Las mafias acechan la llegada a ?frica de las vacunas contra el coronavirus
La debilidad de los organismos reguladores de medicamentos, las fronteras porosas y la corrupci¨®n son clave en la circulaci¨®n de falsificaciones de las vacunas contra la covid-19 en el continente. ¡°Oro l¨ªquido¡± las llaman ya las organizaciones criminales. Segundo art¨ªculo de una serie de tres sobre la covid-19 y la delincuencia organizada
El viernes 6 de marzo de 2020, un d¨ªa despu¨¦s de que Sud¨¢frica registrase su primer caso confirmado de covid-19, y unas semanas despu¨¦s de que Egipto se convirtiera, el 14 de febrero, en el primer pa¨ªs africano en registrar una infecci¨®n, la polic¨ªa ugandesa detuvo a un curandero tradicional y a su hija en una aldea situada a 120 kil¨®metros al este de Kampala. El portavoz de la polic¨ªa Fred Enang declaraba al peri¨®dico ugand¨¦s New Vision: ¡°Visitaron a varias familias (¡) dici¨¦ndoles que hab¨ªan descubierto una vacuna contra la enfermedad¡ Las v¨ªctimas del fraude compraban la vacuna a un precio negociado con el vendedor antes de pon¨¦rsela¡±.
El 19 de noviembre se registr¨® un incidente mucho m¨¢s siniestro en un almac¨¦n de Germiston, en Sud¨¢frica, seg¨²n Mlunghisi Wondo, director en funciones de la unidad de cumplimiento normativo de la Autoridad Reguladora de Productos Sanitarios Sudafricana (Sahpra por sus siglas en ingl¨¦s). Wondo cuenta que la polic¨ªa sigui¨® un ¡°cargamento sospechoso¡± desde el aeropuerto O. R. Tambo hasta un edificio situado al este de Johannesburgo. Tras abrir ¡°un mont¨®n de cajas¡±, pidieron ayuda a la Sahpra. ¡°Nuestros agentes llegaron all¨ª y vieron jeringas precargadas, con etiquetas escritas en chino¡ Las dos personas que se hallaban en el lugar de los hechos, el propietario del almac¨¦n y el propietario chino del env¨ªo, fueron detenidas¡±, narra Wondo. ¡°Ten¨ªamos indicios claros de que los contenidos de las cajas iban a venderse como verdaderas vacunas contra la covid-19¡±. D¨ªas despu¨¦s, otras dos personas de nacionalidad china fueron detenidas. Actualmente, los cuatro (tres chinos y un zambiano, due?o del almac¨¦n) est¨¢n libres bajo fianza y la polic¨ªa no ha sabido aclarar cu¨¢ndo se presentar¨¢n cargos contra ellos.
Seg¨²n la Interpol, las falsas vacunas se hab¨ªan promocionado en una red social china, WeChat, y hab¨ªan sido importadas desde Singapur como ¡°inyecciones cosm¨¦ticas¡±. Wondo afirma que la polic¨ªa, en colaboraci¨®n con la Sahpra, ¡°sigue intentando averiguar si se han distribuido unidades en el pa¨ªs. El riesgo ahora est¨¢ en que haya personas a las que se les inyecten esas vacunas [falsas]; no sabemos qu¨¦ hay en ellas, porque todav¨ªa est¨¢n siendo analizadas en el Laboratorio Nacional de Control, en Bloemfontain¡±.
El 15 de enero, la Agencia Nacional para la Administraci¨®n y Control de Alimentos y F¨¢rmacos (Nafdac por sus siglas en ingl¨¦s) nigeriana reconoci¨® que son conscientes de que por el pa¨ªs circulan versiones falsas. La directora general de la agencia, Mojisola Adeyeye, explicaba en una rueda de prensa: ¡°La Nafdac ruega a los ciudadanos que est¨¦n atentos. La agencia no ha aprobado ninguna vacuna contra la covid. Las dosis falsas¡ podr¨ªan matar¡±.
Y el 31 de enero, un tal ¡°doctor H. Losho de Lagos¡±, que tambi¨¦n anuncia juguetes er¨®ticos, ropa y zapatos, publicaba el siguiente tuit: ¡°Si te interesan dos dosis de la vacuna contra la covid a 50.000 cada una, contacta con @ad_de_moles. AstraZeneca. Llega en dos semanas. Te damos una tarjeta¡±.
If you're interested in 2 shots of Covid Vaccine at 50k each, contact @ad_de_moles
— Oluwafemi (@TheUnagi_) January 31, 2021
AstraZeneca.
Arrives in 2 weeks.
You get a card.
Estos casos demuestran que ?frica es terreno abonado para la distribuci¨®n de vacunas falsificadas y robadas. Y con la aparici¨®n de nuevas variantes del SARS-CoV-2 (el virus causante de la covid-19), como la 501Y.V2, identificada por primera vez en Sud¨¢frica, las inmunizaciones contra el nuevo coronavirus se convertir¨¢n en una mercanc¨ªa muy codiciada, porque al menos por el momento esas variantes han demostrado ser m¨¢s infecciosas que la forma original del virus. Algunas podr¨ªan tambi¨¦n ser capaces de escapar a la inmunidad inducida por las actuales vacunas, lo cual aumenta el miedo ¨Dy la desesperaci¨®n¨D por estar protegidos contra dichas variantes mediante otras nuevas ajustadas y espec¨ªficas para ellas.
