ChatGPT: ?aliado o enemigo?
Los lectores escriben sobre la inteligencia artificial en la educaci¨®n, la pol¨ªtica de D¨ªaz Ayuso en Madrid, la despoblaci¨®n y la guerra en Ucrania
La inteligencia artificial va a ser un asunto crucial tanto en el a?o 2023 como en los a?os venideros por su capacidad de automatizar tareas y proporcionar soluciones innovadoras a problemas complejos. Es el caso de ChatGPT, una aplicaci¨®n lanzada por la empresa OpenAI que es capaz de interactuar como si fuera un humano y responder a cualquier pregunta que se le haga. Naturalmente, ya hay estudiantes que utilizan esta herramienta para hacer trampas en los ex¨¢menes o en los trabajos, aun sabiendo que el plagio est¨¢ penado. Las primeras alarmas en encenderse han sido las de los colegios, institutos y universidades, que no han dudado en abrir un debate sobre el uso de la tecnolog¨ªa en las aulas. Es necesario estudiar y analizar los usos y riesgos de esta tecnolog¨ªa innovadora con el objetivo de crear una legislaci¨®n robusta que convierta a la inteligencia artificial en aliada y no en enemiga porque, si algo sabemos, es que ha llegado para quedarse.
Paula Santolaya del Burgo. Madrid
La pol¨ªtica de Ayuso
Isabel D¨ªaz Ayuso es una pol¨ªtica. Nunca ha sido otra cosa. Sus decisiones son pol¨ªticas, y nos afectan a todos los habitantes de esta comunidad. Por eso, cuando no nos gustan, se las criticamos, y lo hacemos desde un punto de vista pol¨ªtico. No hablamos de su vida privada, no nos importan sus parejas o su vestimenta. Y s¨ª, nuestras protestas son pol¨ªticas, como no pod¨ªa ser de otra manera. Protestamos por el presupuesto dedicado a la Sanidad P¨²blica (que es la nuestra) y a las universidades, y sobre c¨®mo trat¨® a los mayores en las residencias, ?a cu¨¢ntos, por decisiones pol¨ªticas, dej¨® morir? Y s¨ª, las protestas contra las decisiones que toma D¨ªaz Ayuso son pol¨ªticas.
Fernando Gruber Gamechogoicoechea. Madrid
Nuestros pueblos se mueren
Ser joven en un pueblo de la Espa?a vaciada actualmente es algo hasta raro, todos hemos salido corriendo a la ciudad. Da pena ver que el lugar donde has crecido no te ofrece la posibilidad de quedarte y tener un futuro en tu casa. Nuestros pol¨ªticos no son capaces de proteger nuestras ra¨ªces, se han olvidado de que por mucho que nos intenten echar, queremos seguir protegiendo nuestros queridos pueblos.
?ngela Mart¨ªn Garc¨ªa. Medina del Campo (Valladolid)
La normalidad de una guerra
Parec¨ªa que no, que no llegar¨ªa, pero lleg¨®. La guerra se plant¨® en esta Europa en la que entend¨ªamos que nada malo podr¨ªa ocurrir. Llevamos casi un a?o y ya todos la asimilamos como algo normal. Los medios se refieren a ella con una naturalidad que pone los pelos de punta. De nada ha servido esta gran organizaci¨®n europea de la que presumimos, la guerra lleg¨® y la supuesta hermandad no ha sido capaz de dar respuesta a la locura. Mientras, entre balazo y balazo, los poderosos monstruos del negocio armament¨ªstico est¨¢n felices y encantados con este nuevo horroroso espect¨¢culo de la condici¨®n humana y de los ominosos negocios e intereses de los que nada nos cuentan. Quiz¨¢, porque a nosotros tampoco nos interesen, eso s¨ª, mientras los disparos no vengan en nuestra direcci¨®n.
Manuel I. Nan¨ªn. O Carballi?o (Ourense)
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