Un empleado de Milano declara que Crespo pag¨® los trajes a Camps y Costa
Su ropa se agrupaba en la misma cuenta que la de El Bigotes, afirma la cajera
V¨ªctor Sanfelipe, que fue segundo encargado en los establecimientos Milano y Forever Young, ha declarado en el juicio de los trajes que Pablo Crespo, lugarteniente de la trama G¨¹rtel, era quien pagaba las prendas que Francisco Camps y Ricardo Costa encargaban en ambas tiendas. ¡°?lvaro P¨¦rez ten¨ªa abierta una cuenta a su nombre en Milano. All¨ª se apuntaban las prendas que se llevaba ¨¦l y tambi¨¦n las de otras personas, sobre todo de la Comunidad Valenciana: el se?or Camps, el se?or Betoret, el se?or Costa...¡±, ha explicado el testigo. ?Qui¨¦n saldaba esa cuenta?, le ha interrogado la representante de la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n. ¡°Que yo haya visto, lo pagaba siempre Pablo Crespo. Todo lo que se apuntaba en esa cuenta lo pagaba ¨¦l¡±.
Sanfelipe trabaj¨® en Milano hasta mediados de 2006, cuando se fue a Forever Young siguiendo a quien hab¨ªa sido su jefe, el sastre Jos¨¦ Tom¨¢s Garc¨ªa. Y all¨ª se mantuvo el sistema de pago de prendas a los dos acusados por cohecho, ha afirmado. En el verano de 2007, Sanfelipe dej¨® definitivamente de trabajar debido a problemas de salud.
El testigo ha declarado que en Forever Young ¡°solo hab¨ªa un cliente llamado Camps: Francisco Camps¡±. Y que ¡°nuevo cliente Camps¡±, la forma en que aparecen registrados algunos pedidos que constan en la causa, hac¨ªa igualmente referencia al expresidente de la Generalitat.
Las palabras del exencargado, de quien en principio no se esperaba una declaraci¨®n decisiva (avanzada la tarde la sala de vistas estaba casi vac¨ªa), han resultado ser muy favorables para las acusaciones y devastadoras para las defensas. Sanfelipe ha afirmado: ¡°A Camps y Costa nunca les vi pagar. Ni nadie me coment¨® haberlos visto¡±. Y poco despu¨¦s: ¡°Enviamos unos trajes desde Sastgor [la sastrer¨ªa industrial que confeccionaba la ropa para Milano y Forever Young] a Valencia para Francisco Camps¡±.
El expresidente, ha asegurado el testigo, era ¡°muy especial¡± a la hora de confeccionarse los trajes, y por ello en algunas hojas de pedido aparece la anotaci¨®n ¡°Tom¨¢s-Emilio¡±. Para que el responsable de hacer la ropa en Sastgor llamase a Jos¨¦ Tom¨¢s para pedirle instrucciones antes de ponerse manos a la obra.
¡°En Milano solo hab¨ªa un Camps: Francisco Camps¡±, sostiene el encargado
Sanfelipe ha ofrecido explicaciones a algunos de los peque?os misterios de la causa. Ha indicado que en algunas de las hojas de encargo de los establecimientos a Sastgor no aparecen las medidas del expresidente porque la f¨¢brica ya ten¨ªa el patr¨®n de Camps. Y que a eso se refieren las anotaciones ¡°Modelo Camps¡± que figuran en esos documentos.
Mucho menos clara que la declaraci¨®n de Sanfelipe, pero complementaria con la misma, ha resultado la comparecencia de Elena Rodr¨ªguez, que fue cajera de Milano en los a?os en que presuntamente el expresidente y Costa cometieron el delito de cohecho.
Rodr¨ªguez ha confirmado tras examinar tiques de compra que en enero de 2006, meses antes del momento en que Camps sostiene que hizo el primer encargo en Milano, en la tienda ya exist¨ªan dos ventas a su nombre y que no fueron pagadas en el momento. Lo mismo ocurri¨® con Costa, ha concluido, en este caso por tres trajes a 800 euros cada uno.
Cuando Milano hizo inventario en verano, las compras segu¨ªan sin estar pagadas, pero hab¨ªan sido agrupadas en una cuenta que bajo el ep¨ªgrafe de Comunidad Valenciana inclu¨ªa el n¨²mero de tiques de Camps, Costa, Pedro Garc¨ªa (exdirector de Canal 9, ¨ªntimo amigo de los cabecillas de la trama e imputado en la principal rama del caso G¨¹rtel), Rafael Betoret, V¨ªctor Campos y el propio ?lvaro P¨¦rez, El Bigotes.
La cuenta fue saldada en septiembre de 2006 y no en efectivo, como ha afirmado el expresidente de la Generalitat que siempre paga las cosas. Su deuda (de 3.300 euros) y la del resto de cargos valencianos fue saldada con dos talones, ha indicado la cajera. Esa era, seg¨²n Anticorrupci¨®n, una de las formas en las que Pablo Crespo sol¨ªa pagarles la ropa.
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