Ning¨²n candidato en Fago
Cuatro a?os despu¨¦s del asesinato de su alcalde solo se presente su sustituto PSOE y PP no proponen aspirantes para no alterar la convivencia del municipio
En Fago no har¨¢ falta esperar hasta el 22 de mayo para saber qui¨¦n ocupar¨¢ la alcald¨ªa. Enrique Barcos, del Partido Aragon¨¦s (Par), es el ¨²nico candidato que se presenta. La inc¨®gnita reside en saber cu¨¢ntos de los 26 vecinos censados le apoyan.
Barcos repetir¨¢ el cargo que ocup¨® el 15 de febrero de 2007, cuando sustituy¨® a Miguel Grima, el alcalde asesinado el 12 de enero de ese a?o cuando volv¨ªa de una reuni¨®n comarcal en Jaca. Entonces Barcos se presentaba por el PP y cont¨® con 16 votos a favor y ninguno en contra. El sector minoritario estudi¨®, en su momento, impugnar la votaci¨®n.
Hoy el mismo candidato acude bajo otras siglas y el clima de desuni¨®n que se viv¨ªa en Fago tras el asesinato de Grima -un suceso que dio la vuelta al mundo- parece aparentemente superado. El hecho es que el resto de los partidos han renunciado a proponer aspirantes en esa localidad. El PSOE ha presentado listas en todos los municipios de Huesca salvo en Fago. Los socialistas oscenses han explicado a este peri¨®dico que no han considerado oportuno presentarse, dadas las circunstancias especiales del pueblo. Desde el PP comentan que los vecinos entendieron prioritario mantener la calma y por ello decidieron renunciar a presentar candidatos que pudieran desestabilizarla.
Lo cierto es que Fago siempre ha sido una localidad tranquila y cuatro a?os despu¨¦s del asesinato que la hizo tristemente c¨¦lebre, esa tranquilidad ha regresado a sus casas empedradas. Pero la calma que se respira entre sus calles silenciosas y vac¨ªas es tensa. El propio aspirante se ha negado a hablar con EL PA?S. Barcos no concede entrevistas. Es consciente de que el pueblo y el puesto que ocupa suscita morbo y teme alterar con sus palabras la convivencia que ha logrado recomponer en estos a?os al frente del pueblo. Jos¨¦ Mar¨ªa Abarca, compa?ero de partido y candidato a la alcald¨ªa de Jaca, se ha erigido en su portavoz. "Parece que hay un acuerdo t¨¢cito en el pueblo y los vecinos han considerado que es el candidato adecuado para seguir con la actuaci¨®n al frente del Ayuntamiento". Abarca explica al otro lado del tel¨¦fono, que su compa?ero ha logrado normalizar el clima de divisi¨®n que hab¨ªa en el municipio tras la muerte de Grima y que adem¨¢s cuenta con un apoyo importante por parte de sus vecinos.
Adolfo Navarro Gast¨®n, de 80 a?os, fue alcalde de Fago entre 1987 y 1991 por Alianza Popular. Aunque ahora reside en Jaca suele ir a menudo a su pueblo y explica que es la primera vez que solo se presenta un candidato. "Antes siempre hab¨ªa alguien por el PSOE". Cree que es normal que no haya m¨¢s vecinos interesados en ocupar la alcald¨ªa. "Somos un sitio peque?o y la gente est¨¢ cansada de las mentiras de los pol¨ªticos, adem¨¢s aqu¨ª no se vota a las siglas sino a la persona. Si la conoces y ves que no es mala pues las votas". Navarro, no obstante, se atreve a mencionar el motivo real por el que no hay m¨¢s aspirantes y que Fago y los grupos pol¨ªticos se esfuerzan por eludir: la desconfianza que existe entre los vecinos. "Lo que ocurri¨® aqu¨ª, en un lugar tan peque?o es muy dif¨ªcil de olvidar. Todos creen que adem¨¢s del que est¨¢ en la c¨¢rcel [Santiago Mainar] hab¨ªa m¨¢s implicados. Hay recelos y el pueblo est¨¢ dividido. Pasar¨¢ mucho tiempo hasta que esto se supere".
De momento, a los escasos habitantes que viven continuamente en Fago, casi todos mayores, "les parece muy bien" que se presente Barcos y no ven problema en que no haya otras alternativas. A Navarro tambi¨¦n le gusta el actual alcalde: "Ha hecho muchas reformas en este tiempo. Teniendo en cuenta que con la crisis no le han dado casi dinero, ha realizado muchas cosas y eso que Fago no es de los pueblos m¨¢s necesitados".
Fago vive rodeado de silencio y monta?as. ?nicamente las esquilas de las ovejas rompen el sosiego. Las elecciones del pr¨®ximo d¨ªa 22 tampoco parece que vayan a resquebrajar la calma que tanto le ha costado recuperar.
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