Taponar las grietas
Cada vez que escribo un art¨ªculo se produce una fuga: a cada frase, baja un poco el nivel. Una parte m¨ªnima se pierde, se disipa
La entrop¨ªa es que en cada colada se nos pierda un calcet¨ªn. En 10 o 12 coladas los hemos perdido todos. Tambi¨¦n se llama fuga o p¨¦rdida. La desafecci¨®n de la pol¨ªtica, por ejemplo, es una fuga. La abstenci¨®n constituye, pues, un movimiento entr¨®pico. No pasa nada mientras se mantenga en niveles tolerables, pero no sabemos cu¨¢les son esos niveles. A m¨ª, un 40% de abstenci¨®n me parece mucho, pero al sistema no. El sistema se autorregula por la cuenta que le trae. Cuando falla la autorregulaci¨®n, intervienen la polic¨ªa o los jueces para autorregularlo, que viene a ser como hacerle a uno la autocr¨ªtica, pr¨¢ctica muy de los viejos partidos comunistas.
Las llamadas fuerzas del orden se llaman de ese modo porque su funci¨®n es mantener la temperatura del sistema dentro de los l¨ªmites soportables. De cualquier sistema, no nos equivoquemos, pues mantienen con id¨¦ntica eficacia el orden cubano, el venezolano o el franc¨¦s. Personalmente hablando (de qu¨¦ otro modo, si no), cada vez que escribo un art¨ªculo se produce una fuga: se pierde un calcet¨ªn, como el que dice. Tengo un bol¨ªgrafo transparente que me permite ver sus tripas. A cada frase, baja un poco el nivel. Es cierto que la tinta, que es una forma de energ¨ªa, se transmuta en palabras, es decir, se transforma, seg¨²n el principio universal, pero hay una parte m¨ªnima que se pierde, que se disipa, como el agua que se cuela por las junturas de una presa o de una conducci¨®n defectuosa (y todas lo son en alg¨²n grado).
Llevado el asunto al ¨¢mbito mental, me pregunto cu¨¢nta energ¨ªa especulativa de la que utilizo en cada texto, lejos de formar parte de ¨¦l, se fuga, no s¨¦ a donde. A veces, por la noche, en la cama, repaso mentalmente un p¨¢rrafo que no acab¨® de gustarme al escribirlo y descubro de s¨²bito el error. Veo la entrop¨ªa, la p¨¦rdida, la fuga, la veo, s¨ª, pero ya es tarde para taponar la grieta porque envi¨¦ el texto al peri¨®dico antes de acostarme.
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