Los medios dejan de ingresar miles de millones de euros por marginar a las mujeres

Esta informaci¨®n la firma una mujer, bajo la supervisi¨®n de una editora e incluye la opini¨®n de varias expertas sobre un estudio que trata sobre la desigualdad de g¨¦nero. Este texto es una excepci¨®n. Los medios son un mundo de hombres: ellos son mayor¨ªa en los puestos de poder, los titulares, los contenidos, las fuentes y la audiencia. Dar la vuelta a esta situaci¨®n no solo ¡°es lo justo¡±, sino que ¡°tiene sentido econ¨®micamente¡±, anota Jane Barrett, editora global para la estrategia de noticias de Reuters, en el Reino Unido. Lo dice en la presentaci¨®n del estudio De la indignaci¨®n a la oportunidad, que calcula que, en el m¨¢s conservador de sus c¨¢lculos, en el mundo los medios podr¨ªan ingresar 10.600 millones de euros adicionales en cinco a?os si lograran reducir anualmente un punto porcentual la brecha de consumo de noticias entre hombres y mujeres. A ese ritmo, la ganancia ascender¨ªa a 36.700 millones en una d¨¦cada. En el m¨¢s optimista de los escenarios, en el ¡°poco realista¡± caso de que hoy la industria fuera plenamente igualitaria en todos sus eslabones, los beneficios extra ascender¨ªan a 41.500 millones en un lustro y 80.000 millones en 10 a?os.

La investigaci¨®n, liderada por la especialista en audiencias Luba Kassova, por encargo de la Fundaci¨®n Bill y Melinda Gates, identifica una brecha de consumo de noticias, que es entre 15 y 16 puntos porcentuales menor entre las mujeres. En ello influyen ¡°factores sociales y econ¨®micos sist¨¦micos, que escapan al control de la industria period¨ªstica, como los valores patriarcales y las barreras del mercado laboral¡±, matizan los autores. Descontados tales elementos, entre un 11% y 12% del desigual inter¨¦s por informarse es responsabilidad de los medios. Ese es el caladero donde pescar audiencia y aumentar los ingresos. Pero no bastar¨¢ con tirar el mismo anzuelo de siempre. El sector tiene que cambiar desde su cultura y estructura empresarial hasta los h¨¢bitos individuales y colectivos de sus reporteros, seg¨²n este estudio. Todo para que haya m¨¢s mujeres a los mandos ¨Cahora apenas el 26% son redactoras jefe¨C , as¨ª como en las informaciones, sobre temas que les interesan, con voces femeninas.

Espa?a no se libra del d¨¦ficit de audiencia femenina. De los 1.680 medios con edici¨®n digital de 68 pa¨ªses analizados en septiembre de 2022 por la consultora AKAS, que ha elaborado este informe, 32 eran espa?oles (incluidos elpais.com, rtve.es, eldiario.es o efe.com). Estos recibieron 1.550 millones de visitas a sus contenidos en ese mes que, segregadas por g¨¦nero, desvelan una desigualdad de 16 puntos porcentuales: un 58% de hombres frente a un 42% de mujeres. La pauta se repite en los peri¨®dicos impresos: de quienes dicen informarse en sus p¨¢ginas de papel, el 57% son varones y el 43%, lectoras. Una disparidad de 14 puntos. Espa?a tampoco sale bien parada en la fotograf¨ªa de redactoras jefe a los mandos en las 10 principales cabeceras del pa¨ªs, en las que ellas son el 22% este a?o. Si bien esto significa un gran aumento respecto del 8% de 2021, siempre seg¨²n los datos del estudio.