Las estad¨ªsticas muestran tambi¨¦n que el continente es extremadamente vulnerable a los delitos relacionados con las vacunas: Un informe publicado por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) en 2018 afirmaba que entre 2013 y 2017 casi la mitad de los medicamentos falsificados o de calidad deficiente se hab¨ªan encontrado en el ?frica subsahariana, donde las normativas son d¨¦biles, las fronteras porosas y, a menudo, la distribuci¨®n de productos farmac¨¦uticos falsificados no se considera delito, a pesar de los da?os que causan.
Entre 2013 y 2017 casi la mitad de los medicamentos falsificados o de calidad deficiente se encontraron en ?frica subsahariana
¡°Hemos encontrado sustancias muy t¨®xicas en los medicamentos falsificados. Para empezar, no curan, pero adem¨¢s se ven casos de personas que fallecen por el producto que se han tomado¡±, comenta Cyntia Genolet, directora adjunta de la secci¨®n africana en la Federaci¨®n Internacional de Fabricantes y Asociaciones Farmac¨¦uticas (IFPMA por sus siglas en ingl¨¦s). La organizaci¨®n representa a las principales empresas farmac¨¦uticas del mundo, entre ellas la mayor¨ªa de las que est¨¢n fabricando las vacunas contra la covid-19.
El informe de la OMS afirma que solo los f¨¢rmacos falsificados contra la malaria causan hasta 158.000 muertes al a?o en el ?frica subsahariana y que el mercado mundial de medicamentos falsos o de calidad deficiente podr¨ªa ascender a casi 170.000 millones de euros, un 10-15% del mercado farmac¨¦utico total.
Sin preparaci¨®n ante el timo de las falsificaciones
En Sud¨¢frica, uno de los pa¨ªses africanos m¨¢s afectados por la pandemia, el Departamento de Sanidad afirma que debe vacunarse al menos al 67% de una poblaci¨®n aproximada de 60 millones de personas para alcanzar la inmunidad de reba?o. La campa?a de inmunizaci¨®n en el pa¨ªs, que deber¨ªa haber empezado con la opci¨®n de AstraZeneca, se suspendi¨® temporalmente a principios de febrero, despu¨¦s de contar con nuevos datos preliminares sobre la baja eficacia de dicha vacuna en los casos leves o graves de covid-19 causados por la nueva variante 501Y.V2.
El Departamento de Sanidad anunciaba que el pa¨ªs efectuar¨ªa, en lugar de dicha campa?a masiva, un estudio de aplicaci¨®n para comparar la eficacia de tres vacunas ¨DJohnson & Johnson, Pfizer y posiblemente AstraZeneca¨D contra casos de gravedad de covid-19 causados por la nueva variante. Los casos graves del virus dan lugar a hospitalizaciones y fallecimientos, y por lo tanto la protecci¨®n contra estos es una funci¨®n importante de las vacunas durante la pandemia.
D¨ªas antes de que comenzara la campa?a de vacunaci¨®n en el pa¨ªs, a mediados de marzo, esta se preve¨ªa masiva y llena de retos. ¡°Ser¨¢ a gran escala, y de una importancia y una complejidad ins¨®litas. ?Habr¨¢ delitos relacionados con ella? Probablemente. Pero pienso que tenemos problemas mayores, como ver de qu¨¦ manera vamos a hacer llegar la vacuna a los brazos de millones de personas¡±, afirmaba entonces Salim Abdool Karim, epidemi¨®logo y copresidente del comit¨¦ cient¨ªfico de asesoramiento ministerial sobre covid-19 en Sud¨¢frica.
Abdool Karim, que tambi¨¦n dirige la organizaci¨®n encargada de investigar el VIH, el Centro para el Programa de Investigaci¨®n del Sida (Caprisa por sus siglas en ingl¨¦s), a?ade: ¡°El sistema que regular¨¢ las vacunas parece muy s¨®lido; dicen que la seguridad en torno a las vacunas ser¨¢ fuerte¡±. Pero nunca tanto como en Europa o Estados Unidos, donde casi todas las entidades involucradas en la distribuci¨®n de los viales, desde los aeropuertos hasta las empresas de transporte y los fabricantes, han creado equipos de trabajo para garantizar su seguridad.
Las empresas han comprobado los antecedentes de su personal; todas las cajas de vacunas, que se guardan en localizaciones secretas, llevan detectores de ubicaci¨®n por GPS; algunos viales contienen tecnolog¨ªa de verificaci¨®n por luz negra (marcadores que son visibles solo utilizando equipos que emiten rayos ultravioleta) para impedir la falsificaci¨®n y algunas empresas est¨¢n efectuando env¨ªos falsos para despistar a los delincuentes.
Pero, en su mayor parte, las autoridades africanas, inmersas en las negociaciones para obtener las dosis y prepararse para la pesadilla log¨ªstica de hacerlas llegar a la poblaci¨®n a trav¨¦s de territorios enormes y con rutas de transporte en malas condiciones, inexistentes a veces, no est¨¢n en absoluto preparadas para proteger estos cargamentos, seg¨²n numerosas fuentes entrevistadas, que incluyen agentes de polic¨ªa, de inteligencia criminal, aduanas y fronteras, representantes gubernamentales y crimin¨®logos.
