Universidad en reconstrucci¨®n

El sistema universitario espa?ol no est¨¢ intelectualmente catat¨®nico, como a veces los m¨¢s veteranos se obstinan en creer, pero s¨ª pide desde hace tiempo una intervenci¨®n en m¨²ltiples ¨¢mbitos de su funcionamiento, desde una endogamia fomentada por la mala costumbre (y por la propia legislaci¨®n) hasta una hiperburocratizaci¨®n a veces paralizante. Entre los puntos fuertes de la Ley Org¨¢nica del Sistema Universitario est¨¢ la exigencia de elevar hasta el 1% del PIB la financiaci¨®n universitaria (ahora est¨¢ en torno al 0,7%). Tambi¨¦n aborda uno de los problemas m¨¢s graves: el alto ¨ªndice de precariedad en las plantillas hace que muchos profesores no logren estabilizar su carrera hasta m¨¢s all¨¢ de los 45 a?os.

Tras casi una d¨¦cada con tasas de reposici¨®n de las bajas por jubilaci¨®n de entre el 10% y el 50%, las universidades p¨²blicas espa?olas han sobrevivido cubriendo las horas de docencia con falsos profesores asociados con sueldos que rondan los 500 euros al mes. La nueva ley pretende regularizar la situaci¨®n de la mayor¨ªa de los 25.000 afectados, limitando al 20% la proporci¨®n de docentes con contrato laboral temporal, y restituir la figura del profesor asociado a su buen origen: un profesional de prestigio en activo que aporta competencia y experiencia al aula, casi siempre por vocaci¨®n y ganas de compartir su saber. Los afectados objetan que la ley no estabiliza a las personas sino las plazas, porque habr¨¢ que presentarse a un concurso de m¨¦ritos de libre acceso. Ese sistema permite consolidar a los mejor preparados, pero tambi¨¦n incorporar a quienes sin haber estado en la Universidad podr¨ªan, y a veces deber¨ªan, haberlo estado antes por la calidad de su investigaci¨®n, y no por factores azarosos o meramente coyunturales (como haber sabido frecuentar este o aquel despacho).

No es el ¨²nico instrumento contra la empobrecedora endogamia: las comisiones de acceso a una plaza docente deber¨¢n estar ¡°integradas por una mayor¨ªa de miembros externos a la universidad convocante elegidos por sorteo p¨²blico¡±, lo cual est¨¢ destinado a impedir que una plaza lleve escrito el nombre del candidato que suele llamarse ¡°de la casa¡±. Favorecer la internacionalizaci¨®n de una Universidad que apenas cuenta con un 2% de profesores extranjeros es otro buen dato para atraer talento exterior dispuesto a ense?ar e investigar en Espa?a. La reserva del 15% de las plazas a investigadores con m¨¦ritos acreditados es otra buena noticia, como lo es dedicar un m¨ªnimo del 5% del presupuesto a investigaci¨®n, pensado para que las universidades privadas no puedan serlo si no incorporan tambi¨¦n la investigaci¨®n a sus tareas ordinarias. Quedan cosas por hacer, pero la ley favorece la internacionalizaci¨®n, la calidad investigadora del profesorado (aunque sigue pendiente la revisi¨®n de los criterios de acreditaci¨®n) y la reducci¨®n de la precariedad largamente denunciada de los asociados.