Vox y sus contradicciones
El partido ultra elimina a los disidentes de Abascal, pero su base electoral crece
La misma semana en que Santiago Abascal recibe en Madrid a sus socios europeos ¡ªentre ellos, el primer ministro h¨²ngaro, Viktor Orb¨¢n, y la l¨ªder del Reagrupamiento Nacional franc¨¦s, Marine Le Pen¡ª, el exvicepresidente de Castilla y Le¨®n y portavoz del partido ultra en la regi¨®n, Juan Garc¨ªa-Gallardo, ha dado el portazo y ha dejado su esca?o auton¨®mico y su puesto en el Comit¨¦ Ejecutivo Nacional de la formaci¨®n. En su carta de despedida no esgrime diferencias ideol¨®gicas, pero denuncia la falta de ¨¦tica y lealtad de la ¡°oligarqu¨ªa¡± que gobierna su partido.
Vox es una formaci¨®n joven: tiene 11 a?os de existencia y solo hace seis que entr¨® en las instituciones. Sin embargo, ha prescindido ya de algunas de sus caras m¨¢s conocidas: Iv¨¢n Espinosa de los Monteros, Roc¨ªo Monasterio, Macarena Olona o Garc¨ªa-Gallardo. Este ¨²ltimo fue un fichaje personal de Abascal para las elecciones auton¨®micas de Castilla y Le¨®n de 2022, en las que su partido consigui¨® entrar por primera vez en un Gobierno auton¨®mico. Como vicepresidente, Gallardo no descoll¨® por su gesti¨®n ¡ªcarec¨ªa casi de competencias¡ª, pero sirvi¨® de escaparate para las l¨ªneas maestras de un hipot¨¦tico futuro Gobierno PP-Vox en el conjunto de Espa?a. Las urnas de julio de 2023 no dieron los n¨²meros para llevar a La Moncloa al t¨¢ndem Feij¨®o-Abascal y este ¨²ltimo retir¨® sus peones de los cinco ejecutivos de coalici¨®n que manten¨ªa con los populares. ?El pretexto? Un simb¨®lico reparto entre todas las comunidades aut¨®nomas de parte de los menores inmigrantes que desbordan Canarias. Gallardo dej¨® de mala gana la vicepresidencia de la Junta, pero el detonante de su salida de Vox ha sido su negativa a firmar la expulsi¨®n de dos procuradores de su grupo parlamentario en las Cortes regionales. Aunque se ha desmarcado de las cr¨ªticas de los d¨ªscolos, no ha querido servir de brazo ejecutor contra los disidentes de esa ¡°oligarqu¨ªa¡± a la que denuncia. Con la ruptura del grupo ultra en la Asamblea de Castilla y Le¨®n, el presidente Fern¨¢ndez Ma?ueco, del PP, podr¨ªa en teor¨ªa sacar adelante los Presupuestos sin el apoyo de Abascal.
Mientras Vox queda reducido a la irrelevancia institucional en una comunidad donde ha sido decisivo, sube en las encuestas, empujado por la ola reaccionaria mundial que ha sentado de nuevo a Trump en el Despacho Oval. El ¨²ltimo bar¨®metro de 40dB., publicado el lunes por EL PA?S, le da el 14,2% de los votos, una cota no alcanzada desde las elecciones generales. En su calidad de presidente del partido europeo Patriots.eu, Santiago Abascal acudi¨® en enero a la toma de posesi¨®n del mandatario estadounidense y este fin de semana recibe a los l¨ªderes de las formaciones de la ultraderecha m¨¢s pr¨®ximas a Putin. La paradoja es que un partido que hace bandera de la defensa de la soberan¨ªa nacional y del rechazo a la gobernanza global crezca en conexiones internacionales y vea crecer su base electoral mientras se desangra por dentro.
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