Seg¨²n el mecanismo de registro de poblaci¨®n m¨¢s reciente de Worldometers, el continente africano tiene casi 1.400 millones de habitantes. En un an¨¢lisis publicado a finales de noviembre del a?o pasado, la OMS advert¨ªa de que ¡°?frica dista mucho de estar preparada para la mayor campa?a de inmunizaci¨®n asumida en el continente¡±. El an¨¢lisis calculaba que, bas¨¢ndose en informes propios aportados por todos los pa¨ªses, ?frica ten¨ªa una puntuaci¨®n media del 33% de preparaci¨®n para la campa?a de vacunaci¨®n contra la covid-19, muy por debajo del punto de referencia del 80% recomendado por la organizaci¨®n.
La OMS afirmaba que menos de la mitad de ?frica ha establecido cu¨¢les son las ¡°poblaciones prioritarias¡± para la vacunaci¨®n y cu¨¢les son los planes para llegar a estas poblaciones, y solo el 44% ha establecido ¡°estructuras de coordinaci¨®n¡±. Seg¨²n el informe, ¨²nicamente el 24% ten¨ªa ¡°planes de recursos y financiaci¨®n adecuados¡±, un discreto 17% ten¨ªa listas las herramientas de recopilaci¨®n y seguimiento de datos, y solo el 12% ten¨ªa planes para comunicarse con las comunidades para ¡°establecer la confianza y aumentar la demanda de inmunizaci¨®n¡±.
Maurice Ogbonnaya, crimin¨®logo y exanalista de seguridad en el Instituto Nacional de Estudios Legislativos y Democr¨¢ticos de la Asamblea Nacional de Nigeria, con sede en Abuja, afirma que son precisamente esas deficiencias, ¡°vac¨ªos¡± y desorganizaci¨®n los que podr¨ªan permitir a los grupos de delincuencia organizada introducir vacunas falsificadas en las cadenas de suministro y tambi¨¦n robar las verdaderas.
?Por qu¨¦ est¨¢ ?frica madura para un mercado negro de vacunas anticovid?
Ruona Meyer, inspirada por una hermana adicta a la code¨ªna ¨Dun f¨¢rmaco que se comercializa ilegalmente en Nigeria¨D, pas¨® m¨¢s de un a?o infiltrada, disfrazada de compradora, en bandas que trafican con f¨¢rmacos ilegales en ?frica occidental. Su aportaci¨®n, recogida en el documental Sweet Codeine, ganador de un Grammy en 2018, dio lugar a varias detenciones y sentencias, incluida la de un ejecutivo de una empresa farmac¨¦utica.
¡°En ?frica tenemos todos los elementos necesarios para que florezca un mercado negro de vacunas¡±, asegura Meyer. ¡°La falta de recursos, log¨ªstica y capacidad t¨¦cnica har¨¢ que las campa?as de inmunizaci¨®n masiva se prolonguen incre¨ªblemente. Eso da a la delincuencia organizada el tiempo y el espacio necesarios para montar estrategias, adaptarse a las medidas de seguridad e introducir sus productos en las cadenas de suministro. La pobreza y la corrupci¨®n oficial, que por desgracia est¨¢n extendidas en ?frica, les facilitan mucho el trabajo¡±.
En el informe sobre la investigaci¨®n llevada a cabo en julio de 2020 sobre el impacto de la pandemia de covid-19 en la infiltraci¨®n de la delincuencia organizada en la econom¨ªa legal y en la gobernanza ilegal, la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) afirma lo siguiente: ¡°Aunque ning¨²n pa¨ªs es completamente inmune al fraude, aquellos con un nivel elevado de corrupci¨®n son los que m¨¢s riesgo corren de verse afectados¡±. Meyer a?ade que ¡°tampoco ayuda el hecho de que en ?frica los sanitarios, muchos de los cuales se encargar¨¢n de los suministros de vacunas, est¨¦n muy mal pagados¡ Por supuesto, los delincuentes se aprovechar¨¢n de esto¡±.
John-Patrick Broome, analista de inteligencia criminal de Interpol en ?frica oriental, se?ala que las mafias est¨¢n ¡°idealmente situadas¡±, ya que poseen ¡°redes y metodolog¨ªas bien desarrolladas¡± para el contrabando de vacunas falsificadas, de calidad deficiente y robadas. ¡°Los medicamentos il¨ªcitos est¨¢n entrando en el mercado de ?frica oriental principalmente a trav¨¦s de tres ¨¢reas clave: la falta de normativas, una delincuencia basada en la violencia y la corrupci¨®n en diferentes niveles¡±, explica el exagente de fronteras de las islas brit¨¢nicas. ¡°Est¨¢ visto que las organizaciones de ?frica oriental que tienen la responsabilidad de regular la legislaci¨®n y las actividades policiales en torno a esta forma de delincuencia carecen de la autonom¨ªa y de las competencias necesarias para enfrentarse al comercio ilegal¡±.
Meyer a?ade que el aumento de las infecciones y las muertes, y la tercera ola, incluso la cuarta, de covid-19 podr¨ªa causar un miedo creciente, lo que aumentar¨ªa a¨²n m¨¢s la demanda de vacunas. ¡°En algunas fases, los suministros ser¨¢n bajos. Este es el vac¨ªo que llenar¨¢n los delincuentes. Lo hemos visto ya en los equipos de protecci¨®n personal (EPI) y en la cloroquina, cuando los grupos delictivos introdujeron con bastante facilidad sus falsificaciones en las cadenas de suministro mundiales¡±.
