Cerco al dispendio auton¨®mico

?Es l¨®gico que Catalu?a tenga una embajada en Berl¨ªn?, ?resulta viable mantener 12 tribunales de cuentas?, ?tiene sentido gastar 32 millones de euros a financiar informes como La chufa y el murci¨¦lago rana?, ?vale la pena inaugurar un aeropuerto sin aviones?

M¨¢s de la mitad de las autonom¨ªas (9) registraron hasta marzo un d¨¦ficit por encima del previsto (0,46% PIB). La exigencia de apretarse el cintur¨®n ha situado bajo la lupa el gasto de las comunidades. ¡°No sobran enfermeras, m¨¦dicos, bomberos ni maestros, sino asesores¡±, dice Miguel C¨®rdoba, profesor agregado de Econom¨ªa Financiera. Pero el alcance de la tijera es limitado. Javier Tajadura, profesor de Derecho Constitucional del Pa¨ªs Vasco, fija las l¨ªneas rojas en la sanidad y la educaci¨®n. ¡°Deben reducirse lo menos posible¡±, dice. Tajadura ha coordinado un informe para racionalizar el gasto auton¨®mico, que se ha disparado un 90% en los ¨²ltimos tres a?os y medio. El documento, sufragado por la Fundaci¨®n Ciudadan¨ªa y Valores, sugiere las siguientes medidas.

?Es l¨®gico que Catalu?a tenga una embajada en Berl¨ªn??

Fin a los organismos duplicados. Acabar con los Consejos consultivos, tribunales de cuentas, consejos econ¨®micos e institutos de toda tipo con r¨¦plica estatal. Su puesta en marcha reducir¨ªa el gasto y, en algunos casos, aumentar¨ªa la eficacia. ¡°Hay instituciones, como los tribunales regionales de cuentas, que cuanto m¨¢s lejos se sit¨²en de lo que fiscalizan, m¨¢s independientes son¡±, dice Tajadura. El l¨ªder del PP, Mariano Rajoy, ha sugerido la medida, pero sin concretar su aplicaci¨®n.

Se acab¨® el pol¨ªtico profesional. Fomentar la compatibilidad del diputado auton¨®mico y provincial. Adelgazar el n¨²mero de esca?os y el aparato burocr¨¢tico que conllevan. Su puesta en marcha exigir¨ªa un pacto pol¨ªtico entre PP y PSOE para modificar los estatutos de autonom¨ªa.

Menos ayuntamientos. El 80% de los 8.112 municipios de Espa?a tienen menos de 5.000 habitantes. ?Son necesarios? A juicio del informe, no. Se podr¨ªan quedar en 2.000. Las corporaciones locales, cuyas competencias urban¨ªsticas han desatado un torrente de casos de corrupci¨®n en la ¨²ltima d¨¦cada, deber¨ªan aglutinar a m¨¢s de 10.000 habitantes. La idea se inspira en Grecia, que tras la crisis de deuda pas¨® en 2010 de 1.034 a 355 ayuntamientos. El pa¨ªs heleno ahorrar¨¢ con la medida 1.185 millones al a?o.

Adelgazar las Diputaciones. Sus competencias se solapan con los ayuntamientos, seg¨²n el informe. Su coste de personal oscila entre el 32% y 40%.

Privatizar las teles auton¨®micas. Las trece cadenas regionales que operan en Espa?a generan 2.000 millones de gasto. La calidad de sus programaciones es irregular. Algunas como Canal 9, con 1.800 trabajadores (m¨¢s que Antena 3 y Telecinco juntas) han inspirado tesis doctorales sobre manipulaci¨®n informativa. Defensores de la privatizaci¨®n, como la presidenta madrile?a, Esperanza Aguirre, han concitado las cr¨ªticas de la oposici¨®n socialista, que acusa a los conservadores de favorecer el hundimiento de Telemadrid para saldarla entre amigos.

?El ¡®abc¡¯ del buen gestor

Entre una mala y una buena gesti¨®n hay hasta un 25% de ahorro. Jose Antonio Pel¨¢ez, socio responsable del sector p¨²blico de la consultora PricewaterhouseCoopers, resume en cuatro recetas las medidas para adelgazar las cuentas p¨²blicas:

Gesti¨®n eficiente de los proveedores. Revisar los contratos y la deuda a largo plazo. La crisis exige apretarse el cintur¨®n. ?Y las facturas en los cajones? Si existen, pagarlas.

Extender las centrales de compras: S¨®lo existen en el Pa¨ªs Vasco y prev¨¦n implantarse en la Comunidad de Madrid. La idea de reducir el precio comprando grandes cantidades es antigua, pero su aplicaci¨®n no tanto. Roma redujo su gasto p¨²blico con esta iniciativa. En Espa?a, la mayor¨ªa la mayor¨ªa de los hospitales p¨²blicos negocian directamente con sus proveedores.

Gobierno transparente. Internet permite la administraci¨®n de cristal: conocer en tiempo real la evoluci¨®n de un concurso p¨²blico, el importe de un contrato e, incluso, implantar los presupuestos participativos. El movimiento Open Goverment, popularizado por la administraci¨®n de Barack Obama, detect¨® la necesidad y el 15-M lo reclama en sus reivindicaciones. ¡°Los acampados tienen raz¨®n¡±, admite Pel¨¢ez.