Guindos fija como objetivo n¨²mero uno la creaci¨®n de empleo
El ministro de Econom¨ªa tendr¨¢ que decidir si apoya un banco malo que aglutine los activos t¨®xicos
El acto comenz¨® con casi un cuarto de hora de retraso. La peque?a sala que el Ministerio de Econom¨ªa destina a estos actos estaba a rebosar y los asistentes apenas pod¨ªan escuchar al nuevo ministro, que curiosamente tendr¨¢ su sede en la plaza de Cuzco y no en el viejo Palacio de Aduanas de la calle de Alcal¨¢. Pero el nuevo ministro de Econom¨ªa y Competitividad, Luis de Guindos, que ya parece un viejo zorro en esto de los mensajes, hizo un discurso breve con las ideas fuerza bien claras, suficientes para que la prensa las enviara de inmediato a sus p¨¢ginas web. ¡°Hay que recuperar la senda del crecimiento y la generaci¨®n de empleo y prosperidad que nunca debimos haber dejado¡±. ¡°Es el objetivo n¨²mero uno del Gobierno¡±. De Guindos, que recibi¨® tres carteras (Econom¨ªa, Comercio y Ciencia y Tecnolog¨ªa) de tres ministros salientes: Elena Salgado, Miguel Sebasti¨¢n y Cristina Garmendia, se estren¨® con un discurso conciliador en el que recalc¨® el esp¨ªritu de di¨¢logo. Por eso quiere reunirse las veces que haga falta con Salgado, de la que reconoci¨® su labor y dijo que ¡°siempre ha sabido estar a la altura de las circunstancias y le ha tocado bailar con el m¨¢s feo¡±. ¡°Ahora nos toca a nosotros¡±, remach¨®, mirando a Montoro, ministro de Hacienda; F¨¢tima B¨¢?ez, ministra de Empleo, y Miguel Arias Ca?ete, de Agricultura, all¨ª presentes.
Y lo que les toca es abordar de forma urgente medidas en pol¨ªtica econ¨®mica, el campo laboral y en el sistema financiero. ¡°Ah¨ª tenemos un problema¡±, afirm¨® despu¨¦s de sostener que ¡°vivimos un momento de crisis m¨²ltiples¡±. Asegur¨® estar ¡°tranquilo¡± porque ¡°en los momentos clave este pa¨ªs ha tomado siempre decisiones correctas¡± y falta le va a hacer.
No era balad¨ª que tanto Montoro como B¨¢?ez se saltaran el horario de sus tomas de posesi¨®n para ir los tres de la mano. A De Guindos le toca centrarse m¨¢s en las pol¨ªticas de expansi¨®n, productividad, confianza a los inversores, ampliaci¨®n de los mercados internacionales y viajar a Bruselas; a B¨¢?ez, negociar con sindicatos y patronal la reforma laboral, y a Montoro, la pol¨ªtica de recortes (reducir el d¨¦ficit y ordenar los territorios), pese a que en su discurso asegur¨® que su pol¨ªtica no ser¨¢ de recortes, sino de reformas.
Diga lo que diga, recortes los habr¨¢ para acompa?ar las pol¨ªticas activas y poner en marcha reformas estructurales. Precisamente, Montoro recalc¨® al hablar de la necesaria reforma del Estado. ¡°Estamos aqu¨ª para trabajar por Espa?a, para decir que vamos a trabajar para que esta crisis econ¨®mica acabe pronto con el esfuerzo de todos¡±, dijo al recibir la cartera de Salgado y Manuel Chaves, de Pol¨ªtica Territorial y Administraciones P¨²blicas.
Montoro tambi¨¦n asegur¨® que el Estado de las Autonom¨ªas ¡°puede y debe mejorarse¡± y, como principal responsable de todos los funcionarios, les hizo un gui?o ¡ªal igual que hab¨ªa hecho antes De Guindos¡ª pidi¨¦ndoles trabajar con eficacia y ¡°que sirvan de trampol¨ªn para recuperar el crecimiento y la creaci¨®n de empleo¡±. Pero no habl¨® de los posibles ajustes que ha planeado sobre este colectivo en las ¨²ltimas semanas, lo que no augura nada halag¨¹e?o.
Ese es el plato fuerte, m¨¢s inmediato, que el nuevo Ejecutivo considera inevitable y en el que prima ¡°la estabilidad en el empleo, la flexibilidad interna en las empresas y la formaci¨®n como un derecho individual del trabajador¡±, en palabras de la nueva titular de Empleo, F¨¢tima B¨¢?ez. Pero eso lleva, aunque no lo dijo, a la recomposici¨®n de la Negociaci¨®n Colectiva y la introducci¨®n de nuevas modalidades de contrataci¨®n. Rajoy puso plazo para alcanzar un acuerdo en enero. Si lo no hay, y las exigencias para aventurar que sindicatos y patronal pacten son muy duras, habr¨¢ decreto.
De Guindos ya tiene experiencia de un intento parecido en 2002, bajo el mandato de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y con ¨¦l como impulsor, siendo secretario de Estado de Econom¨ªa, con el fracasado decretazo. Para ocupar la secretar¨ªa de Estado de Seguridad Social se perfila Tom¨¢s Burgos, responsable del PP en la Comisi¨®n del Pacto de Toledo y diputado por Valladolid. Mientras, B¨¢?ez se planteaba el nombre de Juan Jos¨¦ G¨¹emes, exconsejero de Empleo y de Sanidad de Madrid, para ocupar la Secretar¨ªa de Estado de Empleo. En Administraciones P¨²blicas el nuevo secretario de Estado ser¨¢ Antonio Beteta, actual consejero de Transportes de la Comunidad de Madrid.
Otro reto inmediato para el nuevo peso pesado de Econom¨ªa consiste en la culminaci¨®n de la restructuraci¨®n del sistema financiero que permita recuperar la fluidez de cr¨¦ditos. De Guindos tiene muy claro que ¡°hay que recapitalizar y sanear las entidades en el primer trimestre del pr¨®ximo a?o para evitar que el colapso financiero castigue m¨¢s a la econom¨ªa espa?ola¡±, seg¨²n manifestaciones recientes. En ese sentido, se espera una nueva ola de fusiones para el primer semestre, lo que permitir¨ªa a las entidades alcanzar mayor tama?o y, por tanto, m¨¢s capital para poder abordar esa tarea.
Pero, adem¨¢s, debe decidir si apoya la constituci¨®n de un banco malo, que aglutine los activos t¨®xicos de las entidades financieras ¡ªprincipalmente todo el ladrillo acumulado en los a?os del boom¡ª y sobre el que se mostr¨® partidario no hace muchas fechas, quiz¨¢ por conocer bien el mundo de las cajas de ahorros (hasta ayer era consejero de Banco Mare Nostrum). Ahora tendr¨¢ que desvelar si lo promueve, tal como propone su antiguo jefe en Econom¨ªa, Rodrigo Rato, o lo deja correr, como piden los banqueros Emilio Bot¨ªn (Santander) y Francisco Gonz¨¢lez (BBVA) y era proclive el propio Rajoy.
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