La demanda de cloroquina, un medicamento empleado para tratar la artritis reumatoide, el lupus eritematoso autoinmune y tambi¨¦n la malaria, se dispar¨® despu¨¦s de que un microbi¨®logo franc¨¦s afirmase, en marzo de 2020, que era ¡°eficaz¡± para combatir la covid-19. Y el expresidente estadounidense Donald Trump empez¨® tambi¨¦n a promover una forma de cloroquina, la hidroxicloroquina, como una posible cura, a pesar de que hab¨ªa pocas pruebas de que el f¨¢rmaco pudiera servir para tratar o prevenir la covid-19.
En los meses siguientes, informa Voice of America, las autoridades de ?frica central y occidental incautaron grandes cantidades de cloroquina falsificada y de mala calidad. Muchas de las pastillas eran de tiza comprimida. La polic¨ªa de Camer¨²n registr¨® y clausur¨® varias f¨¢bricas de medicamentos que estaban produciendo cloroquina falsa. En la actualidad hay tambi¨¦n una elevada demanda internacional de ivermectina, un antiparasitario, que est¨¢ siendo recomendado por una parte de la comunidad m¨¦dica para la prevenci¨®n y el tratamiento de la covid-19, aunque no hay pruebas cre¨ªbles que sostengan estas afirmaciones. No obstante, se est¨¢ incautando ivermectina ilegal en todo el mundo, tambi¨¦n en Sud¨¢frica.
Grupos mafiosos entre Europa y ?frica
En un informe publicado en mayo de 2020 en Journal of Intellectual Property Law & Practice, los abogados Marius Schneider y Nora Ho Tu Nam, que asesoran sobre cuestiones de propiedad intelectual a algunas de las empresas farmac¨¦uticas m¨¢s importantes del mundo, advert¨ªan de la posbilidad de que se estuvieran distribuyendo vacunas falsas contra la covid-19 en el continente.
¡°?Qu¨¦ por qu¨¦ vamos a tener un problema con las vacunas? Bueno, es muy f¨¢cil: porque la demanda ser¨¢ elevada; el acceso, limitado. Y todo el mundo querr¨¢ su dosis. Y en ese tipo de situaci¨®n, esta vacuna es oro l¨ªquido, como la han llamado algunos, para estas agrupaciones de delincuentes. Aprovechar¨¢n la situaci¨®n rob¨¢ndolas o falsific¨¢ndolas¡±, sostiene Schneider, expresidente de la comisi¨®n antifalsificaciones de la Asociaci¨®n de Marcas de las Comunidades Europeas (ECTA, por sus siglas en ingl¨¦s).
La demanda ser¨¢ elevada; el acceso, limitado. Y todo el mundo querr¨¢ su dosis. Y en ese tipo de situaci¨®n, esta vacuna es oro l¨ªquido para los delincuentesMarius Schneider, abogado
El abogado, de procedencia belga, fund¨® el despacho de abogados IPVocate Africa en Mauricio en 2012 para centrarse en las ¨¢reas de protecci¨®n, gesti¨®n y aplicaci¨®n de los derechos de propiedad intelectual, ¡°gravemente descuidadas¡± en ?frica. En ocasiones, el bufete de Schneider coordina con los organismos policiales los registros para localizar falsificaciones y representa a multinacionales farmac¨¦uticas en causas judiciales.
¡°Hemos visto ejemplos de organizaciones no gubernamentales (ONG) implicadas en la distribuci¨®n de estas vacunas [falsificadas]. Estas ONG ten¨ªan la misi¨®n de distribuir vacunas de verdad a la poblaci¨®n. Los empleados sobre el terreno en pa¨ªses africanos estaban implicados en el tr¨¢fico de vacunas¡±, dice.
El Instituto IQVIA para la Ciencia de los Datos Humanos calcula que el gasto mundial en productos farmac¨¦uticos en 2019 ascendi¨® a un bill¨®n de euros. El instituto prev¨¦ que el mercado farmac¨¦utico mundial superar¨¢ los 1,25 billones de euros en 2023. Donde hay mucho dinero, hay mucha delincuencia, afirma Ho Tu Nam.
En septiembre de 2015, un tribunal brit¨¢nico conden¨® a dos exasesores de Naciones Unidas (ONU) a penas de c¨¢rcel por ama?ar un contrato de f¨¢rmacos de emergencia entre una empresa farmac¨¦utica danesa y autoridades gubernamentales de la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo. Guido Bakker y Sijbrandus Scheffer aceptaron un soborno de 650.000 libras esterlinas (unos 750.000 euros) para garantizar una licitaci¨®n de 66 millones de libras, casi 77 millones de euros.
¡°A los grupos de delincuencia organizada siempre les han interesado los productos farmac¨¦uticos por los elevados m¨¢rgenes de beneficio y los bajos riesgos que comportan¡±, afirma Mark Micallef, director del observatorio que la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional tiene en el norte de ?frica y el Sahel. ¡°Se mueven all¨ª donde obtengan los beneficios m¨¢s elevados en cualquier momento dado y por consiguiente est¨¢ bastante claro que se involucrar¨¢n de todas las formas posibles en el suministro de vacunas¡±.
Schneider ha dedicado buena parte de su vida profesional a la delincuencia organizada. En la d¨¦cada de 2000 particip¨® en la famosa investigaci¨®n Gomorra que sac¨® a la luz la venta de herramientas el¨¦ctricas falsificadas en Europa, y que provoc¨® la ca¨ªda de varias figuras de la Camorra napolitana. ¡°La Camorra hab¨ªa establecido la producci¨®n de las herramientas en China¡±, recuerda Schneider.