Todav¨ªa el 84% de las personas a las que entrevist¨¦, editores de alto nivel de todo el mundo, piensa que las redacciones siguen dominadas por los hombres

Luba Kassova, investigadora

¡°La correlaci¨®n entre la proporci¨®n de mujeres en la direcci¨®n de los medios y los reporteros, las fuentes y los protagonistas, y la participaci¨®n de la audiencia femenina siguen sin estar claras, esencialmente por falta de datos¡±, reconocen los investigadores. El equipo de AKAS destaca como un ejemplo iluminador la iniciativa impulsada por Amedia ¨Cel mayor editor de peri¨®dicos locales de Noruega, con 80 cabeceras y 2,4 millones de lectores diarios en todas las plataformas¨C, que buscaba espec¨ªficamente comprender la relaci¨®n entre el g¨¦nero de los periodistas, la proporci¨®n de voces femeninas en los art¨ªculos y el comportamiento de las audiencias. Sus hallazgos mostraron una relaci¨®n positiva tanto entre la cuota de autoras y la de protagonistas mujeres (40%), como entre el porcentaje de protagonistas y lectoras (51%).

Y, finalmente, comprobaron el impacto en sus cuentas. ¡°Los cient¨ªficos de datos de Amedia analizaron la diversidad de varias redacciones en relaci¨®n con sus finanzas y descubrieron que las m¨¢s equilibradas en cuanto a g¨¦nero y las que m¨¢s escriben sobre mujeres obtienen los mejores resultados econ¨®micos¡±, recoge el informe. ¡°Cuanto m¨¢s equilibrada es la redacci¨®n, m¨¢s lo es la cobertura informativa y la base de suscriptores¡±, concluyen los autores. Para Kassova, avanzar en igualdad de g¨¦nero en los medios no solo se trata de una decisi¨®n inteligente desde el punto de vista econ¨®mico, sino imprescindible para el oficio period¨ªstico. ¡°Se genera un d¨¦ficit de confianza cuando no se refleja a la sociedad en las informaciones. Cuando las perspectivas de las personas de color o de las mujeres son marginadas, dejan de confiar en ti. Y entonces hay un problema adicional a perder ingresos. Estar¨¢s en riesgo de desaparecer¡±, opina.

Desigualdad en toda la cadena de producci¨®n de noticias

Las estad¨ªsticas del estudio, que ha analizado los medios y las informaciones en Estados Unidos, Reino Unido, India, Nigeria, Kenia y Sud¨¢frica, muestran que la progresi¨®n hacia la igualdad de g¨¦nero es pr¨¢cticamente nula tanto en el norte como en el sur global. Desde los liderazgos internos hasta los contenidos de las noticias. ¡°Me ha sorprendido que todav¨ªa el 84% de las personas a las que entrevist¨¦, editores de alto nivel de todo el mundo, piensa que las redacciones siguen dominadas por los hombres. Es demasiado¡±, expresa desalentada la investigadora en una videollamada desde Londres.

Los datos lo constatan: en 2022, apenas uno de cada cuatro redactores jefe (26%) en los seis pa¨ªses estudiados son mujeres. ¡°Pr¨¢cticamente la misma cifra, inlcuso ligeramente inferior, que la media mundial de hace una d¨¦cada¡±, lamenta Kassova. Aunque la disparidad var¨ªa entre naciones: por cada redactora jefe hay dos hombres que lo son en Sud¨¢frica, Estados Unidos y Reino Unido; mientras que la proporci¨®n es de una frente a 12 en los medios de comunicaci¨®n regionales de la India. Del mismo modo, el porcentaje de mujeres editoras jefe es mayor en Sud¨¢frica y el Reino Unido (37%) y, de nuevo, el m¨¢s bajo lo regisra India (11% en los medios nacionales y 8% en los regionales). En Estados Unidos, Nigeria y Kenia, ellas representan el 35%, 18% y 19%, respectivamente.

Se da, as¨ªmismo, una desigualdad por tem¨¢ticas. Mientras que s¨ª se ha logrado la paridad en el liderazgo de las mesas de salud, no sucede lo mismo con las de pol¨ªtica, internacional o econom¨ªa. En estas, ellas son una de cada tres. ¡°Esta discrepancia reconfirma la prolongada segregaci¨®n de g¨¦nero en las redacciones de los trabajos editoriales, asignando a las mujeres los temas ¡®blandos¡¯, y los ¡®duros¡¯ a los redactores jefes¡±, apuntan los autores de la investigaci¨®n. Lo que, en su opini¨®n, ¡°puede estar suprimiendo el consumo de las mujeres de los g¨¦neros informativos de alto perfil, que suelen ser editados por hombres¡±.

