El metaverso abre nuevas oportunidades para Am¨¦rica Latina
El presidente de Asuntos Globales de Meta, la compa?¨ªa due?a de Facebook, defiende la creaci¨®n de su nueva tecnolog¨ªa como ¡°una evoluci¨®n natural de internet¡± en la que los pa¨ªses latinoamericanos son un ¡°semillero de talento creativo¡±
Cuando Facebook cambi¨® su nombre a Meta el a?o pasado, muchos recibieron esta visi¨®n de una nueva era de tecnolog¨ªas inmersivas integradas, llamadas ¡°el metaverso¡±, con escepticismo. Es entendible. El escepticismo es una reacci¨®n natural a algo que parece sacado de una pel¨ªcula de ciencia ficci¨®n. Pero las tecnolog¨ªas emergentes que sientan las bases para el metaverso no son tan exageradas como pueden sonar y tendr¨¢n aplicaciones reales en la industria, la educaci¨®n, la salud y el comercio, entre otras actividades.
Muchas personas asumen que el metaverso se remite a la realidad virtual (RV), donde nos colocamos un visor para salir del mundo f¨ªsico que nos rodea y transportarnos a un nuevo espacio. Pero la RV es solo una parte del espectro. En realidad, comprende desde el uso de avatares, o el acceso al metaverso desde un tel¨¦fono, hasta lentes que proyectan im¨¢genes generadas por computadora sobre el mundo en el que estamos, o experiencias de realidad mixta que mezclan entornos f¨ªsicos y virtuales.
El metaverso no es un producto ¨²nico como Facebook o Instagram, ni tampoco es un sistema operativo como Microsoft Windows, o un dispositivo como el iPhone de Apple. Al igual que internet, el metaverso ser¨¢ un conjunto de tecnolog¨ªas, plataformas y productos. E, igual que ocurre con internet, no ser¨¢ construido ni administrado por una sola compa?¨ªa.
En muchos sentidos, esta es una evoluci¨®n natural de internet. Hemos pasado de servicios web basados principalmente en textos, a servicios basados en voz y video. El metaverso es la siguiente generaci¨®n. Se trata de una experiencia en 3D, m¨¢s envolvente, y caracterizada por la sensaci¨®n presencial, como si estuvieras all¨ª con otra persona o en un lugar diferente. Ser¨¢, en definitiva, una experiencia m¨¢s humana que la que tenemos hoy en Internet. M¨¢s f¨ªsica, interactiva, y basada en el habla, que la que ofrecen las pantallas planas cubiertas de texto e im¨¢genes. Adem¨¢s, tiene el potencial de abrir un mundo de oportunidades en Am¨¦rica Latina.
Las tecnolog¨ªas del metaverso est¨¢n ganando impulso en la regi¨®n, especialmente cuando se trata de realidad aumentada. M¨¢s de 100 millones de personas en Am¨¦rica Latina usan efectos de realidad aumentada en Facebook e Instagram todos los meses. Esto es equivalente a casi toda la poblaci¨®n de Italia y Espa?a combinadas. Y la regi¨®n es un semillero de talento creativo: Brasil y M¨¦xico est¨¢n entre los 10 pa¨ªses que m¨¢s usan el software de Meta, Spark AR, para desarrollar filtros de Instagram y Facebook.
Veamos el ejemplo de Pedro Afonso y Tom¨¢s Posse, dos j¨®venes artistas y emprendedores de S?o Paulo y Buenos Aires, respectivamente. Pedro se autocapacit¨® en dise?o digital 2D y 3D mientras trabajaba en publicidad. Con el tiempo construy¨® su propio negocio, cre¨® m¨¢s de 120 filtros y trabaj¨® con clientes reconocidos como la NBA. Tom¨¢s dej¨® su trabajo como dise?ador web en 2019, cuando los filtros de realidad aumentada que hac¨ªa en su tiempo libre se popularizaron. Abri¨® Tokyyto Estudio, donde crea experiencias de realidad aumentada para Instagram, Facebook y Messenger. Sus m¨¢s de 20 filtros en Instagram acumulan un impresionante total de 5.000 millones de impresiones.
Pensemos en el potencial para la educaci¨®n y la capacitaci¨®n. Con el metaverso ser¨¢ posible aprender de forma emp¨ªrica, no solamente como actores pasivos. Podremos hacerlo en 3D, dando vida a los estudios de historia, geometr¨ªa o arquitectura de maneras en que los pizarrones o las pantallas planas nunca pudieron. El aprendizaje no tendr¨¢ limitaciones geogr¨¢ficas y un estudiante en Santiago de Chile podr¨¢, por ejemplo, asistir al seminario de un profesor en Fr¨¢ncfort; o un estudiante en Montevideo hacer un viaje de campo a las pir¨¢mides de Guiza.