Naciones Unidas calculaba en un informe de 2019 que el 75% de los medicamentos falsificados y de calidad deficiente que se venden en el mundo provienen de China, el mayor socio comercial de ?frica, y de India, con la que el continente mantiene tambi¨¦n relaciones estrechas. El mayor productor de vacunas del mundo, el Serum Institute de India, ya est¨¢ fabricando vacunas contra la covid para la farmac¨¦utica AstraZeneca y China tiene al menos tres vacunas candidatas, dos de las cuales se est¨¢n distribuyendo ya.
La ONUDD se?ala que la Mafia italiana, y en concreto la siciliana, lleva d¨¦cadas traficando con productos farmac¨¦uticos falsificados, de calidad deficiente y robados, procedentes en su mayor¨ªa de Asia. Un investigador policial de Reino Unido, que pidi¨® que se mantuviera su anonimato porque no est¨¢ autorizado a informar a los medios de comunicaci¨®n, coment¨® a principios de diciembre: ¡°La Mafia est¨¢ moviendo vacunas ilegales por toda Europa¡±. Tambi¨¦n confirm¨® que se hab¨ªan establecido lazos entre estos grupos mafiosos y ¡°bandas criminales de Nigeria, Marruecos, Egipto y Costa de Marfil¡±. La Camorra, por ejemplo, tambi¨¦n ha entrado en Sud¨¢frica. En 2014, cinco italianos fueron detenidos en Port Elizabeth y acusados de haber intentado vender herramientas el¨¦ctricas falsificadas por valor de varios millones de rands, informa IOL.
Las rutas del tramadol
Fuentes de los organismos internacionales contra el crimen consideran que los fuertes lazos comerciales comerciales de ?frica con China e India van a permitir a los delincuentes introducir cargamentos de vacunas falsificadas en las cadenas de suministro. El mill¨®n de vacunas de AstraZeneca entregado a Sud¨¢frica el 1 de febrero lleg¨® de India, fabricado por el Serum Institute. El domingo siguiente, el Departamento de Sanidad anunciaba tambi¨¦n que Sud¨¢frica hab¨ªa iniciado conversaciones con una empresa china, Sinopharm, para comprar vacunas anticovid.
Bhekisisa (organizaci¨®n para el periodismo sobre temas sanitarios con sede en Sud¨¢frica) ha hablado con un extraficante de f¨¢rmacos ilegales en ?frica occidental, que ahora colabora con las investigaciones de las autoridades en esa zona. Asegura que las mafias est¨¢n ¡°simplemente esperando el caos, la desesperaci¨®n y la falta de organizaci¨®n¡± en las campa?as de vacunaci¨®n para distribuir dosis falsificadas o robar las genuinas. ¡°Tienen sus redes activadas. Emplear¨¢n las mismas redes, los mismos funcionarios corruptos que est¨¢n utilizando (para otros productos ilegales). Tienen las impresoras y los envases que necesitan¡±.
Meyer sostiene que ¡°ha habido casos en los que los empleados de las farmac¨¦uticas venden envases de medicamentos genuinos a los grupos criminales¡±.
El extraficante habla de una ¡°ruta bien establecida para el tramadol [un analg¨¦sico] ilegal¡± entre Nigeria e India ¡°que est¨¢ esperando activarse con las vacunas (falsas)¡±. Afirma que existen v¨ªnculos entre ¡°empresas tapadera en Nigeria y sus socias en India, que intentar¨¢n sustituir el tramadol por vacunas contra la covid, porque pueden ganar mucho m¨¢s dinero. Hablamos de un aumento de beneficios del 1.000% con la vacuna¡±. Y asegura con sorna: ¡°Estoy seguro de que en m¨¢s de un caso la polic¨ªa y el Ej¨¦rcito van a proteger las vacunas malas [falsificadas o robadas]¡±.
Micallef recopila la informaci¨®n sobre el tr¨¢fico de medicamentos falsificados en el norte de ?frica a trav¨¦s de una red de 160 monitores de campo establecida en Argelia, Chad, Libia, Marruecos, N¨ªger, Sud¨¢n y T¨²nez. ¡°Vacunas falsificadas... Creo que existe un gran peligro de que se comercialicen¡±, se?ala el analista. ¡°En el propio Magreb, en territorios tan faltos de reglamentaci¨®n como Libia, desde luego. Pero tambi¨¦n en T¨²nez y en algunas zonas fronterizas de Egipto; algo menos en Argelia, quiz¨¢, pero sobre todo en el norte del Sahel¡±.
Micallef afirma que las mafias que trafican con vacunas falsificadas aprovechan los vac¨ªos en los servicios sanitarios, algo que ser¨¢ especialmente aplicable a las vacunas contra la covid-19, lo cual va a dificultar mucho el control de los delitos. ¡°Esta forma de tr¨¢fico¡ Est¨¢ aprovechando una necesidad real del sector sanitario. Y el miedo es que, en el caso de las vacunas, pudiera desplegarse un escenario similar all¨ª donde hay escasez, en especial en las zonas fronterizas (del Sahel), que son presa de negocios delictivos que intentan llenar ese vac¨ªo¡±.
