Dorothy Estrada-Tanck, defendiendo los derechos humanos desde las aulas

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Su profesi¨®n de docente la delata incluso cuando habla a trav¨¦s de una pantalla. Dorothy Estrada-Tanck (Ciudad de Mexico, 45 a?os) se expresa r¨¢pido y con claridad, aprovechando cada segundo como si en vez de una entrevista, estuviera dando una de sus clases de derecho a sus alumnos. A comienzos de este septiembre ha vuelto presencialmente a las aulas en la Universidad de Murcia, donde es profesora de Derecho Internacional P¨²blico y Relaciones Internacionales, vicedecana de Relaciones Internacionales y tambi¨¦n co-directora de la Cl¨ªnica Jur¨ªdica.

Con una trayectoria profesional centrada en el derecho internacional y los derechos humanos, su formaci¨®n la llev¨® a estudiar en la Escuela Libre de Derecho en su M¨¦xico natal, en la London School of Economics and Political Science y en el Instituto Europeo de Florencia. En 2020 fue profesora visitante por la Universidad de Harvard con una estancia de investigaci¨®n, que tuvo que interrumpir de manera presencial por la pandemia. Sin embargo, su af¨¢n investigador y docente no se ha visto detenido, y desde noviembre de 2020, es vicepresidenta del Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre la Discriminaci¨®n en contra de Mujeres y Ni?as.

Desde hace poco m¨¢s de una d¨¦cada, este colectivo viene desarrollando una labor de visibilizaci¨®n y de denuncia sobre diferentes aspectos relacionados con la defensa de los derechos humanos de mujeres y ni?as en todo el mundo. Similar en sus funciones al papel de otros mecanismos de Naciones Unidas como el de los relatores, depende del Consejo de Derechos Humanos, que opta por la creaci¨®n de equipos de trabajo cuando quiere impulsar temas que est¨¢n m¨¢s diversificados y donde hay una pluralidad de opiniones.

Esta entidad surgi¨® como una propuesta del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas en 2010 para intentar tratar temas de discriminaci¨®n sobre mujeres y ni?as all¨¢ donde no llegaba el Comit¨¦ CEDAU, la herramienta jur¨ªdica de la Convenci¨®n sobre la Eliminaci¨®n de Discriminaci¨®n contra la Mujer, un tratado internacional que se adopt¨® por parte de la Asamblea General en 1979. ¡°El mandato establece que toca identificar los retos para lograr la igualdad entre hombres y mujeres, las formas de discriminaci¨®n que hay, emitir informes sobre buenas pr¨¢cticas, c¨®mo podemos enfrentar esos problemas...¡±, explica Estrada, que fue elegida como representante de Am¨¦rica Latina y el Caribe en cumplimiento de un mandato que busca la representaci¨®n y diversidad de las cinco regiones del mundo.

Al menos 155 pa¨ªses han aprobado leyes sobre la violencia dom¨¦stica y 140 cuentan con legislaci¨®n sobre el acoso sexual en el lugar de trabajo, aunque muchas veces esto no garantiza su aplicaci¨®n

La violencia f¨ªsica o sexual que sufren las mujeres es una de las formas de discriminaci¨®n m¨¢s frecuente, y, en mayor o menor medida, se produce en todos los pa¨ªses del mundo. Seg¨²n datos de Naciones Unidas, al menos 155 pa¨ªses han aprobado leyes sobre la violencia dom¨¦stica y 140 cuentan con legislaci¨®n sobre el acoso sexual en el lugar de trabajo, aunque muchas veces esto no garantiza su aplicaci¨®n o cumplimiento. Adem¨¢s de esta violencia expl¨ªcita, existe otras discriminaciones como la brecha salarial, la persecuci¨®n a las mujeres y hombres activistas, la defensa de los derechos sexuales y reproductivos, la socioecon¨®mica con una gran feminizaci¨®n de la pobreza, el agravante que ha supuesto la pandemia para el acceso a la educaci¨®n, etc.

¡°Luego existen otros asuntos no tan visibles, como la transici¨®n a las energ¨ªas renovables¡±, se?ala, haciendo referencia a la importancia de que la transici¨®n a las llamadas ¡°energ¨ªas verdes¡± se haga de forma justa e igualitaria en t¨¦rminos de g¨¦nero, y que las mujeres, tradicionalmente encargadas de las labores de b¨²squeda de combustible y agua en muchos pa¨ªses, no se queden atr¨¢s y puedan incorporarse a los nuevos puestos de trabajo que se generen.

Pero su gran preocupaci¨®n (y del grupo) es el retroceso en la igualdad de g¨¦nero. A este tema dedicaron un Informe tem¨¢tico en 2018. En 2020, se volvieron a posicionar en un documento que utilizan para temas donde les interesa hacer una valoraci¨®n especial desde la postura de los derechos humanos.