Y las oportunidades econ¨®micas son enormes. Un estudio reciente de la consultora financiera Analysis Group, encomendado por Meta, estim¨® que la econom¨ªa del metaverso en Am¨¦rica Latina podr¨ªa ser de 320.000 millones de d¨®lares en una d¨¦cada. Y Bloomberg Intelligence se?al¨® que la econom¨ªa global del metaverso llegar¨ªa a los 800.000 millones de d¨®lares en el 2024.
Una industria de ese tama?o podr¨ªa ser una usina de empleos. Empleos que no se limitar¨ªan a Silicon Valley. La econom¨ªa del metaverso no solo impactar¨¢ a las industrias que crear¨¢n su infraestructura, incluyendo hardware, software, sistemas de pago y proveedores de banda ancha, sino tambi¨¦n a sectores como el e-commerce, la educaci¨®n, el gaming y otros de bienes y servicios.
Todo esto puede sonar descabellado cuando sabemos que hoy muchas personas ni siquiera pueden pagar un simple plan de datos. Por supuesto, todo lo que dependa de un hardware tendr¨¢ un costo y todo lo que tenga un costo ser¨¢ menos accesible, en ciertos casos incluso prohibitivo, para personas de bajos ingresos. Habr¨¢n puntos de entrada de bajo precio para el metaverso, como los dispositivos m¨®viles, pero ser¨¢ inevitable tener que pagar por los visores de realidad virtual. Estamos decididos a hacer que nuestros visores sean lo m¨¢s accesibles posible, como parte de los esfuerzos de Meta por considerar activamente la diversidad, la equidad y la inclusi¨®n durante la construcci¨®n del metaverso.
Desarrollar el metaverso requerir¨¢ del apoyo de compa?¨ªas grandes y peque?as, de la sociedad civil y del sector p¨²blico, de Pedro, de Tom¨¢s, y de millones de creadores alrededor del mundo. Para colaborar con este objetivo, Meta est¨¢ trabajando junto con la Organizaci¨®n de los Estados Americanos para ofrecer entrenamientos y desarrollar las habilidades de estudiantes, creadores y due?os de peque?os negocios en espa?ol y en portugu¨¦s. En el ¨¢rea de educaci¨®n, nos aliamos tambi¨¦n con la plataforma de educaci¨®n en l¨ªnea Platzi y la universidad de artes visuales mexicana, CENTRO. En los ¨²ltimos seis meses, estos programas han entregado m¨¢s de 13.000 cursos de capacitaci¨®n.
Estamos en una etapa inicial y crucial para el desarrollo de estas tecnolog¨ªas. Muchos de estos productos ser¨¢n una realidad en 10 o 15 a?os. Mientras se construyen, el tiempo est¨¢ a nuestro favor para establecer reglas y protecciones adecuadas para maximizar su potencial, generar bienestar y minimizar da?os potenciales. Y debe hacerse de forma abierta y colaborativa entre el sector privado, legisladores, sociedad civil, acad¨¦micos y usuarios.
Por esta raz¨®n tambi¨¦n nos aliamos con diversas organizaciones latinoamericanas, como Safernet, en Brasil; C-Minds Eon Resilience Lab, en M¨¦xico; y Fundaci¨®n Universidad de San Andr¨¦s, en Argentina. Todas ellas a trav¨¦s de nuestro Fondo global para el desarrollo de programas e investigaciones sobre realidad extendida (XR), que dispone de 50 millones de d¨®lares. Estas colaboraciones son parte de un esfuerzo para consultar de forma oportuna y constante a expertos independientes, acad¨¦micos y sociedad civil en aquellas ¨¢reas que requieren un abordaje fundacional para asegurar que estas tecnolog¨ªas son desarrolladas responsablemente.
El metaverso traer¨¢ un gran potencial de progreso social y econ¨®mico en el mundo y en Am¨¦rica Latina. Tambi¨¦n, representar¨¢ riesgos y retos, muchos de los cuales se pueden anticipar. Nuestra esperanza es que hayamos aprendido las lecciones que nos dejaron los avances tecnol¨®gicos previos, y que las reglas, est¨¢ndares y normas que gobiernen el metaverso puedan ser perfeccionadas en t¨¢ndem junto con las propias tecnolog¨ªas que lo constituir¨¢n.
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