En ?frica occidental, la campa?a de inmunizaci¨®n va a producirse en un momento en el que los gobiernos regionales, en especial el de Nigeria, han estado persiguiendo el tr¨¢fico de tramadol. Entre el 1 y el 19 de junio del a?o pasado, la Agencia de Aplicaci¨®n de la Ley Antidroga y la Agencia Nacional para la Administraci¨®n y el Control de Alimentos y F¨¢rmacos de Nigeria incautaron contenedores de ese f¨¢rmaco ilegalmente importados por valor de m¨¢s de 300 millones de nairas (unos 660.000 euros), seg¨²n Enact, una organizaci¨®n que trabaja para combatir el crimen organizado en ?frica.
En junio de 2020, la Agencia Antidroga nigeriana incaut¨® contenedores de tramadol importados ilegalmente por valor de 660.000 euros
Seg¨²n el extraficante, estas medidas en¨¦rgicas est¨¢n proporcionando a los grupos criminales de la regi¨®n un incentivo adicional para pasarse al tr¨¢fico de vacunas anticovid-19 falsificadas.
Un alto cargo policial de Nigeria, que ha pedido permanecer en el anonimato, afirma que delincuentes indios han estado ¡°cambiando las marcas y los nombres¡± del tramadol para importarlo al pa¨ªs ¡°como algo inocuo¡ Y preocupa que hagan algo similar con las vacunas anticovid¡±.
Ogbonnaya afirma que pueden establecerse muchos paralelos entre el tr¨¢fico del tramadol en ?frica occidental y el ¡°probable¡± comercio il¨ªcito de vacunas contra el coronavirus falsificadas y robadas. ¡°Todo se reduce a una normativa deficiente por parte de los organismos reguladores del Estado; se reduce a la corrupci¨®n de aquellos a quienes se les encarga la responsabilidad de garantizar que se apliquen las normativas. Y se reduce tambi¨¦n a una ausencia total de un marco regulador a escala continental¡±.
Facilitando el trabajo de los delincuentes
La IFPMA apoya la ¡°armonizaci¨®n reguladora¡± en ?frica, en especial a trav¨¦s de la Agencia de Medicamentos de ?frica (AMA). Seg¨²n un comunicado de prensa emitido por la Uni¨®n Africana en febrero del a?o pasado, la AMA es ¡°una agencia especializada propuesta por la Uni¨®n Africana para facilitar la armonizaci¨®n de la regulaci¨®n m¨¦dica en todos sus pa¨ªses miembros¡±. El tratado sobre su creaci¨®n fue aprobado por unanimidad por la Uni¨®n Africana en 2019, pero por el momento solo lo ha ratificado una minor¨ªa de pa¨ªses.
¡°Hay muchos elementos que aumentar¨¢n la vulnerabilidad de ?frica cuando se est¨¦n distribuyendo las vacunas¡±, afirma Genolet. ¡°El d¨¦bil sistema regulatorio es tambi¨¦n algo que la OMS ha detectado¡±, aunque en esto el continente no est¨¢ solo. Seg¨²n un informe de dicha organizaci¨®n, en todo el mundo, solo tres de cada 10 pa¨ªses tienen organismos reguladores de medicamentos que funcionan ¡°de acuerdo con criterios de calidad aceptables¡±. ¡°Muchos pa¨ªses africanos carecen por completo de sistemas [de agencias funcionales reguladoras de los medicamentos] como la Sahpra sudafricana. Eso es muy importante para garantizar que un medicamento que entra en un pa¨ªs sea seguro y tambi¨¦n que se controla lo que ocurre despu¨¦s, una vez que el medicamento ha entrado en el pa¨ªs¡±.
La OMS afirma que en el continente africano hay 54 autoridades reguladoras de productos m¨¦dicos (ARPM), pero ¡°tienen diversos grados de capacidad¡±. Formalmente, solo ha evaluado una ARPM del ?frica subsahariana, la de Tanzania. En 2018 la organizaci¨®n otorg¨® al pa¨ªs de ?frica oriental un nivel de madurez 3, el segundo m¨¢s elevado en la escala de la OMS.
Andy Gray, profesor de Farmacolog¨ªa en la Escuela de Ciencias de la Salud de la Universidad de KwaZulu-Natal, se?ala que los informes anteriores de la OMS no han establecido qu¨¦ ARPM africanas ¡°eran aceptables y cu¨¢les no, para no herir sensibilidades pol¨ªticas, y la evaluaci¨®n no se ha actualizado. Ciertamente, las m¨¢s maduras son la sudafricana, la zimbabuense, la keniana, la tanzana, la ghanesa y la nigeriana¡±.
Gray, que forma tambi¨¦n parte del Centro Colaborador de la OMS sobre Pol¨ªtica Farmac¨¦utica y Pr¨¢ctica Basada en las Pruebas, a?ade: ¡°Hay algo de capacidad en Uganda, Botsuana, Namibia y Zambia. No estoy tan seguro de los pa¨ªses franc¨®fonos, pero ser¨ªa de esperar cierta capacidad en Senegal y Marruecos, y quiz¨¢ Camer¨²n, pero los lazos con Francia son m¨¢s estrechos, al igual que la dependencia de los productos aprobados en ese pa¨ªs¡±. Gray considera que ¡°no parece muy descaminado¡± afirmar que solo el 10% de los reguladores de medicamentos africanos tiene una ¡°capacidad moderadamente desarrollada¡±, y que el 90% tiene ¡°poca o ninguna capacidad¡±.
