Ucrania en la UE

La dram¨¢tica situaci¨®n que vive Ucrania justifica la aceleraci¨®n del proceso de adhesi¨®n a la UE del pa¨ªs en guerra. Los gestos pol¨ªticos de Ursula von der Leyen han sido expl¨ªcitos y casan bien con el sentir mayoritario de la poblaci¨®n europea. El riesgo de un ingreso precipitado es la otra cara de la moneda en un contexto de tensiones pol¨ªticas internas a la UE de car¨¢cter iliberal y un cuestionamiento abierto por parte de varias formaciones pol¨ªticas de elementos estructurales de la propia Uni¨®n. Hoy en la lista de candidatos est¨¢n Turqu¨ªa, Albania, Montenegro, Macedonia del Norte y Serbia, pero acaba de ampliarse con las solicitudes recientes ¡ªtras la invasi¨®n rusa del 24 de febrero¡ª de Ucrania, Moldavia y Georgia para hacer frente mejor pertrechados al nuevo mundo que ha abierto el ataque de Vlad¨ªmir Putin.

La situaci¨®n es nueva, la guerra es impredecible y las recientes solicitudes exigen de la UE una agilidad imaginativa capaz de armonizar situaciones de partida muy distintas, de la misma manera que Albania o Turqu¨ªa viven procesos democratizadores muy dispares. Algo parecido sucede con otros pa¨ªses candidatos o aspirantes a ingresar en la UE, y ese es seguramente el trasfondo que explica la propuesta de Emmanuel Macron de asumir formalmente varias velocidades para afrontar esa diversidad de situaciones. Junto a los 27 miembros actuales, Macron ha defendido la constituci¨®n de una ¡°comunidad pol¨ªtica europea¡± equivalente a una suerte de confederaci¨®n destinada a reunir a los pa¨ªses que aspiran a entrar en la Uni¨®n Europea. El coraz¨®n de la Uni¨®n m¨¢s comprometido avanzar¨ªa en su propio proceso integrador a medida que hacen lo propio pa¨ªses que deben asumir reformas estructurales y relevantes para cumplir con los requisitos de adhesi¨®n a los Veintisiete en t¨¦rminos de lucha contra la corrupci¨®n, transparencia democr¨¢tica, independencia de los poderes, igualdad de derechos de las mujeres o protecci¨®n de las minor¨ªas.

Es relevante el respeto a estas condiciones porque el modelo europeo est¨¢ siendo cuestionado por el eje autocr¨¢tico Mosc¨²-Pek¨ªn: ha visto en el debilitamiento de las instituciones democr¨¢ticas occidentales una oportunidad para afianzar su contramodelo. Devaluar los criterios para acelerar el tr¨¢mite de admisi¨®n de Ucrania restar¨ªa legitimidad a la UE para erigirse como sistema coherente en un momento en el que muchas de las inestabilidades que amenazan a las democracias provienen de sus propias fallas internas, y no solo de manipulaciones externas. Hoy la guerra sigue en Ucrania, pero el futuro exigir¨¢ una reconstrucci¨®n con elevados fondos estructurales que permitir¨¢n verificar estrechamente la inversi¨®n en un pa¨ªs devastado en busca de una legitimidad claramente proeurope¨ªsta y dispuesta a asumir sus condiciones democr¨¢ticas. La resistencia ucrania contra Putin ha dejado claro de qu¨¦ lado est¨¢, al precio de la destrucci¨®n de su pa¨ªs. Es momento de que Europa corresponda a esa respuesta sin ambages y sin rebajar la lealtad a lo que es y a lo que quiere representar en el mundo.