¡°Acudir a las causas ra¨ªz, no a los s¨ªntomas¡±

Las tem¨¢ticas de trabajo suelen ser planteadas por las diferentes expertas, que tambi¨¦n cuentan con el apoyo de un peque?o equipo de t¨¦cnicos: ¡°Tenemos estos dos escalones: como expertas, desde nuestra experiencia personal y profesional, y luego tambi¨¦n las compa?eras del equipo que traen a nuestra atenci¨®n temas que nosotras no necesariamente vemos¡±. A la hora de plantear estas cuestiones, suelen trabajar directamente con muchas entidades y organizaciones locales que trabajan sobre el terreno, intentando, como afirma Estrada, ¡°acudir a las causas ra¨ªz, no solo a los s¨ªntomas¡±.

Ese trabajo de visibilidad hace que se puedan llevar al Consejo de Derechos Humanos determinadas situaciones que, de otra manera podr¨ªan pasar desapercibidas. ¡°En lugares de conflicto, donde hay extremismo ideol¨®gico o religioso¡­ son ellas (las entidades locales) las que traen la informaci¨®n de lo que est¨¢ pasando. Quiz¨¢ ellos solos no tienen el m¨²sculo para lograr ciertos cambios, pero a trav¨¦s de nuestro micr¨®fono pueden decir ¡®en Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo est¨¢ pasando esto¡¯ o ¡®en Sud¨¢n est¨¢ pasando lo otro¡¯¡±, aclara. Recientemente han presentado ante la Comisi¨®n Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos un Amicus Curiae, un documento jur¨ªdico que apoya con argumentos y fundamentos legales, el trabajo de unas organizaciones en Nigeria que defend¨ªan que la prohibici¨®n de acceso a la educaci¨®n a las menores que quedaban embarazadas era discriminatoria y violaba los derechos humanos de las mujeres y ni?as.

Derecho que no se ejerce es derecho que se pierde o se puede perder, incluyendo la libertad de expresi¨®n: el poder decir todas estas cosas y hacerlas visibles

La preocupaci¨®n por la situaci¨®n de las mujeres y ni?as se da incluso, en realidades muy cercanas a la nuestra, en pa¨ªses como Hungr¨ªa y Polonia. El auge de partidos de extrema derecha y de mentalidad conservadora en toda Europa, hace que la defensa de los derechos humanos de mujeres y ni?as se plantee hoy en d¨ªa como algo necesario en muchos contextos. ¡°Derecho que no se ejerce es derecho que se pierde o se puede perder, incluyendo la libertad de expresi¨®n: el poder decir todas estas cosas y hacerlas visibles. Es una realidad que est¨¢ en algunos pa¨ªses de la UE y tambi¨¦n en movimientos transnacionales de lucha contra la igualdad de g¨¦nero¡±, insiste Estrada. En el mensaje emitido por el Grupo de Trabajo con motivo del pasado 8M, se planteaba esta idea como reflexi¨®n: si este es mi derecho, ?por qu¨¦ me voy a conformar con menos?

¡°A pesar del esfuerzo colectivo, pol¨ªtico y social por parte de los gobiernos de asegurar ciertos m¨ªnimos, como el derecho al voto, la independencia econ¨®mica, poder acceder al divorcio, la interrupci¨®n legal del embarazo y la autonom¨ªa reproductiva¡­ Son temas que hoy se est¨¢n cuestionando mucho en determinados contextos. Por eso dir¨ªa en un primer momento que s¨ª, la situaci¨®n es preocupante en tanto que no hay que pensar que tenemos todas las batallas ganadas¡±, manifiesta Estrada. ¡°Es contrario a los est¨¢ndares y tratados internacionales de derechos humanos dar pasos atr¨¢s. Pero hay que preocuparnos cuando hay intenciones de que eso suceda. Hay que preocuparnos y ocuparnos en visibilizar lo que estos logros han supuesto, en conectar los feminismos de anta?o con los que son m¨¢s nuevos y que las ni?as, ni?os y j¨®venes est¨¦n conscientes de que muchas cosas de su vida de hoy en d¨ªa que dan por hecho vienen de esas luchas¡±.

Para el 2022, el tema a trabajar en su informe tem¨¢tico anual ser¨¢ el activismo de ni?as y mujeres j¨®venes para lograr el cambio social, porque considera fundamental esa labor de participaci¨®n y acci¨®n colectiva en diferentes partes del mundo, inspiradas en figuras como Greta Thumberg y los Fridays for Future o Malala Yousafzai y su lucha por la educaci¨®n de las ni?as. Tambi¨¦n le interesa ver c¨®mo ha afectado la pandemia de la covid-19 a nivel de desigualdad socioecon¨®mica y pobreza, y c¨®mo tendr¨ªa que ser una recuperaci¨®n igualitaria para protegerlas. ¡°En esta labor pedag¨®gica y did¨¢ctica se necesitan modelos y liderazgos cercanos a la realidad de las personas a las que se habla. Si queremos lograr esos cambios desde la educaci¨®n, tiene que haber referentes que los ni?os y ni?as puedan ver de forma m¨¢s cercana¡±, concluye.

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