C¨®mo la ultraderecha cristiana occidental ejerce influencia en la cruzada anti-LGTBI en Ghana
Grupos como el Congreso Mundial de las Familias o CitizenGO azuzan desde hace a?os la homofobia en el pa¨ªs africano, cuyo Parlamento aprob¨® en febrero una ley que criminaliza la homosexualidad. La estrategia pasa por persuadir a la poblaci¨®n local de que son los guardianes de la ortodoxia religiosa
La activista Rita Nketiah se prepar¨® a conciencia para asistir al Congreso Mundial de las Familias (WCF por sus siglas en ingl¨¦s) que en 2019 tuvo lugar en Acra, la capital de Ghana. Sab¨ªa que el evento ¡ªorganizado por una alianza de entidades ultraconservadoras de EE UU¡ª ser¨ªa un aquelarre anti-LGTBI. Un homenaje al orgullo hetero en el que su apariencia habitual provocar¨ªa suspicacias.
Nketiah, que se identifica como queer y rechaza ser clasificada por sus pr¨¢cticas sexuales o su g¨¦nero, recibi¨® un cursillo de seguridad a cargo de democraciaAbierta, la plataforma de periodismo independiente que la hab¨ªa convencido para inflirtrarse en la boca del lobo. Hizo de tripas coraz¨®n y se meti¨® de lleno en un papel opuesto a su identidad. Por videoconferencia, narra que aquel d¨ªa se visti¨® ¡°como una ghanesa cristiana de clase media, muy normativa¡±. Cuenta que se mantuvo en un discreto segundo plano, sin hablar casi con nadie, tomando notas y aguantando estoicamente.
¡°Aquello parec¨ªa una congregaci¨®n en la que todos predicaban¡±, contin¨²a Nketiah. Acudieron pol¨ªticos de alto nivel y reputados acad¨¦micos. Hubo c¨¢nticos religiosos y exaltaci¨®n patri¨®tica. Entre delirios ¡°de p¨¢nico moral pseudocient¨ªfico¡±, Nketiah encontr¨® un hilo conductor: ¡°La idea era vincular los derechos LGTBI con un peor desarrollo del pa¨ªs, incluso con su destrucci¨®n, b¨¢sicamente porque seg¨²n ellos, denigran a la familia tradicional, que es el eje de nuestra sociedad¡±. El lema del congreso resum¨ªa esta idea: La familia africana y el desarrollo sostenible: familias fuertes, naciones fuertes.
Attending to the Regional World Congress of Families, Accra Ghana 2019. Theme: The African Family and sustainable Development. @UCU_APC @UCUniversity @DrLawry @BarashaOfficial pic.twitter.com/jfq8AjLsdx
— Thee Michael Clement (@MCNamawa) October 31, 2019
Como socio local, el WCF cont¨® para su congreso en Acra con una organizaci¨®n ghanesa de nombre cr¨ªptico: Coalici¨®n Nacional para los Derechos Sexuales Humanos Adecuados y los Valores Familiares. Se trata de una amalgama de evang¨¦licos, musulmanes y chiefs (l¨ªderes religiosos tradicionales) comandada por Moses Foh-Amoaning, un abogado que defiende sin tapujos las terapias de conversi¨®n para curar homosexuales. O que llama a reapropiarse ¡ªmediante enrevesadas citas b¨ªblicas¡ª del arco¨ªris con el fin de purificarlo de su simbolismo gay. O que grita a los cuatro vientos los perjuicios para la salud (am¨¦n de su esencia demon¨ªaca) del sexo anal. Junto a pol¨ªticos como Sam George (actual l¨ªder de la oposici¨®n), Foh-Amoaning ha sido el principal portavoz de la campa?a hom¨®foba en Ghana, que ha desembocado en la reciente aprobaci¨®n ¡ªa falta de la firma del presidente ghan¨¦s, Nana Akufo Addo¡ª de una ley que criminaliza severamente a las minor¨ªas sexuales. El texto votado en el Parlamento incluye, en su mismo t¨ªtulo, la expresi¨®n ¡°derechos sexuales humanos adecuados¡±. George y Foh-Amoaning cruzan con frecuencia el Atl¨¢ntico para confraternizar con la l¨ªnea dura de la derecha cristiana estadounidense.
Un hito antigay
En el congreso de 2019 intervinieron caras conocidas de la derecha cristiana estadounidense como Brian Brown, presidente de la Organizaci¨®n Internacional para la Familia, o Sharon Slater, fundadora de Family Watch International (FWI), muy beligerante en Uganda, donde el pasado a?o se aprob¨® una de las leyes antigais m¨¢s agresivas del mundo. Este mismo mi¨¦rcoles, el Tribunal Constitucional desestim¨® una petici¨®n para vetarla.
