Sobre las protestas de los camioneros
Los lectores escriben sobre el paro de transportistas, los pol¨ªticos populistas, las condenas a manifestantes en Cuba y las huellas que pueden dejar en los menores los problemas familiares
Sin cuestionar la legitimidad de las reclamaciones de los transportistas, me gustar¨ªa hacer varias puntualizaciones: primero, que es un cierre patronal, pues cuando los trabajadores vamos a la huelga lo hacemos con servicios m¨ªnimos. En segundo lugar, antes de jalear a los piquetes deber¨ªamos saber un poco de estructuras de mercado para entender el problema de fondo: los mayoristas integran un oligopolio y los minoristas act¨²an en competencia perfecta, por lo que se convierten en precioaceptantes, como las granjas de leche. En tercer lugar, precisamente por lo anterior, y mal que les pese a los liberales, el Estado tiene que intervenir; de hecho, ha intervenido tanto que ya no se le piden responsabilidades a las empresas. No he visto a un solo camionero llevar la protesta a una empresa energ¨¦tica. Por ¨²ltimo, un sector, por muy leg¨ªtimas que sean sus peticiones, no puede secuestrar una econom¨ªa entera. Aqu¨ª el Estado tiene mucho que hacer, trazando las l¨ªneas maestras para los pr¨®ximos a?os, con un consenso que no hemos sido capaces de alcanzar ni con una pandemia.
Carmen Vallejo P¨¦rez. Redondela (Pontevedra)
Demagogia
Por desgracia, tiempos desoladores como los que vivimos son un terreno abonado para la demagogia m¨¢s vil y los l¨ªderes que desaf¨ªan la verdad m¨¢s elemental. Si la pol¨ªtica tuviera el rigor de la ciencia, los pol¨ªticos que claman a un mismo tiempo por una dr¨¢stica bajada de impuestos y un incremento sustancioso de las subvenciones quedar¨ªan expuestos a la burla de la ciudadan¨ªa. Ahora m¨¢s que nunca es cuando se evidencia la necesidad de una fiscalidad progresiva que permita ayudas urgentes a los sectores que las necesitan. No es con banderas ni con himnos como se solucionan los problemas, sino mediante la solidaridad y la aportaci¨®n de cada cual seg¨²n su capacidad. Lo dem¨¢s solo es abyecta ret¨®rica.
Juan Fern¨¢ndez S¨¢nchez. Madrid
Sentencia en Cuba
Mientras en Europa la guerra en Ucrania copa el foco, al otro lado del charco, el r¨¦gimen cubano ha sentenciado a decenas de j¨®venes a penas de c¨¢rcel de entre 6 y 30 a?os por reclamar libertad y mejores condiciones de vida en su pa¨ªs durante las protestas de julio pasado. ?Seguir¨¢ nuestra diplomacia poni¨¦ndose de perfil ante tan flagrante vulneraci¨®n de los derechos humanos m¨¢s elementales? ?No es hora de que se lleve a cabo alg¨²n tipo de iniciativa para impedir tama?a injusticia?
Daniel Garc¨ªa Delicado. Albacete
La mu?eca rota
Alguien una vez me dijo que yo era una mu?eca rota, por todo lo que he vivido y que me ha dejado fragmentada: separaci¨®n traum¨¢tica de mis progenitores, crecer sin padre y otros hechos que han supuesto que hoy sea fr¨¢gil. Por mi experiencia, el acto de amor incondicional m¨¢s grande que existe no es ser padre o madre, sino querer a los hijos de tu pareja, sin que esto les cueste un precio, sin intermitencias, sin condiciones... sin romper m¨¢s la mu?eca. Quiz¨¢ s¨ª soy una mu?eca rota, pero no me romp¨¦is m¨¢s y menos ahora que os necesito. A veces con amor, cura y mucho de cari?o, estas mu?ecas nos recuperamos, pero no nos hag¨¢is m¨¢s da?o, que los adultos sois vosotros.
Marta Llonch Riera. Castellar del Vall¨¨s (Barcelona)
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