Este vac¨ªo en la regulaci¨®n de medicamentos, asegura la OMS, deja la mayor parte del continente expuesta a productos m¨¦dicos inseguros y ¡°facilita la proliferaci¨®n de productos m¨¦dicos de calidad deficiente, adulterados, mal etiquetados y falsificados¡±. Genolet afirma que la ausencia de regulaci¨®n hace que las cadenas de suministros m¨¦dicos en ?frica sean ¡°muy porosas¡±. Esto significa que hay un control limitado de la cadena de suministro. Cuando hay muchos intermediarios implicados, y fronteras que no siempre tienen controles, es f¨¢cil mover medicamentos falsificados de un pa¨ªs a otro. ¡°Hasta Sud¨¢frica, que posee uno de los mejores sistemas reguladores [de medicamentos] del continente, tiene miles de kil¨®metros de fronteras no controlados¡±.
Pero Mlungisi Wondo, de la Sahpra, recalca: ¡°Nuestros procedimientos bloquear¨¢n las vacunas de mala calidad o falsificadas en los puntos de entrada. Tenemos unos controles muy estrictos¡±. Explica que los viales podr¨ªan entrar en el pa¨ªs por cuatro puntos, dependiendo de su procedencia: Durban, Ciudad del Cabo, Port Elizabeth (todas por mar y aire) y Johannesburgo (aire). ¡°Los medicamentos no pueden entrar en el pa¨ªs [legalmente] sin pasar por uno de esos puntos. Y en ellos tenemos agentes de aduanas y de sanidad portuaria que est¨¢n formados para evaluar los medicamentos que entran¡±, se?ala Wondo.
Sin embargo, esta evaluaci¨®n se refiere meramente a la apariencia concreta del env¨ªo, en lo referente a etiquetado, n¨²meros de registro pertinentes y documentaci¨®n adjunta. ¡°Si el certificado de registro del producto est¨¢ en orden, se entrega a la empresa farmac¨¦utica que lo trasladar¨¢ finalmente al mercado. Los que no cumplen los requisitos de registro son remitidos por las autoridades a la Sahpra para continuar la investigaci¨®n¡±, dice Wondo, que reconoce que en ocasiones se ¡°cuelan¡± por los controles productos farmac¨¦uticos de mala calidad.
¡°Puede tratarse de contrabando, en el que se presenta una declaraci¨®n falsa de que contiene, por ejemplo, ropa, y quiz¨¢ en medio del contenedor incluyen esas cajas de medicamentos. Entonces esos pueden pasar, por la declaraci¨®n falsa. Pero con la ayuda de los inspectores de la agencia del medicamento y de los servicios policiales de Sud¨¢frica, al final encontramos las falsificaciones dentro del pa¨ªs¡±.
El verdadero reto de Sud¨¢frica va a estar en el robo de vacunas
Gray explica que Sud¨¢frica tiene fama de poseer una cadena de suministro de medicamentos segura. Pero a?ade que, debido a que la Sahpra no efect¨²a un muestreo proactivo del mercado, y que depende de las buenas pr¨¢cticas de fabricaci¨®n de las empresas farmac¨¦uticas y de la ¡°vigilancia¡± de sus unidades forenses, podr¨ªa estar pasando por alto algunos ¡°problemas¡±.
¡°Si nuestros medicamentos van a pa¨ªses vecinos, no sabemos si alguien est¨¢ introduciendo versiones falsificadas en esos pa¨ªses; no lo sabemos. ?Est¨¢n llegando a nuestros mostradores medicamentos distintos de los que esperamos encontrar? No hemos detectado ninguno, pero no es imposible que est¨¦ sucediendo¡±, afirma Gray.
Se espera que muchas de las vacunas para Sud¨¢frica las fabrique el Serum Institute de India, contratado por la iniciativa COVAX para fabricar vacunas para pa¨ªses en desarrollo. ¡°El Serum Institute ha sido aprobado por la OMS para fabricar las vacunas, de modo que sabemos que fabricar¨¢ productos de buena calidad¡±, se?ala Wondo.
El instituto est¨¢ reconocido en todo el mundo como una entidad de producci¨®n farmac¨¦utica segura. Pero, como se?ala Ho Tu Nam, ¡°en todo el mundo se han falsificado medicamentos de todos los fabricantes; nadie es inmune¡±.
Wondo responde: ¡°Se comprobar¨¢ cada lote de vacunas que llegue a Sud¨¢frica. Lo haremos nosotros o pa¨ªses aliados de confianza. Las vacunas [falsificadas] no entrar¨¢n en nuestros sistemas. Mantendremos la seguridad de nuestra poblaci¨®n¡±.
Aunque Gray opina que Sud¨¢frica es ¡°vulnerable en algunos aspectos¡± a las vacunas falsificadas y que ¡°eludir a los actores normales¡± en la cadena de suministro representa ¡°una oportunidad muy buena de introducir un producto falsificado en el mercado¡±, est¨¢ convencido, igual que Abdool Karim, de que el pa¨ªs tendr¨¢ ¡°problemas mucho m¨¢s graves¡± a los que enfrentarse, como el transporte y la distribuci¨®n de dosis. Sin embargo, cree que Sud¨¢frica corre el riesgo de padecer robos de vacunas.
¡°Pienso que somos mucho m¨¢s vulnerables de lo que creemos¡±, se?ala Gray. ¡°Ciertamente hemos sufrido robos en los dep¨®sitos provinciales y se producen muchos robos en los hospitales. De hecho, hemos tenido problemas con el robo a demanda, en el que la gente llama a un miembro del personal y le despachan una caja de medicinas¡±.