Un informe de la red para la justicia reproductiva Ipas diseccion¨® en 2023 la influencia extranjera en la cristalizaci¨®n de un frente hom¨®fobo en Ghana. Sus autores describen un entramado de v¨ªnculos personales entre figuras insignes de la campa?a anti-LGTBI ghanesa y el ultraconservadurismo occidental. Tambi¨¦n explican c¨®mo el activismo digital for¨¢neo ha ayudado a que all¨ª vaya germinando la intolerancia contra la diversidad sexual. Y aseguran, citando a fuentes que asistieron al WCF, que el propio Brown llam¨® en su discurso de bienvenida a ¡°criminalizar las pr¨¢cticas homosexuales¡±. Este peri¨®dico ha tratado de contactar en numerosas ocasiones con los promotores del WCF, sin obtener respuesta.
Nketiah sostiene que el WCF de 2019 marc¨® un hito en el af¨¢n de institucionalizar el sentimiento antigay en Ghana. Fue, explica, el espaldarazo definitivo para pasar de las vagas intenciones a la acci¨®n decidida. ¡°Antes ya hab¨ªa acoso, incluso gente que abogaba por meternos en el c¨¢rcel¡±, admite, ¡°pero nadie les tomaba muy en serio y nos sent¨ªamos m¨¢s o menos seguros¡±. El acontecimiento, estima esta activista, marc¨® la transici¨®n entre las agresiones espor¨¢dicas y una ¡°homofobia estructural orquestada por el propio Estado¡±. Seg¨²n una informaci¨®n de CNN aparecida en 2021, varios asistentes instaron aquellos d¨ªas a activar una maquinaria legal que pusiera coto a los derechos LGTBI.
Kwaku Adomako, antrop¨®logo e investigador en la Universidad de Lausanne (Suiza), suscribe que ¡°la influencia del WCF [el evento en s¨ª, pero tambi¨¦n el trabajo soterrado de los actores que lo promovieron] ha sido inmensa¡± en el dise?o y promoci¨®n de la ley. Adem¨¢s, prosigue Adomako, el ¡°discurso de odio¡± que propaga el WCF ha contribuido a hacer de la homofobia furibunda la opini¨®n hegem¨®nica en Ghana, casi la ¨²nica posible.
Una cruzada blanca
Seg¨²n Nketiah y organizaciones como Human Rights Campaign, Brown y Slater encabezan la cruzada blanca en ?frica contra una supuesta agenda global que busca, con oscuras motivaciones, esparcir la homosexualidad por todo el planeta. En 2022, el diputado ghan¨¦s Sam George viaj¨® a Utah (EE UU) para intervenir en una conferencia sobre ¡°pol¨ªticas para la familia africana¡± auspiciada por FWI. En Facebook, George alarde¨® de que el borrador de la ley hab¨ªa sido ¡°muy bien recibido por los participantes¡±.
Tambi¨¦n acudi¨® al WCF de 2019 Ann Kioko, directora en ?frica de CitizenGO, la iniciativa creada en 2013 por el espa?ol Ignacio Arsuaga con el prop¨®sito de aunar esfuerzos entre HazteOir ¡ªel movimiento ultracat¨®lico que fund¨® en 2001¡ª y grupos cristianos radicales de otros pa¨ªses.
En un reportaje de 2022, The Bureau of Investigative Journalism detallaba las actividades en Ghana y Kenia de CitizenGO, al que acusaba de acosar, mediante campa?as virales, a activistas o simpatizantes LGTBI. Apenas unos meses despu¨¦s del WCF de 2019, la organizaci¨®n de Arsuaga ¡ªtambi¨¦n contactada sin respuesta para este reportaje¡ª puso en Ghana su particular pica en Flandes. En colaboraci¨®n con un grupo local que se hace llamar Abogados de Cristo, recogi¨® firmas instando a las autoridades a prohibir una conferencia LGTBI panafricana que iba a tener lugar en Acra. La convocatoria fue cancelada, oficialmente por culpa de la covid-19.
Dinero y dial¨¦ctica
En Ghana y en toda el ?frica subsahariana, la oleada hom¨®foba occidental se sustenta, coinciden los expertos, en dos pilares. Por un lado, dinero y log¨ªstica. ¡°?C¨®mo se financia la coalici¨®n de Foh-Amoaning?¡±, se pregunta Nketiah. Un art¨ªculo de democraciaAbierta acredit¨® que 20 grupos ultraconservadores de EE UU hab¨ªan destinado unos 50 millones de euros al continente. Sobre todo, para acciones antiabortistas y en defensa de la familia tradicional.
