Mejores maestros

La batalla por mejorar la formaci¨®n de los grados de Maestro de Educaci¨®n Infantil y Primaria y la calidad del m¨¢ster obligatorio para ser profesor de secundaria llega en plena revoluci¨®n tecnol¨®gica y cuando los nuevos h¨¢bitos de aprendizaje y de consumo cultural se han introducido en las casas y las familias. No existe una receta m¨¢gica y fulminante para ello, pero la ¡°prueba de aptitud personal¡± que promueven 70 decanos de las facultades de Educaci¨®n para seleccionar a sus estudiantes (y por tanto, a los futuros maestros de nuestros hijos) ha sido ¡°descartada¡± por el Ministerio de Universidades, que es quien tiene las competencias sobre la materia. El plan no es nuevo: hace ya un a?o el Ministerio de Educaci¨®n promovi¨® un proyecto destinado al mismo objetivo a trav¨¦s de una prueba con varios ex¨¢menes, escritos y orales, con el fin de filtrar al alumnado con mejor potencial para ese desempe?o espec¨ªfico.

La demanda es casi un¨¢nime entre los decanos ante el desequilibrio actual entre una enorme demanda de alumnos y una oferta de empleo mucho menor. Pero la causa central es otra: la petici¨®n de una prueba de ingreso en la carrera est¨¢ basada en la necesidad de preseleccionar al alumnado tanto desde el punto de vista de sus conocimientos como desde el punto de vista de su aptitud comunicativa y capacidad de razonamiento cr¨ªtico, al margen de la selectividad que habr¨¢n tenido que superar. Entre las propuestas de los decanos figura tambi¨¦n un periodo de pr¨¢cticas remuneradas, nuevos planes de estudio, la actualizaci¨®n de un modelo de oposici¨®n con temarios anticuados, adem¨¢s de nuevos requisitos para acceder al m¨¢ster para el profesorado de secundaria.

Catalu?a y Baleares han implantado un modelo parecido y as¨ª lo hacen Dinamarca, Holanda, Italia, Portugal o, por supuesto, Finlandia, el referente global en educaci¨®n. Sin embargo, el Ministerio de Universidades ha desestimado la propuesta de los decanos, que s¨ª hab¨ªa asumido el Ministerio de Educaci¨®n, argumentando que la prueba no es adecuada, implicar¨ªa dificultades log¨ªsticas y podr¨ªa abrir la puerta a que otras ¨¢reas de estudio universitarias plantearan exigencias semejantes. Tambi¨¦n un sector de los rectores (de universidades p¨²blicas y privadas) se opone, ante la perspectiva de que las pruebas reducir¨ªan el n¨²mero de estudiantes, lo que a su vez reducir¨ªa los presupuestos que tienen asignados.

La educaci¨®n primaria es el primer laboratorio de ciudadanos y cuidar su formaci¨®n de modo preferente es raz¨®n de peso suficiente para justificar una prueba que pueda dejar fuera a algunos de sus potenciales alumnos por falta de idoneidad o de competencia. La resistencia de la Conferencia de Rectores (CRUE) es poco comprensible en t¨¦rminos conceptuales e intelectuales. Nada deber¨ªa impedir que una negociaci¨®n entre las partes ¡ªEducaci¨®n, Universidades, decanos y rectores¡ª encontrase la v¨ªa en su reuni¨®n del pr¨®ximo viernes para elevar el nivel de exigencia que permita proveer para el futuro una cantera de profesores implicados con las nuevas competencias, capaces de razonar y empatizar con los chavales y conectados con una sensibilidad contempor¨¢nea que a veces parece excluida tanto de las aulas universitarias como de las escolares.