Shahrbanoo Sadat: ¡°Voy a rodar el primer beso de la historia del cine afgano¡±
La directora de ¡®The Orphanage¡¯, ganadora del premio a la Mejor Pel¨ªcula en el Festival de Cine por Mujeres en 2020, visita Madrid como jurado del galard¨®n y anuncia sus proyectos siempre ligados a su Afganist¨¢n natal, aunque ahora viva en Hamburgo, tras la llegada de los talibanes
Hace justo un a?o que la covid-19 se interpuso entre Shahrbanoo Sadat (Teher¨¢n, 1990) y el viaje que la habr¨ªa tra¨ªdo hasta Madrid para recoger el premio a la Mejor Pel¨ªcula en la tercera edici¨®n del Festival de Cine por Mujeres, por The Orphanage; la historia de un adolescente afgano sin hogar, que sobrevive trapicheando con la reventa de entradas para un cine de barrio donde casi como norma, se proyectan coloridas producciones de Bollywood.
Entonces, la cineasta excusaba su ausencia con un cari?oso v¨ªdeo grabado en la terraza del reci¨¦n estrenado apartamento del centro de Kabul, que el pasado mes de agosto tuvo que abandonar precipitadamente, llamada por la vida, su amado trabajo. Sadat, con un sutil velo blanco en la cabeza, miraba a c¨¢mara con el fondo mate de un cielo gris¨¢ceo, mitad culpa de las nubes, mitad de la contaminaci¨®n tambi¨¦n ac¨²stica de un tr¨¢fico infernal. ¡°Lo cre¨¢is o no¡±, dec¨ªa, ¡°esta es la toma n¨²mero 100 y no entiendo por qu¨¦ est¨¢ resultando tan complicado para m¨ª grabar este v¨ªdeo de dos minutos¡±, contaba feliz Shahrbanoo Sadat, que tras los agradecimientos se desped¨ªa con un, ¡°quiz¨¢s la pr¨®xima vez. Muchas gracias, os quiero¡±.
El pasado 27 octubre, Sadat saludaba desde la apertura del citado Festival ¨Dque concluy¨® el 7 de noviembre¨D como miembro del jurado, que finalmente escogi¨® como mejor pel¨ªcula extranjera Un Monde, (Playground), de la directora belga Laura Wandel, y Once Upon a Place, de C¨¨lia Novis como mejor cinta espa?ola. ?Podemos dar gracias a la guerra por haber permitido a Sadat viajar hasta Madrid?
Al menos, uno de sus sue?os se ha cumplido. ¡°Recuerdo perfectamente aquel v¨ªdeo y lo que dije desde la terraza porque acababa de estrenar ese apartamento. Formul¨¦ el deseo de viajar a Madrid. Lo que no esperaba es que lo hiciera en estas circunstancias. Mi salida de Kabul no ha sido para nada un momento ¨¦pico. Apenas tuve tiempo de pensarlo. Cerr¨¦ la puerta, guard¨¦ la llave en mi bolsillo y me dirig¨ª al aeropuerto con parte de los m¨ªos. Aliviada por alejarme de la terrible situaci¨®n provocada por la llegada del gobierno talib¨¢n, pero angustiada por los familiares que todav¨ªa no han podido salir de all¨ª¡±.
Shahrbanoo Sadat atiende la entrevista, antes de partir a Alemania, en la Residencia de Estudiantes de Madrid, un lugar cuyas inevitables referencias le eran familiares. Cuenta Carlota ?lvarez-Basso, codirectora junto a Diego M¨¢s, del Festival de Cine por Mujeres, que Sadat sab¨ªa perfectamente qui¨¦nes eran Lorca o Bu?uel. Aun as¨ª, no renunci¨® a seguir investigando la historia del lugar, fascinada por las palabras que lee en una placa. ?Europa comienza aqu¨ª! Est¨¢ en la galer¨ªa que precede al Pabell¨®n Principal. ¡°En seguida supe que no iba a vivir en un hotel. El sitio es especial, con un indudable ambiente acad¨¦mico¡±. Las previsiones apuestan por un Madrid lluvioso, sin embargo, esa ma?ana la humedad solo se intuye en el color del cielo, a la vez nublado y luminoso. Otras directoras tambi¨¦n se hospedan all¨ª. El intercambio est¨¢ servido. Desayunos de cine y mucha historia.
¨D?Qu¨¦ ha hecho estos d¨ªas en Madrid, adem¨¢s de ver pel¨ªculas?
¨DPasear much¨ªsimo. Visitar jardines y parques es mi afici¨®n favorita, y siempre caminando. S¨¦ que Madrid tiene maravillosos museos, pero he preferido descubrir jardines bot¨¢nicos, tan preciosos en oto?o. Mi padre era agricultor y mi relaci¨®n con la naturaleza es muy estrecha. ?La lluvia? Vivo actualmente en Hamburgo donde cae much¨ªsima m¨¢s agua que en Madrid.
La primera vez que Sadat ocup¨® una butaca en una sala de cine estaba en Par¨ªs y ten¨ªa 20 a?os. Se proyectaba D¨ªas de cielo, de Terrence Malick. Los ¨²ltimos t¨ªtulos que ha visto pertenecen a la programaci¨®n del Festival de Cine por Mujeres y disfrut¨® con La place d?une Autre, de la francesa Aur¨¦lia Georges, y Clara Sola, de la costarricense Nathalie ?lvarez Mes¨¦n, de cuya proyecci¨®n sali¨® con las manos en el coraz¨®n, fascinada por las interpretaciones de un elenco de actores y actrices no profesionales.
¨DSu nombre ya es un referente no solo del cine afgano, sino del cine afgano femenino. ?Demasiada responsabilidad?