La segunda columna de la lucha occidental contra la homosexualidad en ?frica es dial¨¦ctica y ha ido tejiendo, con argumentos nebulosos, un relato que entremezcla vueltas de tuerca neocolonialistas y te¨®ricos designios divinos. Primero, se?ala Nketiah, ¡°se insiste en que los derechos LGTBI son un constructo for¨¢neo, antiafricano¡±. Otra imposici¨®n del antiguo opresor, que, tras abandonar ?frica durante la descolonizaci¨®n, vuelve a la carga para reconquistar conciencias.
?C¨®mo se resuelve esta paradoja? Durante el WCF de Acra, Nketiah escuch¨® la soluci¨®n al acertijo. ¡°Los estadounidenses repitieron machaconamente que en su pa¨ªs se hab¨ªan abandonado los valores familiares. Y que, por suerte, ?frica se los estaba recordando¡±. Un sistema de creencias en torno a la sexualidad, recuerda Adomako, propio ¡°del cristianismo dogm¨¢tico que las potencias europeas llevaron a sus colonias¡±. Obviando esta evidencia, las proclamas del WCF, relata Nketiah, siguieron id¨¦ntico patr¨®n: ¡°Al parecer, nadie estaba persuadiendo a los africanos de nada. M¨¢s bien al contrario. Como si, tras perder el norte, los pobres blancos estuvieran en busca de una gu¨ªa espiritual. El p¨²blico se lo trag¨®, aplaud¨ªa encantado¡±.
Cuando ven¨ªa alg¨²n pastor blanco a predicar, siempre dec¨ªa lo mismo: ¡°?Sois el pueblo elegido! ?Cristo conf¨ªa en vosotros! ?Occidente est¨¢ perdido y ahora la responsabilidad recae sobre vuestros hombros!¡±Ballet Djedj¨¦, investigador marfile?o y autor de 'C¨®mo amarse a s¨ª mismo siendo gay en ?frica'
A Ballet Djedj¨¦, investigador marfile?o y autor de C¨®mo amarse a s¨ª mismo siendo gay en ?frica, este tipo de discursos le resultan familiares. Recuerda que, de ni?o, sol¨ªa acudir con sus padres a una iglesia evang¨¦lica. ¡°Cuando ven¨ªa alg¨²n pastor blanco a predicar, siempre dec¨ªa lo mismo: ¡®?Sois el pueblo elegido! ?Cristo conf¨ªa en vosotros! ?Occidente est¨¢ perdido y ahora la responsabilidad recae sobre vuestros hombros!¡¯¡±. Seg¨²n Djedj¨¦, ¡°este sentimiento de superioridad, el creerse mejores que los blancos en el ¨¢mbito moral, ha ido tomando forma hasta hacerse muy poderoso en toda ?frica¡±. Adomako confirma que en Ghana abunda lo que ¨¦l denomina ¡°una curiosa forma de empoderamiento: pensar que son m¨¢s cristianos que los occidentales¡±.
Tras observar lo ocurrido en varias excolonias brit¨¢nicas (Uganda y Ghana, pero tambi¨¦n Kenia o Nigeria), Djedj¨¦ teme que el rigor legislativo anti-LGTBI se extienda ahora al ?frica franc¨®fona. Le preocupa un encuentro que tendr¨¢ lugar este verano en Abiy¨¢n, la capital de Costa de Marfil. Es la Conferencia Fortaleciendo la Familia (CFF) que cada a?o hospeda un pa¨ªs africano distinto. La impulsa el matrimonio Stanley y Wendy Nielsen, miembros destacados de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los ?ltimos D¨ªas, con sede en Salt Lake City (Utah, EE UU), el epicentro morm¨®n.
En 2019, el mismo a?o en que se celebr¨® el WCF en Acra, la capital ghanesa acogi¨® adem¨¢s la primera CFF celebrada en el continente. All¨ª estuvieron la primera dama, Rebecca Akufo-Adoo, y Freda Prempeh, del Ministerio de G¨¦nero e Infancia, quien asegur¨® que su Gobierno abr¨ªa las puertas ¡°para seguir colaborando¡± con los Nielsen ¡°en la sostenibilidad de los lazos familiares¡±. El pasado 2023, durante un curso de formaci¨®n en Kasoa (Ghana), la pareja confes¨® sentirse ¡°entre milagros vivientes¡±.
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