Cambios en el globo terr¨¢queo
La misma mano, hoy m¨¢s grande y rugosa, hace girar la bola sobre su soporte. Uno constata las variaciones que en el curso de los decenios se han producido en los nombres y las fronteras de los pa¨ªses. ?Qu¨¦ fr¨¢gil es todo!
Est¨¢n luego esos juguetes que uno recibi¨® de ni?o y quiz¨¢ conserve en buen estado, convertidos con el tiempo en emblema de la propia infancia. Ya s¨®lo con verlos, la memoria se arranca a reproducir im¨¢genes del pasado que tal vez uno cre¨ªa olvidadas. Es triste no guardar alg¨²n vestigio (cuadernos escolares, las cartas de las siete familias, una sencilla peonza) que resucite brevemente a nuestra vera al ni?o que fuimos, devolvi¨¦ndonos de paso antiguas y gratas sensaciones. Yo, que lo perd¨ª casi todo por el camino de los a?os, conservo el globo terr¨¢queo con que mis padres me obsequiaron a edad temprana. A¨²n funciona en su interior la bombilla de pocos vatios. Emite una luz humilde que resalta los colores de los mares y continentes. De manera singular alegra los ojos si uno la enciende en la habitaci¨®n a oscuras. La misma mano, hoy m¨¢s grande y rugosa, hace girar la bola sobre su soporte. Uno constata las variaciones que en el curso de los decenios se han producido en los nombres y las fronteras de los pa¨ªses. ?Qu¨¦ fr¨¢gil es todo! Tan solo el continente americano sigue como anta?o. En el resto del planeta se aprecian cambios notables. Abundan en ?frica, con naciones ya entonces independientes como Rhodesia, Alto Volta, un solo Sud¨¢n, ?frica del Sudoeste, Dahomey, o las provincias espa?olas (Sahara, Ifni, Fernando Poo, R¨ªo Muni) borradas de los actuales libros escolares. Veo Vietnam partido en dos, Formosa y Birmania, adem¨¢s de Banglad¨¦s como territorio perteneciente a Pakist¨¢n e Israel m¨¢s peque?o que ahora. ?Y Europa? Ah¨ª est¨¢n las dos Alemanias, Yugoslavia, Checoslovaquia y un ¨¢rea enorme llamada URSS. Miro a continuaci¨®n un mapamundi actual y me pregunto c¨®mo estar¨¢ parcelado el mundo dentro de 50, de 100, de 200 a?os. ?Y la pen¨ªnsula Ib¨¦rica? Son preguntas sin respuesta con las que uno pasa el rato en espera del crep¨²sculo.
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