Una inquietante equidistancia
Los lectores escriben sobre la guerra entre Israel y Ham¨¢s, la inmigraci¨®n en Canarias y la posible amnist¨ªa a los pol¨ªticos del ¡®proc¨¦s¡¯
Varios pol¨ªticos de izquierdas han matizado el rechazo a la reciente violencia de Ham¨¢s, concretamente el asalto a tiro limpio de un macroconcierto que se ha llevado por delante m¨¢s de 200 vidas. Es m¨¢s, en un minuto de silencio institucional en el Ayuntamiento de Madrid se han desmarcado con la odiosa frase ¡°queremos que se condene toda violencia¡±. ?Os suena? Como votante de izquierdas me llevan los demonios, no lo puedo evitar, cuando caemos en la torticera trampa de la derecha recalcitrante. Si a m¨ª me preguntas si estoy en contra del terrorismo isl¨¢mico, contesto sin m¨¢s que s¨ª, en contra. Igual que estaba en contra de ETA. Luego todos sabemos que el terrorismo tiene una base social e hist¨®rica que es, precisamente, la que se tiene que analizar para buscar una soluci¨®n. Que Ham¨¢s responde con terrorismo a los ataques de Israel ya lo pensamos, pero enfangarnos en matices cuando no hay nada que matizar, es una trampa. El ¡°s¨ª, pero¡± es muy, muy peligroso. Lo contrario es legitimar una violencia ileg¨ªtima, como lo son todas.
Antonio Larrey L¨¢zaro. Boadilla del Monte (Madrid)
Dolor
Toparse con un cayuco mientras chapoteas en el sur de la isla; cruzarte con una patera mientras viajas a la isla vecina en el ferri; decenas de menores africanos vagando sin rumbo por el barrio¡ Esta es nuestra realidad, y no s¨¦ c¨®mo sentirme. Se me arruga el coraz¨®n, me parece injusta. Cientos de seres humanos huyen cada d¨ªa de sus pa¨ªses en guerra. No se puede rehuir esta situaci¨®n, esta tragedia. Los gobiernos no deber¨ªan descansar hasta aunar los recursos necesarios para gestionar una migraci¨®n que con dolor observamos desde la orilla.
Claudia Escudero. Las Palmas de Gran Canaria
No se rompe
Nunca he sido partidario de separatismos, al contrario; ya nos gustar¨ªa a muchos ciudadanos de este castigado planeta ver alg¨²n d¨ªa c¨®mo el cierre de fronteras se queda en ¡°aquel turbio asunto del pasado¡±, algo que solo ocurrir¨¢ cuando el ser humano haya aprendido de una vez por todas a ser humano. Espa?a no se rompi¨® cuando se rescat¨® a la banca a costa de una enorme deuda para el pa¨ªs. Tampoco cuando un 23-F a alguien se le ocurri¨® secuestrar a los m¨¢ximos dirigentes pol¨ªticos de Espa?a y, adem¨¢s, sacar los tanques a pasear por La Malvarrosa. De esta guisa se podr¨ªa escribir un libro. As¨ª es que ahora, por una amnist¨ªa de flequillo en curso, tampoco se va a romper. Que no enga?en al pueblo, que no somos lelos.
F¨¦lix Jim¨¦nez Fern¨¢ndez. Madrid
Ham¨¢s no es Palestina
Se puede ser un firme defensor de la causa palestina, de la desocupaci¨®n y de una soluci¨®n de los dos Estados que no humille a ninguna de las partes; tambi¨¦n denunciar los abusos de Israel. Pero hay que tener claro que Ham¨¢s es un grupo terrorista que se vale de la paup¨¦rrima situaci¨®n en la franja de Gaza para alimentar sus filas y extender sus ideales extremos: aniquilar a Israel por cualquier medio a su alcance. El s¨¢bado, masacr¨® a cientos de civiles israel¨ªes y secuestr¨® a otros tantos en un acto terrorista al que hay que llamar por su nombre, no valen tibiezas, por respeto a las v¨ªctimas y a sus familias.
Jes¨²s S¨¢nchez Lacasa. Tel Aviv
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