La sostenibilidad como objetivo

La Agenda 2030 de Naciones Unidas se cre¨® en 2015 con la ambiciosa finalidad de lograr el cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible (ODS). Su eficacia se eval¨²a anualmente y el jueves se hizo p¨²blico el ¨²ltimo informe sobre los progresos que los 193 pa¨ªses firmantes han hecho en el ¨²ltimo a?o. Espa?a figura entre los Estados que registran avances, pero est¨¢ lejos de invitar al conformismo: mejora levemente su puntuaci¨®n (de 79,5 a 79,9 puntos) y su posici¨®n general, pero sigue sin haber avances en producci¨®n y consumo responsable ni en los usos del suelo.

Los efectos m¨¢s negativos de las crisis globales recaen en los pa¨ªses m¨¢s pobres y menos preparados para resistirlas. La pandemia ha afectado m¨¢s gravemente a los que est¨¢n m¨¢s lejos de cumplir los objetivos de desarrollo sostenible, pero son a la vez los que padecen de forma m¨¢s directa las consecuencias de su incumplimiento, en una especie de c¨ªrculo vicioso. A la cabeza de los m¨¢s cumplidores figuran Finlandia, Dinamarca y Suecia, y cierran el listado Sud¨¢n del Sur, Rep¨²blica Centroafricana y Chad. Los 25 primeros a la hora de cumplir son europeos.

Podr¨ªa pensarse que es una consecuencia natural del grado de desarrollo econ¨®mico, social y pol¨ªtico y, en parte, es as¨ª. Sin embargo, no hay que pasar por alto que la situaci¨®n se agrava por los efectos que el modelo econ¨®mico de los pa¨ªses desarrollados tiene sobre el conjunto. El ?ndice Internacional de Efectos Indirectos de 2022, incorporado en este informe, subraya que los pa¨ªses ricos generan efectos secundarios socioecon¨®micos y ambientales negativos, entre otras cosas, a trav¨¦s de las cadenas de suministro de las empresas occidentales y pr¨¢cticas comerciales corrosivas, como la contrataci¨®n de mano de obra m¨¢s barata con menos derechos o la extracci¨®n de materias primas sin generar valor en pa¨ªses de origen. De ah¨ª la importancia de contar con una Agenda como esta, que integra tambi¨¦n estos tres pilares para buscar soluciones en las dem¨¢s esferas, como un todo articulado que afecta a la vez al medio ambiente ¡ªcambio clim¨¢tico, salud de los ecosistemas, agua segura¡ª, a los aspectos sociales ¡ªeducaci¨®n, g¨¦nero, trabajo digno¡ª y a los factores de car¨¢cter pol¨ªtico.

El cambio de modelo que buscan los ODS solo ser¨¢ posible si, adem¨¢s de actuar en sus respectivos pa¨ªses, todos de forma coordinada son capaces de transformar elementos clave de su modelo econ¨®mico y articular pol¨ªticas globales de desarrollo en foros multilaterales. La pandemia ha mostrado la interdependencia del mundo actual y que ning¨²n gran reto se podr¨¢ abordar sin esa perspectiva global. Tanto la pandemia como la actual guerra en Ucrania imponen retrocesos en ese largo recorrido y aumentan el coste final que exigir¨¢ alcanzar los objetivos de sostenibilidad. La responsabilidad de los pa¨ªses desarrollados empieza por interiorizar una de las lecciones cruciales de la pandemia: mientras todo el mundo no est¨¦ a salvo, nadie lo estar¨¢.