¡®Trumpinator¡¯

Como un mal dolor de muelas, Trump ha vuelto. Los responsables de Twitter, Facebook y YouTube han considerado que el hecho de que el expresidente estadounidense recurriera a sus cuentas para alentar un golpe de Estado en nombre de un fraude electoral no demostrado, como sucedi¨® en enero de 2021, ya no es raz¨®n suficiente para dejarle fuera del tablero por m¨¢s tiempo. Pelillos a la mar. ¡°He vuelto¡±, declar¨® Trump a trav¨¦s de publicaciones en sus rehabilitados canales de Facebook, Instagram y YouTube. Lo que vuelve no es solo una forma incendiaria de estar en pol¨ªtica y conquistar el poder, sino la rehabilitaci¨®n de la hoja de ruta para conseguirlo, plenamente legitimada. Todo un mensaje para la parroquia ultra, los s¨¢trapas del mundo o para partidos y candidatos sin escr¨²pulos: ya tienen d¨®nde mirarse y seguir copiando sin rubor.

El retorno de Trump ha sido celebrado en Twitter con algunas paletadas de desinformaci¨®n, como no pod¨ªa ser de otra manera. M¨¢s de medio mill¨®n de visualizaciones y miles de compartidos acumula ya el tuit que muestra las im¨¢genes de la supuesta marcha que una multitud de simpatizantes protagoniz¨® el pasado fin de semana frente a la torre Trump de Nueva York, tras el anuncio del expresidente de su inminente arresto. El v¨ªdeo, que proced¨ªa de TikTok, ha llegado tambi¨¦n a Francia, donde ha sido visto por miles de personas. Sin embargo, el pasado fin de semana no se produjo esa manifestaci¨®n en apoyo de Trump: se trataba de unas im¨¢genes de octubre de 2020 que alguien puso a circular para hacerlas pasar por actuales y transmitir la idea de una movilizaci¨®n popular creciente a favor del exmandatario.

El Twitter de 2023 es un ed¨¦n para los que, como Trump, juegan en el campo de la desinformaci¨®n. Como si la falta de equipos de moderaci¨®n de contenidos no fuera ya un problema mayor, se une ahora la generalizaci¨®n en el uso de la inteligencia artificial. El periodista Emilio Domenech, @nanisimo, comparti¨® hace algunos d¨ªas una fotograf¨ªa en la que Trump, cabizbajo, era conducido por dos agentes hasta un veh¨ªculo policial. Una secuencia de un realismo sorprendente pero que fue montada con la ayuda de un ordenador. Como alerta Domenech desde su Twitter, vamos a tener que empezar a cuidar mucho las im¨¢genes con las que nos informamos. Las inteligencias artificiales generativas solo necesitan perfeccionar algunos flecos antes de cumplir todos los requisitos para que sea imposible distinguir sus creaciones de la realidad¡±.

A pesar del tir¨®n de Twitter, la vuelta al poder de Trump se est¨¢ jugando ya en las redes de Meta, Facebook e Instagram, l¨ªderes mundiales en usuarios y dotados de una herramienta publicitaria capaz de segmentar los mensajes por p¨²blicos como ninguna otra. Seg¨²n el archivo de Facebook, desde 2018 los equipos de Trump han gastado 110 millones de d¨®lares en mensajes pol¨ªticos pagados en estas plataformas para sus campa?as. Actualmente, una organizaci¨®n af¨ªn al presidente, The Proud Patriots, aparece en el top 20 de las empresas y organizaciones de Estados Unidos que m¨¢s dinero est¨¢n invirtiendo para difundir propaganda pol¨ªtica en Facebook e Instagram. La recogida de fondos ha empezado con un variado merchandising que incluye camisetas con dibujos de un fusil de asalto y una advertencia a Biden: ¡°Hell no, Joe¡±. El producto estrella es el peque?o mu?eco articulado que reproduce la versi¨®n Trump de Terminator. Trumpinator mueve la cabecilla de un lado a otro como lo hac¨ªa El Fary en los salpicaderos de los coches espa?oles. Pero este hace menos gracia.