Un reparto m¨¢s justo
El Gobierno pretende evitar que bancos y energ¨¦ticas trasladen a los clientes el coste de los nuevos impuestos
Los grupos parlamentarios que forman el Gobierno de coalici¨®n, PSOE y Unidas Podemos, presentaron este jueves la proposici¨®n de ley que permite crear los nuevos grav¨¢menes sobre la banca y las empresas energ¨¦ticas anunciados por el presidente Pedro S¨¢nchez en el reciente debate sobre el estado de la naci¨®n. Las nuevas figuras tendr¨¢n car¨¢cter temporal, los a?os 2023 y 2024, y no se aplicar¨¢n sobre los beneficios, sino sobr...
Los grupos parlamentarios que forman el Gobierno de coalici¨®n, PSOE y Unidas Podemos, presentaron este jueves la proposici¨®n de ley que permite crear los nuevos grav¨¢menes sobre la banca y las empresas energ¨¦ticas anunciados por el presidente Pedro S¨¢nchez en el reciente debate sobre el estado de la naci¨®n. Las nuevas figuras tendr¨¢n car¨¢cter temporal, los a?os 2023 y 2024, y no se aplicar¨¢n sobre los beneficios, sino sobre los ingresos de aquellas compa?¨ªas energ¨¦ticas que superan los 1.000 millones de euros y los 800, en el caso de los bancos. En concreto, se aplicar¨¢ un tipo del 1,2% sobre el importe neto de la cifra de negocio de las energ¨¦ticas y del 4,8% sobre las comisiones e intereses que cobran los bancos. En ning¨²n caso, estos impuestos extraordinarios podr¨¢n deducirse en el impuesto sobre sociedades ni se podr¨¢n trasladar a los clientes, so pena de una sanci¨®n del 150% del importe repercutido al consumidor.
En los ¨²ltimos meses, organismos internacionales como la OCDE, y m¨¢s recientemente el Banco Central Europeo, han advertido sobre los denominados beneficios ca¨ªdos del cielo que las actuales circunstancias est¨¢n propiciando a las compa?¨ªas. En el caso de las energ¨¦ticas europeas, el sistema marginalista de fijaci¨®n de precios vincula el precio del kilovatio a la cotizaci¨®n del gas, as¨ª como la subida del precio del petr¨®leo derivado de la guerra en Ucrania ha engordado los beneficios de las petroleras. En el caso de los bancos, ahora que los tipos de inter¨¦s han empezado a subir, pueden obtener importantes beneficios solo con depositar en el banco central la financiaci¨®n ultrabarata que el BCE ofreci¨® a las entidades en plena pandemia. Y las cifras de la Agencia Tributaria establecen que existe una relaci¨®n entre los beneficios de este sector y la evoluci¨®n del precio del dinero.
En todo caso, tiempo habr¨¢ durante la tramitaci¨®n parlamentaria de mejorar el dise?o de los proyectos si fuera necesario y de dialogar con los sectores afectados, puesto que a mayor grado de consenso, mayores posibilidades de ¨¦xito tendr¨¢ la medida.
Son numerosas las voces que advierten de las dificultades de impedir que tanto la banca como las energ¨¦ticas trasladen el coste a los clientes, por mucho que el Gobierno haya encargado su supervisi¨®n a la Comisi¨®n Nacional de los Mercados y la Competencia y al propio Banco de Espa?a, en el caso de la banca. Pero no ser¨¢ sencillo. Bastar¨ªa, por ejemplo, con que las entidades financieras no repercutan la subida de los tipos de inter¨¦s del BCE sobre la remuneraci¨®n de los dep¨®sitos y es dif¨ªcil establecer una sanci¨®n por ello.
Estos impuestos est¨¢n dise?ados como una pieza m¨¢s del necesario pacto de rentas que habr¨ªa que suscribir despu¨¦s del verano. El objetivo es que estos sectores, con un importante m¨²sculo financiero, arrimen el hombro con una contribuci¨®n necesaria para financiar medidas que alivien el impacto de la inflaci¨®n. Todas las partes tendr¨¢n que hacerlo para capear las consecuencias de una crisis energ¨¦tica agravada por la guerra en Ucrania y que se ceba especialmente con los hogares m¨¢s vulnerables. Si los trabajadores tienen que moderar sus aspiraciones salariales, las empresas tambi¨¦n habr¨¢n de contribuir con unos menores m¨¢rgenes. Los nuevos impuestos temporales est¨¢n precisamente enfocados en capturar una porci¨®n, siquiera menor, de esos beneficios para asegurar un reparto algo m¨¢s justo.