La misma especie
Es duro el per¨ªodo entre un trabajo y otro. Pero necesario para vaciar la cabeza y que pueda nacer algo nuevo

Hace poco intercambi¨¦ mensajes con un escritor argentino acerca de lo que sucede despu¨¦s de terminar un libro, ese per¨ªodo que atravieso con una m¨¢scara de ¡°aqu¨ª no ha pasado nada¡± cuando mi verdadero rostro expresar¨ªa ¡°aqu¨ª no ha quedado nada¡±. Hay una entrevista extraordinaria a la escritora brasile?a Clarice Lispector que se realiz¨® en 1977, el mismo a?o de su muerte, en el ciclo televisivo Panorama. Con un gesto que podr¨ªa parecer hostil, pero que es el de alguien que se toma en serio lo que le preguntan ¡ªel de alguien que piensa, no el de alguien que ¡°hace como que piensa¡±¡ª, responde al entrevistador ¨Dque le habla como si fuera sorda o est¨²pida¨D con una honestidad y una lucidez de tal magnitud que da un poco de miedo: ¡°Tengo per¨ªodos de producir intensamente y tengo per¨ªodos-hiatos en los que la vida se vuelve intolerable. Pueden ser largos, y yo vegeto en esos per¨ªodos. Si no, para salvarme, me lanzo r¨¢pido a hacer otra cosa (...) Yo creo que cuando no escribo estoy muerta. Es muy duro el per¨ªodo entre un trabajo y otro. Y al mismo tiempo necesario para hacer una especie de vaciamiento de la cabeza para que pueda nacer alguna otra cosa.¡± Pausa. ¡°Si es que nace. Es todo tan incierto¡±. En los mensajes que intercambi¨¦ con el escritor, un talento desmedido que parece due?o de una fortaleza extraterrestre para enfrentar batallas que a m¨ª me hunden, di por sentado que, ante esa situaci¨®n ¡ªhaber escrito, haber publicado¡ª, ¨¦l se manten¨ªa intacto, imperturbable. No voy a reproducir el intercambio ¡ªs¨¦ distinguir entre lo p¨²blico y lo privado¡ª, pero dijo cinco cosas exactas, sabias, generosas, y fue como encontrar a alguien de la misma especie en un planeta vac¨ªo. Su ¨²ltimo mensaje solo dec¨ªa: ¡°No es nada¡±, como quien le dice eso a quien acaba de darse un golpe. Kurt Vonnegut firmaba algunos de sus textos con la palabra ¡°paz¡±. El ¨²ltimo mensaje del escritor daba exactamente eso. Y amparo y alivio y luz.
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