Escuchar a los ni?os de Afganist¨¢n
Cuando se cumple un a?o del cambio de r¨¦gimen en Afganist¨¢n, la directora nacional de World Vision en el pa¨ªs, Asuntha Charles, ofrece una visi¨®n de la desesperada crisis humanitaria en la que se encuentra
Afganist¨¢n est¨¢ sufriendo lo que algunos llaman la peor crisis humanitaria del mundo. Casi toda la poblaci¨®n, alrededor del 95%, no tiene suficientes alimentos para comer cada d¨ªa. 18,9 millones de personas se enfrentan al hambre aguda, mientras que nueve millones se enfrentan a la hambruna.
Tras cuatro d¨¦cadas de conflicto, una seguridad inestable, el declive econ¨®mico, las cat¨¢strofes naturales, las perturbaciones clim¨¢ticas, la covid-19 y otros factores han contribuido a la desastrosa situaci¨®n en la que se encuentra actualmente el pa¨ªs.
El cambio de gobierno hace un a?o provoc¨® la suspensi¨®n de la mayor parte de la ayuda al desarrollo que entraba en el pa¨ªs. La ayuda hab¨ªa representado aproximadamente el 80% de todo el gasto p¨²blico en Afganist¨¢n, por lo que esta suspensi¨®n ha dado lugar a una crisis econ¨®mica sin precedentes, agravando las dificultades y el colapso de los servicios p¨²blicos y del sistema bancario.
Las familias luchan por llegar a fin de mes, ya que los bienes y servicios b¨¢sicos son inasequibles debido a la creciente inflaci¨®n. Persiste el temor de que hasta el 97% de los habitantes de Afganist¨¢n podr¨ªan vivir este a?o muy por debajo del umbral de la pobreza.
En World Vision creemos que los ni?os son uno de los grupos m¨¢s afectados por esta crisis. Los niveles de pobreza extrema est¨¢n llevando a las familias al borde del abismo, y los padres toman decisiones para hacer frente a esta situaci¨®n que les pone en peligro a ellos mismos y a sus hijos. Al menos un mill¨®n de criaturas est¨¢n al borde de la inanici¨®n y un tercio sufren retraso en el crecimiento, un efecto com¨²n y en gran medida irreversible de la desnutrici¨®n.
Desgraciadamente, una nueva investigaci¨®n confirma lo grave que es la situaci¨®n en la que se encuentran los ni?os afganos. En las cuatro regiones en las que trabajamos, hemos descubierto que las familias viven con menos de un d¨®lar al d¨ªa. Esto ha obligado a tres cuartas partes de los menores a trabajar para ayudar a sus familias, en lugar de ir a la escuela. M¨¢s de la mitad de los cuidadores dicen que sus hijos han faltado a la escuela debido a las condiciones de sequ¨ªa o para ir a buscar agua. Y, sin embargo, el 75% de los hogares siguen dependiendo de fuentes h¨ªdricas inseguras. Es sorprendente que el 53% de los ni?os afganos est¨¦n gravemente desnutridos.
En las cuatro regiones en las que trabajamos, hemos descubierto que las familias viven con menos de un d¨®lar al d¨ªa. Esto ha obligado a tres cuartas partes de los menores a trabajar para ayudar a sus familias, en lugar de ir a la escuela
Tambi¨¦n descubrimos que casi dos tercios de los beb¨¦s nacen en casa y menos de un tercio de los partos son atendidos por un profesional cualificado. Se ha demostrado que el acceso a la atenci¨®n de comadronas reduce la mortalidad de los reci¨¦n nacidos y la materna en m¨¢s de un 80%, y los partos prematuros caen en un 24%. Si no se hace algo m¨¢s para solucionar este problema, prevemos que Afganist¨¢n experimentar¨¢ un fuerte aumento de los fallecimientos de beb¨¦s y madres durante el alumbramiento.
Los ni?os de Afganist¨¢n piden a gritos el apoyo necesario para tener una infancia. Ni?os como Farida, que apenas ten¨ªa siete a?os cuando su padre se vio obligado a casarla con un hombre que ten¨ªa nietos de una edad similar a la suya. La familia necesitaba la dote para pagar la deuda que hab¨ªa contra¨ªdo solo para sobrevivir. Farida nos cuenta: ¡°Divorciarme es el ¨²nico sue?o que tengo en mi vida¡±. Me rompe el coraz¨®n que mientras los cr¨ªos de todo el mundo sue?an con lo que quieren ser de mayores, hay innumerables menores como ella que sue?an con divorciarse y tener una infancia.
Divorciarme es el ¨²nico sue?o que tengo en mi vidaFarida, ni?a afgana que se cas¨® con siete a?os
La comunidad internacional debe escuchar lo que los ni?os de Afganist¨¢n quieren y necesitan, y trabajar para crear un entorno que permita la recuperaci¨®n y el desarrollo. Lamentablemente, no es que sus voces caigan en saco roto, sino que ni siquiera se les escucha.
Para amplificar las voces de los menores afganos, World Vision est¨¢ estableciendo llamadas seguras por Zoom para permitir que los l¨ªderes mundiales les escuchen contar sus experiencias.
Consideren esto una invitaci¨®n abierta a los responsables pol¨ªticos de todo el mundo para que se pongan en contacto con World Vision y atiendan a los ni?os afganos. Nuestra esperanza es trabajar juntos para ayudar a generar una realidad que permita a los menores de Afganist¨¢n tener una infancia libre de matrimonio y trabajo infantil, desnutrici¨®n y muerte temprana. Empecemos a escuchar y pasemos a la acci¨®n hoy mismo.
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