Solo el 0,02% de las noticias que se publican en el mundo tratan sobre las brechas de g¨¦nero que afectan a las mujeres, como la desigualdad salarial o la discriminaci¨®n por edad, entre otras

¡°En t¨¦rminos de cuota de voz, en Reino Unido e India, la proporci¨®n entre voces masculinas y femeninas ha empeorado¡±, lamenta Kassova en el cap¨ªtulo del balance de g¨¦nero en el contenido de las informaciones. ¡°En Nigeria sigue igual y ha mejorado un poco en Sud¨¢frica, Kenia y Estados Unidos¡±, agrega. Seg¨²n sus m¨¦tricas, la proporci¨®n de mujeres expertas en las noticias ha crecido del 19% al 24% en los ¨²ltimos cinco a?os globalmente. ¡°Curiosamente, cuatro de cada 10 iniciativas de g¨¦nero en los medios eran para mejorar la visibilidad de las especialistas. Las bases de datos y las listas pueden estar marcando la diferencia¡±, describe el informe.

¡°Hay fuentes primarias, como los representantes pol¨ªticos. Y no puedo cambiar el hecho de que el presidente Joe Biden es un hombre. Pero hay otras fuentes, las secundarias, donde s¨ª podemos cambiar los h¨¢bitos para agregar m¨¢s voces femeninas y diversidad de perspectivas¡±, sugiere Barret, de Reuters. Y no solo en cuanto al n¨²mero, sino en cuanto al modo de presentar a las mujeres. ¡°Hay una tendencia a retratarlas como v¨ªctimas o hero¨ªnas. Parece que entre medias de una violada y la Madre Teresa no hay nada. Ese es precisamente el espacio de oportunidad en t¨¦rminos de representatividad¡±, comenta Shereen Bhan, editora jefe de CNBC-TV8 de India, en la conferencia virtual de presentaci¨®n del informe.

Del mismo modo que ocurre con los datos de autoras, fuentes femeninas y protagonistas de las informaciones, los contenidos de asuntos que afectan particularmente a las mujeres tambi¨¦n est¨¢n infrarrepresentados. Kassova describe siete brechas sociales que toda mujer del planeta experimenta en mayor o menor medida ¡°y que las ponen en desventaja respecto de los hombres¡±, explica. Son la salarial, de salud, de poder, confianza, seguridad, autoridad y edad. La investigadora sostiene, con las estad¨ªsticas en la mano, que las mujeres cobran menos, cuentan con peor atenci¨®n sanitaria, son minusvaloradas, violentadas y discriminadas cuando soplan velas. ¡°El equipo analiz¨® 900 millones de historias, y encontr¨® que la cobertura de estos problemas estructurales es absolutamente lamentable. Es el 0,02% de todo lo que se publica¡±, subraya Kassova. ¡°As¨ª que los problemas estructurales a los que se enfrentan las mujeres no est¨¢n en el radar de los medios de comunicaci¨®n¡±.

Las mujeres negras siempre lo tienen peor

El informe De la indignaci¨®n a la oportunidad es el tercero de la serie de investigaciones Missing perspectives (perspectivas olvidadas), solicitadas por la Fundaci¨®n Gates al equipo de AKAS liderado por Kassova. En los anteriores estudios ya salieron a la luz datos prepcupantes sobre la desigualdad de g¨¦nero en la industria informativa como los que recoge en esta nueva edici¨®n. Pero hay una novedad, unas cifras que han dejado a la experta ¡°muy sorprendida¡±. ¡°Son las relativas a lo marginadas que est¨¢n las mujeres de color en el sector¡±.

En esta ocasi¨®n, han estudiado c¨®mo experimentan ellas la desigualdad. Y en todos los ¨¢mbitos ¨Cjefaturas, firmas, protagonistas de la informaci¨®n, fuentes¨C salen peor paradas que sus cong¨¦neres blancas. Est¨¢n a¨²n m¨¢s infrarrepresentadas. ¡°En el liderazgo, en el Reino Unido, por ejemplo, no hay una sola mujer de color que est¨¦ a cargo de la mesa de salud, pol¨ªtica o asuntos exteriores¡±, comenta Kassova escandalizada. En EE UU, concretan los autores, las personas de color ocupan el 17% de estos puestos, lo que supone un porcentaje inferior al que representan en las plantillas de la prensa (22%).

