Bienvenido 2023, el a?o del agua
La emergencia clim¨¢tica supone tambi¨¦n una crisis h¨ªdrica. Con olas de calor cada vez m¨¢s extensas y virulentas, repensar los mecanismos de gesti¨®n de este recurso resulta una tarea ineludible
Dejamos atr¨¢s al 2022, un a?o que ha sido particularmente complejo y ha estado lleno de desaf¨ªos desde m¨²ltiples perspectivas, incluida la h¨ªdrica y la medioambiental, y nos adentraremos en el que, por muchas razones, ser¨¢ el a?o del agua.
El a?o que termina nos ha dejado bien clara la importancia y la fragilidad de este recurso. Hemos vivido uno de los veranos m¨¢s secos registrados en Europa occidental. En Espa?a esto se ha traducido como el tercer a?o hidrol¨®gico m¨¢s seco desde que se tienen registros fiables. En contraste, estos ¨²ltimos d¨ªas estamos viviendo una serie de lluvias torrenciales en diferentes lugares del pa¨ªs, pero recordemos que a mediados de diciembre, la reserva h¨ªdrica espa?ola continuaba en el 37,5% de su capacidad.
Esta sucesi¨®n de sequ¨ªa y fen¨®menos meteorol¨®gicos extremos es una de las consecuencias m¨¢s claras del cambio clim¨¢tico, que sigue avanzando imparable. Tal y como qued¨® patente en el XV Foro de la Econom¨ªa del Agua, la emergencia clim¨¢tica supone una crisis h¨ªdrica, que tiene una clara vertiente social: las dificultades de acceso a agua potable en cantidad y calidad suficientes conllevan importantes efectos sobre la salud y la situaci¨®n econ¨®mica de las personas.
La sequ¨ªa y la escasez de agua se han convertido en una cuesti¨®n estructural que ya no puede abordarse con medidas de emergencia
La importancia y la gravedad de esta crisis h¨ªdrica es lo que ha impulsado a que las instituciones internacionales consideren que el 2023 debe convertirse en el a?o del agua, el momento en que este recurso se coloque por fin en primera l¨ªnea de la agenda pol¨ªtica. As¨ª, la Asamblea General de las Naciones Unidas ha convocado en Nueva York, del 22 al 24 de marzo de 2023, la Conferencia por el Agua, que analizar¨¢ en profundidad la aplicaci¨®n de los objetivos del Decenio Internacional para la Acci¨®n del agua para el desarrollo sostenible, cuando se cumple la mitad de su periodo de vigencia.
Un 2022 lleno de aprendizajes
El a?o que nos deja ha venido marcado por dos grandes crisis: la clim¨¢tica y la energ¨¦tica, ambas interrelacionadas entre s¨ª. La guerra de Ucrania ha agravado una problem¨¢tica energ¨¦tica que, m¨¢s all¨¢ de cuestiones coyunturales, va a permanecer en el tiempo, con la escasez de agua como uno de sus componentes clave.
En 2022, la grave sequ¨ªa que hemos vivido ha tra¨ªdo consigo un descenso de la producci¨®n de energ¨ªa hidr¨¢ulica, con dos consecuencias fundamentales: un incremento de los precios de la electricidad y del uso de fuentes de energ¨ªa de origen f¨®sil, lo que a su vez empeora la situaci¨®n medioambiental en un c¨ªrculo vicioso que es imprescindible romper.
En este contexto, apostar por las energ¨ªas renovables es fundamental para impulsar las centrales hidroel¨¦ctricas reversibles. Adem¨¢s, las renovables son, al mismo tiempo, un elemento de gran utilidad para incrementar la sostenibilidad de algunas soluciones ligadas al agua como la desalaci¨®n.
Por lo que respecta a la crisis h¨ªdrica, el 2022 nos ha aportado la certeza de una realidad muy preocupante: la sequ¨ªa y la escasez de agua se han convertido en una cuesti¨®n estructural que ya no puede abordarse con medidas de emergencia. El cambio clim¨¢tico est¨¢ agravando una problem¨¢tica que en muchos pa¨ªses, como Espa?a, no nos resulta nueva, pero para la que en el momento actual se hace imprescindible la puesta en marcha de soluciones a largo plazo.
En esta l¨ªnea se enmarca la reci¨¦n creada Alianza Internacional por la Resiliencia ante la Sequ¨ªa, auspiciada por Espa?a en el marco de la COP27, a la que se han adherido 30 pa¨ªses y una veintena de organizaciones, y cuyo objetivo es acelerar la acci¨®n y ayudar a los pa¨ªses a estar mejor preparados para futuras sequ¨ªas.
Concienciaci¨®n y tecnolog¨ªa
Y, ante esta complicada situaci¨®n, ?cu¨¢les son las soluciones? La primera de ellas, quiz¨¢ la m¨¢s intuitiva, es la apuesta por la racionalizaci¨®n del consumo. En este dif¨ªcil escenario se trata de una medida imprescindible, pero que no resolver¨¢ el problema por s¨ª sola. Resulta imperativo trabajar adem¨¢s por el incremento de la cantidad y la calidad del agua disponible.
Las dificultades de acceso a agua potable en cantidad y calidad suficientes conllevan importantes efectos sobre la salud y la situaci¨®n econ¨®mica de las personas
La concienciaci¨®n sobre el ahorro de agua a todos los niveles (dom¨¦stico, agroalimentario, industrial) es un pilar fundamental para enfrentar el desaf¨ªo h¨ªdrico. Optimizar la demanda de agua para garantizar su uso racional es imprescindible y debe ir acompa?ado de un aumento de las inversiones para la mejora de las infraestructuras, tanto de distribuci¨®n como de saneamiento, de modo que se eviten las p¨¦rdidas durante todo el ciclo.
Por otra parte, el aumento del porcentaje de utilizaci¨®n de agua regenerada es de gran utilidad pol¨ªtica, as¨ª como la puesta en marcha de medidas de aprovechamiento y conservaci¨®n de los acu¨ªferos.
El agua regenerada, es decir, recuperada y tratada para devolverla en mejores condiciones de las que ten¨ªa previamente, es una herramienta de provechosa para aumentar la disponibilidad y la calidad de este recurso. Adem¨¢s de su potencial para aumentar la cantidad disponible, su generalizaci¨®n se traduce en una mejora de la gesti¨®n de las aguas residuales, que previene la contaminaci¨®n de suelos y masas h¨ªdricas.
Por lo que respecta a las subterr¨¢neas, resultan un pilar imprescindible para garantizar la disponibilidad de este recurso a largo plazo, ya que suponen m¨¢s del 90% del agua disponible en el planeta. Parad¨®jicamente, pese a su potencial como soluci¨®n a la problem¨¢tica de la escasez, falta a¨²n mucho camino por recorrer en el estudio de la cantidad y la calidad del agua subterr¨¢nea. En ese sentido, los sistemas de monitorizaci¨®n basados en inteligencia artificial son un aliado fundamental.
Bienvenido, 2023. Esperamos que este nuevo a?o se convierta de verdad en el a?o del agua, que marque un antes y un despu¨¦s en el cuidado de este preciado recurso y sirva para apuntalar su futuro, que es en realidad el de todo el planeta.
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