La amnist¨ªa y los ni?os

Hace unos d¨ªas, Alberto N¨²?ez Feij¨®o subi¨® a la tribuna del Congreso y afirm¨® que ten¨ªa en su mano sumar los votos que le har¨ªan presidente del Gobierno pero renunciaba a ellos por principios. Era imposible porque Junts y Vox nunca hubieran participado en la misma ecuaci¨®n, aunque ¨¦l lo dijo as¨ª una vez y lo repiti¨® otra en un discurso en el que advirti¨® de la ¡°decadencia moral¡± de Espa?a. El PP llam¨® a diputados del PSOE a que rompieran con su partido, se?al¨® su opci¨®n como la ¨²nica constitucional y reclam¨® el derecho a gobernar por tener m¨¢s votos por mucho que la Constituci¨®n no diga nada de eso. Ahora, fracasada una investidura que no tuvo opciones jam¨¢s, Feij¨®o anticipa que va a empezar el teatro y el oscurantismo.

Hace unos meses, la direcci¨®n del PSOE sosten¨ªa que la amnist¨ªa no pod¨ªa ser y no encajaba, que no eran igual los indultos que el perd¨®n que exig¨ªan los independentistas. Ahora, designado candidato por el rey un 3 de octubre ¡ªaniversario del discurso que dio el monarca en lo m¨¢s ¨¢lgido del proc¨¦s¡ª, S¨¢nchez juega al tab¨² con la palabra que antes negaba. Para no citarla cita otras, y deja que lleguemos solos a la conclusi¨®n como en los ejercicios de la escuela en los que practicabas los campos sem¨¢nticos: generosidad, liderazgo, pol¨ªtica y convivencia, dice.

Ocurre que todas esas palabras las menciona a las puertas de su investidura, cuando ERC asegura que ya ha aceptado la amnist¨ªa y que ya circulan documentos; cuando Sumar ha dicho que el PSOE se mueve por oportunismo, no por convicci¨®n. Despu¨¦s de que hubieran hablado los dem¨¢s, S¨¢nchez ten¨ªa este martes la primera oportunidad para explicar si estamos ante uno de los cambios de opini¨®n con los que justific¨® sus giros en campa?a. De momento, ha preferido ganar tiempo hasta que se le acabe el diccionario. Luego, promete la explicaci¨®n que debe.

Hace unos a?os, ERC y Junts gobernaban en coalici¨®n. Prometieron la independencia y fue un mosso el que zanj¨® la ilusi¨®n en un pasaje quiz¨¢ anecd¨®tico, pero revelador: ¡°La rep¨²blica no existe, idiota¡±. Ahora que andan a la gre?a, ERC y Junts han puesto por escrito que sin refer¨¦ndum no hay investidura y, justo cuando alcanzan lo que hace tiempo que no lograban ¡ªun acuerdo¡ª, sus dirigentes no llegan a ir tan lejos en sus declaraciones sobre lo que acaban de firmar. En este momento, y en general, no se sabe bien qu¨¦ palabra vale m¨¢s ni cu¨¢nto vale cada palabra.

Hay un libro de David Trueba basado en una campa?a electoral donde describe la forma en que uno de los estrategas m¨¢s l¨²cidos se refiere a los votantes. La novela se titula Queridos ni?os.