Un muro y 22 ministerios

Cuando se dice que alguien tiene un perfil pol¨ªtico todos sabemos que estamos ante un eufemismo. Su virtud no es el conocimiento de la materia, sino la habilidad y el cuajo, la agresividad hacia el rival y la obediencia al l¨ªder. El objetivo de la legislatura, seg¨²n dijo el presidente, es construir un muro entre espa?oles. Ese proyecto de exclusi¨®n cohabita con un l¨¦xico y medidas de modernizaci¨®n, ecolog¨ªa, buen gobierno; se sostiene en un bloque unido por la antipat¨ªa pero resquebrajado por chantajes y competici¨®n interna. En el nuevo Ejecutivo repiten los ministros centrales. La m¨¢s prestigiosa, Nadia Calvi?o, podr¨ªa irse pronto, y quiz¨¢ asuma su cartera Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, que se ha quedado con Transformaci¨®n digital despu¨¦s de transformarse a s¨ª mismo. En Interior contin¨²a Fernando Grande-Marlaska: en su hoja de servicios hay un mill¨®n de multas mal puestas, el cese ilegal de P¨¦rez de los Cobos, mentiras en sede parlamentaria y la tragedia en la valla de Melilla. Destaca el aumento de competencias de F¨¦lix Bola?os, que adem¨¢s de Presidencia llevar¨¢ Justicia y Relaciones con las Cortes. Como Bola?os es un hombre clave en la amnist¨ªa, es l¨®gico que ya no sea responsable de memoria democr¨¢tica: gestionar al mismo tiempo la memoria y la amnesia ser¨ªa demasiado incluso para ¨¦l.

El PSC fue decisivo en las elecciones generales y ahora tiene un ministro menos (m¨¢s importante, dicen, para arreglarlo). Pero el principal perdedor es Podemos, y su trayecto describe una par¨¢bola llamativa: quienes surgieron clamando contra la casta han defendido su puesto personal con el empe?o de quien intenta salvar un negocio familiar. Y, a la vez, la alianza que sostiene el Gobierno confirma la tesis de Pablo Iglesias de una alianza de la izquierda y los nacionalismos perif¨¦ricos para alejar a la derecha espa?ola del poder. La nueva ministra de Sanidad, M¨®nica Garc¨ªa, deber¨ªa haber abandonado la pol¨ªtica cuando pidi¨® la dimisi¨®n de una persona por cobrar una ayuda que ella tambi¨¦n estaba cobrando: su continuidad es una lecci¨®n sobre hipocres¨ªa y ejemplaridad. De 705 europarlamentarios, 21 votaron contra la condena a la masacre de Ham¨¢s del 7 de octubre: de esos 21, dos son ministros del Gobierno de Espa?a: Ernest Urtasun, titular de cultura, y Sira Rego, de infancia y juventud. A los mecanismos de rendici¨®n de cuentas habituales se sumar¨¢ la figura fantasmal de un mediador en Ginebra que vigilar¨¢ que la transacci¨®n no se aparta del camino previsto.