El Supremo investigar¨¢ a Blanco por los supuestos sobornos de Dorribo
Cree ¡°necesario¡± abrir el caso al ver indicios de cohecho y tr¨¢fico de influencias
Era una decisi¨®n esperada, aunque no por ello menos trascendente. La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo acept¨® ayer los argumentos de la fiscal¨ªa y asumi¨® la investigaci¨®n contra el exministro de Fomento Jos¨¦ Blanco por su supuesta implicaci¨®n en el caso Campe¨®n, la supuesta trama empresarial de fraude de subvenciones p¨²blicas que instruye el juzgado n¨²mero 3 de Lugo. El magistrado Jos¨¦ Ram¨®n Soriano ser¨¢ el encargado de investigar la parte del caso que afecta al exministro, que sigue siendo aforado al haber sido reelegido como diputado. Soriano tendr¨¢ que esclarecer si son ciertas las acusaciones contra Blanco del empresario farmac¨¦utico Jorge Dorribo, que asegur¨® haberle pagado a cambio de gestiones para obtener una subvenci¨®n del Ministerio de Econom¨ªa.
La resoluci¨®n, firmada por los magistrados Juan Saavedra (presidente), Juli¨¢n S¨¢nchez Melgar (ponente), Perfecto Andr¨¦s Ib¨¢?ez, Miguel Colmenero y Francisco Monterde afirma que la exposici¨®n razonada por la que la juez de Lugo Estela San Jos¨¦ envi¨® el caso al Supremo relata ¡°indicios correspondientes a los presuntos delitos de cohecho y de tr¨¢fico de influencias que confluyen en el comportamiento del aforado¡±, es decir, Blanco. El auto sugiere que algunos de los aspectos de las declaraciones del empresario est¨¢n respaldados por correos electr¨®nicos, facturas, transferencias, intervenciones telef¨®nicas y mensajes de m¨®vil. Todo ese material permitir¨ªa inferir ¡°indiciariamente¡± una serie de entregas de dinero a Blanco realizadas presuntamente a trav¨¦s de su primo pol¨ªtico y tambi¨¦n empresario Manuel Bran.
La Sala admite que la investigaci¨®n es todav¨ªa ¡°incipiente¡±, pero se apoya en el escrito del fiscal, que pidi¨® que el Supremo asumiera la competencia en lo que afecta al exministro porque la indagaci¨®n ¡°necesariamente debe llevarse a cabo¡±.
La exposici¨®n razonada enviada el pasado 31 de octubre por la juez San Jos¨¦ al Supremo recoge tres declaraciones contradictorias de Dorribo. En la primera de ellas asegura que entreg¨® en Andorra m¨¢s de 40.000 euros a Jos¨¦ Antonio Orozco, socio de la asesor¨ªa Proitec, que supuestamente iban destinados a Blanco a cambio de su intermediaci¨®n con el Ministerio de Sanidad para agilizar una autorizaci¨®n para que su empresa, Laboratorios Nupel, pudiera comercializar medicamentos en formato unidosis. Esa autorizaci¨®n nunca fue concedida por el ministerio.
En esa primera declaraci¨®n, Dorribo tambi¨¦n habla de un encuentro con Blanco, en una gasolinera de Guitiriz (Lugo) el 5 de febrero de 2011, gestionado por su primo pol¨ªtico Manuel Bran. La existencia de esa reuni¨®n ¡ªque se produjo presuntamente en el mismo coche oficial de Blanco¡ª quedar¨ªa acreditada por una llamada entre Bran y el empresario farmac¨¦utico realizada a las 9.57 de ese d¨ªa para concertar esa cita.
La segunda declaraci¨®n del empresario contradice a la primera. En ella, Dorribo dice que ese supuesto pago de m¨¢s de 40.000 euros realizado en Andorra fue en realidad de 90.000, y que se hizo a trav¨¦s de una sociedad denominada Salut d¡¯Innovaci¨®. En esa comparecencia tambi¨¦n asegura que media hora antes de que llegara Blanco a la gasolinera de Guitiriz, qued¨® all¨ª mismo con Bran, al que le entreg¨® otros 200.000 euros para el exministro. El objetivo de esa entrega, seg¨²n Dorribo, era ¡°agilizar los tr¨¢mites en el Ministerio de Sanidad y la subvenci¨®n del Ministerio de Econom¨ªa¡±.
La juez de Lugo tambi¨¦n encuentra indicios de tr¨¢fico de influencias en la supuesta ayuda de Jos¨¦ Blanco a Jos¨¦ Antonio Orozco mediante gestiones con el Ayuntamiento de Sant Boi de Llobregat (Barcelona) para que su empresa, Azkar, pudiera construir una nave en el aeropuerto de esa localidad. Esos indicios aparecen en las llamadas y SMS intervenidos a Orozco. En total, las comunicaciones grabadas entre Orozco y el exministro son 14. En una de esas llamadas, Blanco pregunta al empresario si el alcalde de Sant Boi ¡°es de los suyos¡±.
El C¨®digo Penal castiga el cohecho con penas de prisi¨®n de tres a seis a?os. El tr¨¢fico de influencias conlleva una sanci¨®n de seis meses a dos a?os de c¨¢rcel.
Blanco niega la mayor
El vicesecretario general del PSOE, Jos¨¦ Blanco, volvi¨® ayer a rechazar las acusaciones del empresario farmac¨¦utico Jorge Dorribo, pero no cuestion¨® la decisi¨®n del Tribunal Supremo de aceptar la competencia para investigarle. En una conversaci¨®n con este peri¨®dico, el n¨²mero dos del PSOE y ministro de Fomento hasta la semana pasada, asegur¨® que respeta la decisi¨®n de la Sala de lo Penal.
Blanco asegura que esperaba esa decisi¨®n tras conocer el informe de la fiscal¨ªa, que calificaba de ¡°necesaria¡± la apertura de una investigaci¨®n en el alto tribunal. Pero al mismo tiempo el exministro calific¨® de ¡°falsas¡± las acusaciones contra su persona y mostr¨® esperanza de que la causa abierta ahora contra ¨¦l permita que ¡°prevalezca la verdad¡±.
Desde el PP, sin embargo, su portavoz en el Congreso, Antonio Alonso, afirm¨® que el futuro procesal del exministro ¡°es cada d¨ªa m¨¢s oscuro¡± y le record¨® que la justicia ¡°es inexorable e igual para todos¡±. Alonso anim¨® a Blanco a decidir ¡°cu¨¢l es la posici¨®n m¨¢s razonable para ejercer su defensa y dar explicaciones a los ciudadanos¡±. ¡°Se neg¨® a comparecer en el Congreso, pero ahora tendr¨¢ que comparecer en los tribunales. La justicia sigue su camino¡±, a?adi¨®. M¨¢s all¨¢ fue el n¨²mero dos de UPyD, Carlos Mart¨ªnez Gorriar¨¢n, que reclam¨® directamente su dimisi¨®n como diputado.
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