Monedero era ese se?or que empezaba la conga en las bodas
El liderazgo em¨¦rito y feudal del fundador de Podemos constituye el origen de la cat¨¢strofe de la nueva izquierda

Juan Carlos Monedero no era nadie, pero estaba en todas partes. Fund¨® Podemos y se ape¨® nada m¨¢s empezar, en 2015, pero dio m¨ªtines, particip¨® en campa?as y apareci¨® en todas las salsas televisivas. No fue nunca diputado, pero se pase¨® por el Congreso como si fuera la cafeter¨ªa de su facultad. No ten¨ªa cargos en el partido, pero s¨ª un programa en la televisi¨®n org¨¢nica. Y no pertenec¨ªa al Consejo Ciudadano Estatal, pero met¨ªa baza en su chat. C¨®mo de poderoso ser¨ªa este miembro de base que no se atrev¨ªan ni a echarlo de un grupo de Telegram. Para no ser nadie y no pintar nada, se le ve¨ªa a todas horas y opinando de todo. Monedero en Podemos era ese se?or que en las bodas organiza la conga, reparte puros y anima el cotarro, hasta que alguien, a las cuatro de la madrugada, se pregunta qui¨¦n ser¨¢. El novio cree que viene de parte de la novia, y viceversa. A nadie le suena, no es primo ni amigo de la mili, pero a ver qui¨¦n lo echa a esas alturas.
M¨¢s all¨¢ de c¨®mo quede el asunto de la violencia sexual, el estar sin estar de Monedero ¡ªy de Pablo Iglesias¡ª, su liderazgo em¨¦rito y feudal, constituye el origen de la cat¨¢strofe de la nueva izquierda. Un movimiento que naci¨® transversal, posideol¨®gico y dem¨®crata radical se percibi¨® enseguida como el patrimonio de sus fundadores. El carisma siempre fue una fuente de autoridad mayor que los votos en una organizaci¨®n que se presentaba asamblearia, aunque funcionaba con personalismos supremos. Podemos traicion¨® su esp¨ªritu el d¨ªa que utiliz¨® la cara de Pablo Iglesias como logo. Despu¨¦s, una a una, borr¨® las caras de todos los ingenuos que se hab¨ªan cre¨ªdo lo de los c¨ªrculos.
En ese prietas las filas siempre destac¨®, sonriente, con chaleco y las manos largas, un Monedero seguro de que nunca le iban a desahuciar, pues ten¨ªa el mejor cargo posible: ¨¦l mismo. Monedero era secretario general de Monedero. No rend¨ªa cuentas a ning¨²n ¨®rgano ni perd¨ªa las elecciones, porque no se presentaba a ellas. Esto, m¨¢s que cualquier otro cuento que quieran contarse para consolarse de los fracasos, fue decisivo en la decadencia de la nueva izquierda: hab¨ªa que estar convencido hasta la ceguera para ignorar que no se tomaban el jarabe democr¨¢tico que quer¨ªan hacer tragar a los dem¨¢s. Dir¨¢n que la ca¨ªda de Monedero es una etapa m¨¢s de la ca¨ªda de Podemos, pero Podemos empez¨® a caer cuando no se atrevi¨® a decirle a un Monedero sin cargo que era hora de irse a casa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
