Sunak y la inmigraci¨®n

El primer ministro del Reino Unido, Rishi Sunak, ha decidido redoblar su apuesta de endurecer la pol¨ªtica contra la inmigraci¨®n irregular para calmar al ala dura y euroesc¨¦ptica del Partido Conservador. Sus promesas, sin embargo, corren el riesgo de darse de bruces contra una realidad que ninguno de sus antecesores ha sido capaz de controlar. El Brexit, que siempre tuvo un alto componente de xenofobia, trajo consigo la promesa de que los brit¨¢nicos ser¨ªan finalmente capaces de recuperar el control de sus fronteras. Desde su aprobaci¨®n, el flujo de inmigrantes que acceden al pa¨ªs no ha dejado de crecer cada a?o. Si en 2018, el n¨²mero de personas que se lanzaron a atravesar el canal de la Mancha desde la costa francesa para llegar a territorio ingl¨¦s no lleg¨® a 800, 2022 est¨¢ a punto de terminar con m¨¢s de 40.000 inmigrantes interceptados. Cuatro de ellos fallecieron en la madrugada de este mi¨¦rcoles, al hundirse la fr¨¢gil embarcaci¨®n que transportaba a un total de medio centenar.

Es cierto que, en el ¨²ltimo a?o, una de cada cuatro de las personas que han sido detectadas en la peligrosa traves¨ªa mar¨ªtima es de origen alban¨¦s. Las autoridades brit¨¢nicas se?alan al pa¨ªs balc¨¢nico como el origen de las mafias que se dedican al tr¨¢fico ilegal de inmigrantes, y tanto Boris Johnson en su momento, como Sunak ahora, han prometido mano dura contra esta forma de delincuencia. Al situar al margen de la ley a los reci¨¦n llegados ¡ªque en su mayor¨ªa procedentes de Siria o Afganist¨¢n¡ª, el Ejecutivo de Sunak se?ala como culpable a quien accede al pa¨ªs en busca de oportunidades econ¨®micas. Sunak promete ahora m¨¢s polic¨ªas para controlar la costa, la reanudaci¨®n de la pol¨ªtica de deportaciones a Ruanda que fren¨® el pasado junio el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, y nuevas leyes para endurecer a¨²n m¨¢s la tramitaci¨®n de las solicitudes de asilo. El primer ministro ha anunciado que pondr¨¢ fin antes de que acabe 2023 al atasco actual del sistema legal brit¨¢nico, con m¨¢s de 160.000 personas a la espera de una resoluci¨®n sobre su estancia en el Reino Unido.

El continente europeo lleva a?os viviendo una situaci¨®n semejante pero Downing Street ha decidido responder con un discurso compasivo que camufla realmente una estrategia policial para criminalizar a los reci¨¦n llegados. Sunak dif¨ªcilmente saciar¨¢ con estos anuncios al ala m¨¢s dura de su partido, que exige ya al primer ministro que desvincule al pa¨ªs de la Convenci¨®n Europea de Derechos Humanos que el propio Reino Unido contribuy¨® a impulsar en la d¨¦cada de los cincuenta del siglo pasado. Piensan que tendr¨¢n as¨ª las manos m¨¢s libres para solucionar de modo expeditivo el problema, sin entender que se trata de un desaf¨ªo global para el que no existe una soluci¨®n ¨²nica.