Seg¨²n el informe, las mujeres de color est¨¢n ¡°gravemente marginadas¡± en las redacciones de EE UU en comparaci¨®n con su proporci¨®n en el mercado laboral: ellas son apenas el 3% de los redactores de pol¨ªtica, el 4% de internacional, el 6% de sanidad y el 9% de econom¨ªa y empresa. En Sud¨¢frica, si la representaci¨®n de las mujeres de color en las redacciones se correspondiera con su proporci¨®n en la poblaci¨®n activa, el n¨²mero ser¨ªa dos veces mayor en las redacciones de econom¨ªa y negocios, 2,2 veces m¨¢s en las de pol¨ªtica y 1,2 veces superior en las mesas de salud. En este pa¨ªs, el 60% de los redactores pol¨ªticos son personas de color, frente al 93% de la poblaci¨®n activa, compara el estudio.

Hay soluci¨®n

¡°Lo importante es que es que este informe incluye una gu¨ªa de soluciones. Necesitamos ver cambios en las redacciones¡±, expresa Qaanitah Hunter, editora asistente de pol¨ªtica y opini¨®n de News24, en Sud¨¢frica. ¡°Esto no ocurre naturalmente¡±, contin¨²a Bhan, de CNBC-TV8 India, ¡°lograr la igualdad tiene que ser una opci¨®n¡±. Su propuesta es ¡°crear un ambiente¡± propicio para que las mujeres progresen y alcancen altos cargos.

Entre tanto dato desalentador, en los que Kassova no observa progreso alguno, hay rayos de esperanza en peque?as y medianas iniciativas que est¨¢n desarrollando algunos medios para cerrar sus brechas. ¡°Hay un mont¨®n de soluciones pr¨¢cticas sobre las que hemos escrito y muchas de ellas, generadas por los editores de noticias con los que he hablado, est¨¢n muy bien¡±, anota. Su propuesta integral (¡±no basta con tener una directora mujer¡±, aclara) es un viaje en 12 pasos para intervenir en 12 ¨¢reas en tres niveles (social, empresarial e individual). Objetivo final: ¡°Atraer a m¨¢s mujeres, pero sin alienar al p¨²blico masculino¡±.

12 pasos...

• Paso 1: Lea el resumen ejecutivo y el apartado de soluciones del informe De la indignaci¨®n a la oportunidad.
• Paso 2: En funci¨®n del tama?o de su servicio de noticias, asigne a personas, un equipo o un grupo de trabajo, de diferentes disciplinas y/o departamentos, incluyendo a personal de la redacci¨®n y los expertos en diversidad o inclusi¨®n, para abordar los retos y las oportunidades.
• Paso 3: Hacer de la igualdad de g¨¦nero, la diversidad y la inclusi¨®n (de raza tambi¨¦n) una parte expl¨ªcita e integral de su estrategia informativa, en vez de ser un elemento simb¨®lico. Comprom¨¦tase a realizar el esfuerzo necesario en toda la cadena de valor de las noticias.
• Paso 4: Llevar a cabo una auditor¨ªa de la brecha de g¨¦nero en los diferentes eslabones de la cadena de valor (por ejemplo, noticias, recursos humanos, coberturas, audiencias). Identificar las ¨¢reas con las brechas m¨¢s importantes.
• Paso 5: Elegir hasta tres de las 12 ¨¢reas de soluciones en las que se quiere trabajar para priorizarlas e implementarlas. Establezca objetivos claros de ¨¦xito para tres, seis meses, un a?o y tres a?os.
• Paso 6: Para cada ¨¢rea, organice un taller dedicado a desarrollar ideas de implementaci¨®n.
• Paso 7: Antes de los talleres, comparta material de est¨ªmulo para ayudar a generar ideas. Puede incluir el informe De la indignaci¨®n a la oportunidad (hojas de temas de soluciones, estudios de casos), ejemplos de su propia organizaci¨®n, y cualquier otra informaci¨®n relevante para el p¨²blico.
• Paso 8: Organice talleres separados centrados en cada una de las ¨¢reas y genere soluciones e ideas.
• Paso 9: Al final de cada taller, priorice las propuestas de soluci¨®n generadas y decida cu¨¢les desea poner en pr¨¢ctica.
• Paso 10: Empezar a aplicar las propuestas con un plan y unos objetivos claros.
• Paso 11: Haga un seguimiento del rendimiento de las propuestas implementadas y realice ajustes si surgen contratiempos. Recoja lo que ha aprendido sobre lo que funciona y lo que debe mejorar.
• Paso 12: Pase a abordar el siguiente conjunto de ¨¢reas y vuelva al primer paso.

