre propietarios de las mismas son tambi¨¦n propietarios de sus decisiones?
C¨¦sar Moya Villasante. Madrid
Nuevos partidos
Est¨¢ claro que el PP es el ¨²nico responsable de su coalici¨®n de gobierno con Vox en Castilla y Le¨®n y de la bochornosa entrada de la extrema derecha en las Cortes regionales. Me pregunto, sin embargo, cu¨¢l ha sido el papel de los partidos provinciales de Le¨®n, Soria y ?vila en las ¨²ltimas elecciones. Quiz¨¢ sean eficaces como plataformas ciudadanas que promuevan la consecuci¨®n de aspiraciones locales, pero, como partidos, dispersan el voto y, con ello, pueden revelarse est¨¦riles: ni consiguen dar cauce a sus reivindicaciones ni propician el necesario cambio en la comunidad.
Hortensia Garc¨ªa Garc¨ªa. ?vila
Bendita sea esta fiesta del Estado
Hace dos a?os y tres d¨ªas, acud¨ª con neumon¨ªa al hospital. Debido al hallazgo de un tumor en el mediastino, me dejaron ingresado. En los cuatro meses siguientes me curaron la neumon¨ªa, con un tratamiento de desensibilizaci¨®n a las sulfamidas incluido, revisaron todo mi cuerpo de arriba abajo, estudiaron un aneurisma en la aorta ascendente que tambi¨¦n hallaron, tras dos intervenciones determinaron que el tumor era un timoma, me hicieron una estereotom¨ªa para extra¨¦rmelo y me dieron 30 sesiones de radioterapia. Y todo esto en medio del caos de los inicios y estallido de la pandemia. Estoy harto de escuchar el argumento ego¨ªsta de que con los impuestos ¡°estamos pagando la fiesta del Estado¡±, hay mucho que mejorar, pero bendita sea esta fiesta del Estado.
Marcos Garc¨¦s Lizama. Ba?¨®n (Teruel)
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