La prioridad son los usuarios

Los trenes Avril de alta velocidad, un producto estrella de la espa?ola Talgo, acumulan problemas t¨¦cnicos. La semana pasada, Renfe Operadora, el ¨²nico operador de este tipo de trenes, calcul¨® en 479 los incidentes en solo dos meses y medio de operaci¨®n, una media de seis al d¨ªa. En el incidente m¨¢s grave hasta ahora, casi 500 personas se pasaron dos horas atrapadas en un t¨²nel de Madrid. Esto sucede, adem¨¢s, en lo m¨¢s alto de la temporada tur¨ªstica, con millones de desplazamientos.

Los trenes Avril, que reciben el nombre de Clase 106, fueron adquiridos por Renfe en 2016 por 1.495,4 millones de euros, una rebaja de un 43% sobre el precio inicial de licitaci¨®n. La cifra incluye 30 trenes y su mantenimiento durante 40 a?os. El tama?o del descuento fue tal que dos de las rivales de Renfe, la francesa Alstom y la canadiense Bombardier (hoy parte de Alstom) presentaron alegaciones. Esta ¨²ltima lleg¨® a llevar la decisi¨®n del Ejecutivo a la Justicia, que le dio parte de raz¨®n. Los primeros trenes fueron entregados en abril de este a?o, con casi dos a?os de retraso, a tiempo para la temporada de verano y la puesta en servicio de la alta velocidad a Asturias. Renfe reclama a Talgo 166 millones de euros por la demora en la entrega.

En la Clase 106, Talgo apost¨® por la innovaci¨®n tecnol¨®gica. Los Avril tienen un sistema de cambio de ancho de v¨ªa que es una de las marcas de la casa y son los primeros trenes capaces de ir a 300 kil¨®metros por hora tanto en v¨ªas de ancho internacional (el de la red de alta velocidad) como en las de ancho ib¨¦rico de la red convencional.

Los problemas que est¨¢n dando estos trenes son sobre todo para los usuarios que los sufren, pero tambi¨¦n es una cuesti¨®n reputacional. Llega en un momento crucial para la compa?¨ªa, que est¨¢ pendiente de una oferta p¨²blica de adquisici¨®n por parte de la compa?¨ªa h¨²ngara Magyar Wagon. Esta operaci¨®n preocupa al Gobierno. El ministro de Transportes, ?scar Puente, ha afirmado la voluntad del Ejecutivo de auspiciar una contraoferta, una opci¨®n que todav¨ªa no se ha concretado completamente. La preocupaci¨®n est¨¢ justificada por el futuro de un s¨ªmbolo de la industria espa?ola, poseedora de varias patentes de alta tecnolog¨ªa y que emplea directamente a m¨¢s de 2.000 personas en Espa?a, la mayor¨ªa en trabajos de alta calidad y formaci¨®n.

Lo inmediato, sin embargo, es una explicaci¨®n detallada de por qu¨¦ fallan los trenes. Sobre todo, responder a la sospecha de que las deficiencias en el servicio est¨¦n relacionadas con la forma en que se ejecut¨® el contrato. No basta con pedir disculpas y paciencia. M¨¢s all¨¢ del contencioso entre Talgo y el Ministerio, que ante la crisis ha pedido la cabeza del responsable de la empresa encargada del mantenimiento ¡ªRenfe, adem¨¢s, pretende tomar el control de esa compa?¨ªa¡ª, ninguno de los dos ha aclarado a los usuarios exactamente d¨®nde est¨¢ el problema con los trenes y qu¨¦ van a hacer para solucionarlo.