¨DEs algo inesperado para m¨ª. Me considero una mujer de cine, pero soy una directora que tiene su propio mundo. Soy consciente de que la representaci¨®n que ejerzo, se debe en parte a que tengo acceso a los festivales y hablo con la prensa. No voy a ocultar que en ocasiones me siento un poco mareada en mi papel de altavoz. (Risas)
A pesar de los 40 a?os en conflicto, Afganist¨¢n es mucho m¨¢s. La gente incluso contempla la guerra como algo cotidiano por una cuesti¨®n de supervivencia. Pero la vida all¨ª tambi¨¦n tiene su lado c¨®micoShahrbanoo Sadat, directora de cine
¨D?C¨®mo afronta el futuro alguien que vive con una mochila tan cargada a pesar de su juventud?
¨D?El futuro? En este momento el presente es tan tremendo que prefiero dedicarme a ¨¦l. Mi familia vivi¨® cuatro d¨¦cadas en Ir¨¢n, donde yo nac¨ª. Cuando mis padres decidieron volver yo ten¨ªa 11 a?os. No pod¨ªa entender por qu¨¦ me sacaban del lugar donde estaba creciendo para llevarme a otro en el que no ten¨ªa la menor referencia. Pero ahora comprendo perfectamente a mis padres. Si pienso en el futuro, lo primero que me planteo es volver a casa. A Kabul.
Mientras tanto sigue trabajando en su pr¨®xima pel¨ªcula que (?sorpresa!) ser¨¢ una comedia rom¨¢ntica. Lleva dos a?os preparando el guion y curiosamente ya tiene dise?ada la escena final: un beso. ¡°Voy a rodar el primer beso de la historia del cine afgano¡±.
¨DImagino que la cultura popular de su pa¨ªs va m¨¢s all¨¢ que lo que cuentan las historias de la guerra.
¨DPor supuesto. A pesar de los 40 a?os en conflicto, Afganist¨¢n es mucho m¨¢s. La gente incluso contempla la guerra como algo cotidiano por una cuesti¨®n de supervivencia. Pero la vida all¨ª tambi¨¦n tiene su lado c¨®mico, y esas dos caras de la realidad conviven porque no pueden existir la una sin la otra.
Cuenta Sharbanoo Sadat, cuyo nombre se traduce como the best lady in town (la mejor chica de la ciudad) que ese beso ser¨¢ la escena final del largometraje, intencionadamente estereotipado y parecido al cierre de las comedias rom¨¢nticas donde un coraz¨®n de color rosa envuelve el momento dando paso a los t¨ªtulos de cr¨¦dito. Y ?qui¨¦n ser¨¢ el protagonista de ese gesto de amor? Su novio. Anwar Hashimi, que aunque no es actor, lleva escritas 800 p¨¢ginas sobre su vida. Unos diarios in¨¦ditos que Sadat quiere convertir en cinco pel¨ªculas. Las dos primeras ¨DWoolf and Step y The Orphanat¨D tambi¨¦n est¨¢n basadas en esas memorias.
¨D?C¨®mo se conocieron?
¨DTrabaj¨¢bamos en el mismo canal de televisi¨®n. Yo era productora en un programa de cocina. ?l, en los servicios informativos, algo que me fascinaba porque las noticias nos parec¨ªan la secci¨®n m¨¢s importante. Ahora, el reto es encontrar a la actriz que quiera cerrar la pareja para el beso. Mi productora me propuso hacerlo a m¨ª, pero no acept¨¦. As¨ª que sigo buscando una chica para mi novio y no parar¨¦ hasta encontrarla. (Risas)
¨DLa de cosas que nos habr¨ªamos perdido si hubiese estudiado la carrera de Ciencias F¨ªsicas como era su intenci¨®n¡
¨DPara volver a la f¨ªsica todav¨ªa estoy a tiempo¡ Mi familia es muy religiosa y me atrajo la ciencia como alternativa a todo eso que ellos resolv¨ªan acudiendo a la fe. Soy la m¨¢s peque?a de mis hermanos y siempre mantuve ese pulso con mi padre. Ten¨ªa 16 a?os cuando llegu¨¦ a Kabul con la intenci¨®n de matricularme en F¨ªsicas y era tarde para la prueba de acceso, as¨ª que me inscrib¨ª en Arte para evitar que mi padre me obligara a regresar a casa.
Sharbanoo Sadat habla ingl¨¦s, franc¨¦s, los dialectos afgano y persa, past¨²n y dari, entiende un poco de ruso y ¨¢rabe, y en breve comenzar¨¢ sus clases diarias de alem¨¢n. Obligaci¨®n que le exigir¨¢ viajar con menos frecuencia. Desde que lleg¨® a Europa ha visitado Roma, Suiza, Francia y Espa?a. ¡°No he conseguido todav¨ªa sentar el alma en Hamburgo. Muchos viajes y aunque todos son por trabajo, sigo descubriendo jardines all¨¢ donde voy¡ Tambi¨¦n me interesa la arquitectura y el dise?o de escenograf¨ªas. Estoy estudiando como recrear Afganist¨¢n en Espa?a, donde me har¨ªa muy feliz poder rodar. Ya sabemos que casi todo es cuesti¨®n de dinero. Mis pel¨ªculas est¨¢n hechas en Kazajist¨¢n, as¨ª, que¡ ?Cojamos el dinero y recreemos Afganist¨¢n!¡±
Como ganadora de la edici¨®n anterior del Festival de Cine por Mujeres, agradece el galard¨®n: tres semanas de trabajo en la sala M¨ªstika de cine digital de Free Your Mind, valorado en 30.000 euros, para su pr¨®ximo largo y ese primer beso en la historia del cine de Afganist¨¢n.
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