Dejar de sentirse culpable
Los lectores opinan sobre la homofobia, la atenci¨®n de los mayores, la reciente muerte de Francisco Gor y el candidato a la presidencia del Partido Popular, Alberto N¨²?ez-Feij¨®o
Entre l¨¢grimas comienzo a escribir este texto. Si est¨¢s leyendo esto, es porque me he atrevido a publicarlo o compartirlo. Mi tutora de primaria hace a?os dijo que escribir te liberaba. Acabo de publicar un tuit, pero he sentido que no ha sido suficiente: ¡°Harto de recibir comentarios todos los d¨ªas¡ Siempre es una broma, con las bromas se supone que no se debe acabar llorando¡±. No culpo exclusivamente a quien (o quienes) hicieron los ¨²ltimos comentarios. Creo que ha sido un c¨²mulo de cosas; ha sido inevitable, me he roto al instante. ¡°Tienes una enfermedad rara¡±. ¡°Deja de ser gay¡±. ¡°?C¨®mo te pueden gustar los chicos?¡±. ¡°Das asco¡±. ¡°Maric¨®n de mierda¡±... Son tantos comentarios que llevo a?os intentando ignorar... Por mucho que te enga?es, que intentes autoconvencerte de que no importa lo que te digan, que t¨² eres como eres y da igual todo lo dem¨¢s¡ es mentira. Siempre te acaba afectando, sobre todo si te lo guardas para ti y no lo cuentas. Se acaba acumulando, y el sentimiento que te encuentras cuando llegas a un l¨ªmite es demoledor. Terminas creyendo lo que te dicen y asimilando que s¨ª, efectivamente, eres el malo de la pel¨ªcula: si se comportan de esa manera es culpa tuya.
No recuerdo un solo d¨ªa en el que no haya recibido alg¨²n comentario despectivo o que haga referencia directa a mi orientaci¨®n sexual, salvo aquellos en los que decido quedarme postrado en la cama o en la silla del ordenador intentando evadir la realidad. La realidad es la que es. Por desgracia, esto no solo me pasa a m¨ª, un adolescente de 15 a?os, sino que son muchas las personas que lo sufren d¨ªa a d¨ªa. Hoy yo me he roto por dentro, pero ma?ana podr¨ªa ser un familiar, un conocido, o incluso t¨². No permitas que vaya m¨¢s all¨¢, no te sientas culpable y, sobre todo, qui¨¦rete m¨¢s.
Juanma Ponferrada. M¨¢laga
Mejorar la atenci¨®n a los mayores
No solo son los bancos los que tratan mal a los mayores; lo mismo hace el sistema de atenci¨®n al ciudadano para resolver las gestiones relativas a la Seguridad Social, pensiones, etc¨¦tera. Es imposible para una persona mayor pedir ni siquiera una cita. Las administraciones permanecen cerradas a cal y canto, custodiadas por personal de seguridad que no abre nada m¨¢s que cuando entra alg¨²n funcionario. Los mayores, que est¨¢n fuera esperando a que alguien abra la puerta para preguntar, son repelidos con prepotencia y trato vejatorio. Les invito a comprobarlo. Es muy frustrante.
Susana Zapata Ca?izares. Madrid
A Francisco Gor
Por la necrol¨®gica que su compa?ero Llu¨ªs Bassets public¨® en este peri¨®dico el pasado 19 de marzo, he conocido la triste noticia del reciente fallecimiento de Francisco Gor, jefe de prensa del Ministerio de Justicia entre diciembre de 1982 y 1986, siendo el que esto escribe titular del departamento. Mi relaci¨®n con Paco comenz¨® antes de que comparti¨¦ramos responsabilidades en el edificio de la calle de San Bernardo de Madrid. Conoc¨ªa, por tanto, su oposici¨®n a la dictadura, su compromiso con la democracia y sus valores humanos y profesionales. Ninguna ocasi¨®n mejor que ¨¦sta para dejar constancia ¨Dtan sincera como afectuosa¨D de mi gratitud por haber tenido la fortuna de disfrutar de su inteligencia, honradez y competencia ejemplares.
Descanse en paz quien mucho contribuy¨® a la realizaci¨®n de los trabajos que entonces llevamos a cabo en cumplimiento de obligaciones pol¨ªticas contra¨ªdas con la sociedad espa?ola en las elecciones generales de octubre de 1982. Mi reconocimiento y homenaje siempre acompa?ar¨¢n a su memoria.
Fernando Ledesma Bartret. Madrid
Desconcertante
Los primeros movimientos de Alberto N¨²?ez-Feij¨®o son cuando menos desconcertantes. Da la impresi¨®n que el hasta ahora moderado en su parcela no sabe c¨®mo llevar las riendas de un pa¨ªs entero y suelta exabruptos sin ton ni son, como queriendo marcar terreno. Se?or Feij¨®o; lo de un pa¨ªs entero, m¨¢s que nada debido a su complejidad, requiere no solamente gesti¨®n, sino mucho temple, que es como usted nos vendi¨® la moto desde su querida Galicia; as¨ª pues, lo que de ahora en adelante tiene encomendado es otra cosa.
Mary Reme Verd¨² Ramo. Arrecife de Lanzarote
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