Hu¨¦rfanos de Ana Lu¨ªsa Amaral

Lo escribi¨® Cristina Peri Rossi: ¡°Est¨²pido domingo, el d¨ªa m¨¢s triste y pesaroso. El domingo es un d¨ªa clausurado: la realidad est¨¢ ah¨ª, sin esperanza, sin adornos, es decir, sin arte¡±. As¨ª fue el pasado domingo, sin adornos, sin arte, al abrir las p¨¢ginas de este peri¨®dico y leer lo que nunca habr¨ªa querido leer: tu muerte, mi querida Ana Lu¨ªsa Amaral. Tu ausencia nos deja a muchas personas hu¨¦rfanas de tu entusiasmo, de tu poes¨ªa y de tu extraordinaria generosidad. Profesora ¡°ex¨®tica¡± que nadaba a contracorriente de la soberbia y el aburrimiento de tantos despachos universitarios, mujer fascinante, cercana y directa, real como la vida misma, pero ataviada con el arte de la palabra, de la humanidad y de la humildad en estado puro. Este jueves, en Rota, record¨¢bamos con emoci¨®n a Almudena Grandes, y desde este mismo rinc¨®n te recuerdo a ti, nuestras conversaciones en Porto, tus cigarrillos, tu arrolladora vitalidad, tu coche destartalado, la musicalidad de tu acento, todo lo que me regalaste con tu compa?¨ªa.

Mar¨ªa Aboal. Madrid

Salir de tu pueblo

No hay nada como salir de tu pueblo para darte cuenta de la realidad. En Centroeuropa, las calles est¨¢n limpias, sin colillas, por ellas se puede andar, no hay motos que bloquean las aceras, hay parques abiertos, con fuentes abiertas, con arcos con agua en aspersores para combatir el calor, con camiones de bomberos que dispensan agua donde no hay fuentes¡­ ?Lo mismo que en Madrid!

Joaqu¨ªn Y¨¢?ez G¨®mez. Madrid

Necesidad de consenso

En plena crisis clim¨¢tica y energ¨¦tica, el Gobierno y la oposici¨®n llevan horas discutiendo sobre la temperatura del aire acondicionado de los bares y la hora a la que hay que apagar los escaparates. Un debate tan rocambolesco como frecuente porque ni es el primero ni va a ser el ¨²ltimo. No s¨¦ cu¨¢ndo se va a dar cuenta este Gobierno de que, si hay que tomar medidas dr¨¢sticas y urgentes, hay que consensuarlas con la oposici¨®n y explicarlas para que la gente las entienda. Si no se hace as¨ª, el Ejecutivo ir¨¢, por un lado, y la oposici¨®n, por el contrario. No hay nada m¨¢s impopular que las prohibiciones. Sucedi¨® con la pandemia y ahora vuelve a suceder con la m¨¢s que probable escasez de energ¨ªa que se vislumbra si contin¨²a la guerra de Ucrania.

Mario Su¨¢rez. Pilas (Sevilla)

Fiestas seguras

Es lamentable que en este pa¨ªs no haya seguridad para las mujeres, que haya pinchazos y abusos sexuales y que el alcohol corra como una riada, porque sin alcohol no hay diversi¨®n. En el primer d¨ªa de la fiesta de San Lorenzo en Huesca hubo dos denuncias por pinchazos y otra de abusos. Adem¨¢s, se atendi¨® en las primeras horas a 30 personas en el hospital de campa?a montado por Protecci¨®n Civil por cortes con cristales, heridas a causa de ca¨ªdas e intoxicaciones et¨ªlicas. Lamentable que no sepamos divertirnos de manera sana, sin exceso de alcohol, sin agresiones y sin abusos. Extra?a forma de celebrar unas fiestas. Para los padres de hijas, cada d¨ªa de fiesta es una preocupaci¨®n importante. Si ya preocupaba el problema de las agresiones sexuales, lo que parece nueva moda de los pinchazos con el objetivo de una sumisi¨®n qu¨ªmica es un problema a?adido que inquieta mucho.

Martina Pellejero Cu¨¦llar. Zaragoza