...en 12 ¨¢reas

1. Para consolidar el esfuerzo de la industria para progresar hacia la igualdad, una de las cuestiones propuestas es ¡°aumentar la conciencia¡± acerca de la brecha de g¨¦nero.
2. Llevar a cabo una auditor¨ªa exhaustiva de la diversidad de g¨¦nero en todos los eslabones de la cadena informativa.
3. Elaborar una estrategia de diversidad de g¨¦nero. Aqu¨ª, los autores piden: ¡°Sea expl¨ªcito e intencional sobre su apoyo a la diversidad de g¨¦nero y racial¡±, y que esta forme parte de la misi¨®n y los valores de la organizaci¨®n. Comunicar la estrategia, sus objetivos y su vinculaci¨®n con las oportunidades de negocio, al ser una medida para aumentar la audiencia y, con ello, los ingresos.
4. Mejorar la representaci¨®n de las mujeres en los puestos de direcci¨®n. Para ello, el documento llama a ¡°desafiar la persistente segregaci¨®n de g¨¦nero de las funciones editoriales que deriva en que se mantenga a las mujeres fuera de los temas m¨¢s importantes como la pol¨ªtica, la econom¨ªa y la informaci¨®n internacional¡±. Tambi¨¦n, desarrollar y poner en marcha pol¨ªticas que atraigan y retengan a m¨¢s trabajadoras de todos los colores, como garant¨ªas de igualdad salarial, flexibilidad horaria, medidas contra el acoso sexual, planes de formaci¨®n y desarrollo profesional. ¡°Incluso pueden implementar una pol¨ªtica contra los maneles (de unir man y panel, quiere decir paneles en los que solo hablan varones)¡±, destacan.
5. Mejorar espec¨ªficamente la representaci¨®n de las mujeres de color en los cargos de direcci¨®n y jefaturas de redacci¨®n, estableciendo objetivos de representatividad en consonancia con su proporci¨®n en la poblaci¨®n activa.
6. Para lograr contar con m¨¢s mujeres en los puestos de toma de decisiones, proporcionar formaci¨®n individual en todos los niveles de la estructura organizativa para luchar contra los sesgos de g¨¦nero.
7. Aumentar espec¨ªficamente la presencia de mujeres de color en la direcci¨®n de los medios de comunicaci¨®n.
8. En general, incrementar la representaci¨®n e inclusi¨®n de las mujeres en las redacciones.
9. Alcanzar una representaci¨®n adecuada de todas las mujeres en la cobertura informativa. ¡°Como organizaci¨®n de noticias, propicie que su redacci¨®n acceda a fuentes femeninas y a expertas mediante una formaci¨®n orientada e independiente¡±, dicen.
10. Para mejorar la narraci¨®n de historias sobre temas que afectan espec¨ªficamente a las mujeres de todos los colores, ¡°aumentar la cobertura informativa sobre las brechas existentes entre mujeres y hombres en la sociedad, y que son m¨¢s profundas entre las personas de color¡±.
11. En general, informar dando una imagen adecuada a la realidad de las mujeres. No siempre son v¨ªctimas.
12. Reformular los argumentos para el cambio hacia la igualdad de g¨¦nero, a fin de incluir la oportunidad comercial de dirigirse al p¨²blico femenino.

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