Los posibles problemas de seguridad para los viales
En Sud¨¢frica, como en otros muchos pa¨ªses del continente, las inoculaciones tienen lugar en hospitales y cl¨ªnicas p¨²blicos y privados, as¨ª como en farmacias, unidades m¨®viles y lugares de trabajo. Podr¨ªa haber tambi¨¦n espacios m¨¢s amplios que permitieran vacunar a un n¨²mero mayor de personas en menos tiempo. Gray opina que estos lugares de administraci¨®n de las vacunas son los puntos m¨¢s vulnerables de la cadena de distribuci¨®n, porque est¨¢n sometidos a menor vigilancia que los cargamentos.
Meyer se?ala que esto ser¨¢ as¨ª en todo el continente. ¡°Conf¨ªo en que la Uni¨®n Africana introducir¨¢ vacunas verdaderas y verificadas en ?frica. Despu¨¦s de los problemas iniciales con los EPI falsos, ha hecho un gran trabajo a la hora de suministrar estos materiales. El problema que vamos a tener en ?frica van a ser los distribuidores; en este caso, los ministerios de sanidad, los peque?os centros de atenci¨®n primaria que reciben el material del ministerio de sanidad y m¨¢s abajo en la l¨ªnea de distribuci¨®n¡±.
¡°Ah¨ª es donde vamos a tener problemas con la seguridad del almacenamiento; en la mayor parte de ?frica no hay instalaciones de almacenamiento superseguras. Ah¨ª es donde podr¨ªamos tener gente que robe las vacunas, o que pudiera adulterar el contenido de los viales. De la misma forma que alguien podr¨ªa llevar kilos de coca¨ªna pura y mezclarla con todo tipo de cosas para obtener mayor beneficio¡±.
Fuentes de la Interpol afirman que, en ?frica oriental, la pandemia ha provocado un aumento de los ataques de los delincuentes a los profesionales m¨¦dicos porque creen que tienen acceso a medicamentos muy demandados en la regi¨®n
Broome, de Interpol, afirma que, en ?frica oriental, la pandemia ha provocado un aumento de los ataques de los delincuentes a los profesionales m¨¦dicos ¡°debido a la percepci¨®n de que estos tienen acceso a medicamentos con gran demanda en la regi¨®n. Han atracado a m¨¦dicos a punta de pistola en la creencia de que tienen este acceso. Los grupos del crimen organizado han intentado aprovecharse tambi¨¦n de los profesionales m¨¦dicos corruptos¡±.
Abdool Karim est¨¢ seguro de que se producir¨¢n ¡°algunos¡± robos en relaci¨®n con la campa?a de vacunaci¨®n en Sud¨¢frica. Pero a?ade: ¡°No veo realmente c¨®mo van a robar vacunas y venderlas en el mercado negro. Si lo hacen, ser¨¢ a un nicho de poblaci¨®n muy peque?o, de ricos que quieran saltarse la fila. Porque todo el mundo va a recibir la vacuna; el Gobierno se la dar¨¢ gratis a todos¡±.
Aumentar la oferta para frenar la delincuencia
Pero gratis o no, remacha Meyer, si las vacunas escasean y las infecciones y los fallecimientos contin¨²an, la demanda se ¡°disparar¨¢¡± y ¡°se abrir¨¢ la puerta¡± al robo y a la inserci¨®n de vacunas falsificadas y de calidad deficiente en la cadena de suministro.
¡°Para frenar la delincuencia relacionada con los narc¨®ticos, cortas la oferta. Pero en el caso de las vacunas habr¨¢ que hacer lo contrario: para eliminar la delincuencia relacionada con ellas, tendremos que aumentar la oferta. Cuantas m¨¢s inmunizaciones leg¨ªtimas haya en el mercado, menos margen tendr¨¢n los delincuentes, ya que habr¨¢ menos demanda para sus productos falsos o robados¡±.
Gray coincide, y hace referencia al comienzo de la pandemia, cuando se animaba a los sudafricanos a vacunarse de la gripe. Sin embargo, el Estado hab¨ªa comprado la mayor parte de las dosis para administr¨¢rselas a trabajadores de ¡°alto riesgo¡± empleados en el sector p¨²blico. ¡°El sector privado ten¨ªa problemas para hacerse con existencias. Muchos pacientes telefoneaban a las farmacias; se dec¨ªa que algunas de las cadenas tend¨ªan a tener acceso preferente y que las farmacias independientes no lograban acceder a ellas. Todo el mundo intentaba comprar en alguna parte¡±.
No es dif¨ªcil imaginar que este escenario pudiera repetirse en alguna fase de la campa?a de vacunaci¨®n, remacha. ¡°Es un caldo de cultivo perfecto para que un delincuente d¨¦ un paso al frente y diga ¡°yo tengo existencias que se han ca¨ªdo del remolque de un cami¨®n, y puedo darte alguna¡±.
Esta es la segunda parte de una serie de tres reportajes dedicada a investigar la delincuencia organizada relacionada con la covid. La serie cuenta con el apoyo de una beca de la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional (GI-TOC). Puede leer el primer art¨ªculo aqu¨ª.
Art¨ªculo publicado en ingl¨¦s originalmente en Bhekisisa, publicaci¨®n sudafricana especializada en salud. Se puede consultar la newsletter Bhekisisa Centre for Health Journalism aqu¨ª.
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