Rearme ideol¨®gico
P¨¦rez Rubalcaba gana la secretar¨ªa general del PSOE con una oferta de liderazgo fuerte
Alfredo P¨¦rez Rubalcaba gan¨® ayer la secretar¨ªa general del PSOE con un programa de rearme ideol¨®gico de su partido, present¨¢ndose como ¡°un l¨ªder fuerte¡± y reivindicando la soberan¨ªa de la pol¨ªtica frente al acoso de los especuladores econ¨®micos. Mientras Carme Chac¨®n pretend¨ªa quemar etapas ¡ª¡°yo no vengo aqu¨ª a gestionar la traves¨ªa del desierto¡±¡ª, Rubalcaba se apoy¨® en las se?as de identidad representadas por los Gobiernos de Felipe Gonz¨¢lez y de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, us¨¢ndolas como palancas desde las que reconstruir un partido que trabaje tanto para los excluidos como para las clases medias, y que se mantenga como una organizaci¨®n federal, sin aceptar la deriva hacia una ¡°confederaci¨®n de partidos¡±. Completado con el anuncio de una conferencia de organizaci¨®n antes del verano, el proyecto mereci¨® el respaldo de la mayor¨ªa de los delegados al 38? Congreso de un partido traumatizado por las derrotas electorales.
Tras haber contribuido decisivamente al fin de la violencia etarra, Rubalcaba emprende ahora un nuevo combate a los 60 a?os. ¡°A m¨ª no me van a quebrar¡±, asegur¨® el nuevo secretario general del PSOE, que dedic¨® una parte esencial de su discurso al ¡°ajuste ideol¨®gico¡± emprendido por la derecha desde el poder. Hasta ahora, dos fuerzas pol¨ªticas se hab¨ªan alternado en los niveles auton¨®mico y estatal, ofreciendo ese aspecto bipartidista que ¡ªcon importantes excepciones en Catalu?a, Pa¨ªs Vasco o Canarias¡ª caracterizaba el sistema pol¨ªtico espa?ol. Pero la hegemon¨ªa del PP es ahora tan grande que el sistema se ha desequilibrado.
Sin ceder a la tentaci¨®n de radicalizar al partido en los terrenos econ¨®mico y fiscal ¡ªcomo s¨ª apunt¨® Chac¨®n ante los delegados al congreso socialista¡ª, Rubalcaba traz¨® una l¨ªnea roja en la defensa de las libertades y de los derechos c¨ªvicos conquistados a lo largo de 30 a?os de democracia, atribuyendo al PP el proyecto de romper la pol¨ªtica de pactos y compromisos derivada del consenso constitucional. El l¨ªder socialista enardeci¨® al congreso al denunciar la actitud del PP en esos terrenos y anunci¨® su intenci¨®n de revisar ¡°seriamente¡± los acuerdos con la Santa Sede, si desde la derecha se contin¨²a cuestionando los pactos b¨¢sicos de estos 30 a?os. Esos mismos delegados aplaudieron tambi¨¦n las apelaciones de Chac¨®n al laicismo. La insistencia de ambos en estos aspectos anuncia una l¨ªnea de oposici¨®n firme en esta cuesti¨®n y constituye una advertencia a la Iglesia cat¨®lica, generosamente financiada por el erario p¨²blico, lo cual no ha sido obst¨¢culo para dedicarse a interferir claramente en los asuntos pol¨ªticos.
A corto plazo, las elecciones andaluzas y asturianas constituyen los primeros retos de la nueva direcci¨®n que salga hoy del 38? Congreso socialista. El nuevo l¨ªder apel¨® inmediatamente a la unidad. Es un hecho que la mayor¨ªa de los delegados han preferido su proyecto de reforma y cambio seguros a una nueva experiencia de refundaci¨®n como la que ofrec¨ªa Carme Chac¨®n. Rubalcaba no puede ignorar, sin embargo, el estrecho margen de diferencia entre sus partidarios y los de Chac¨®n ¡ª22 votos de distancia a favor del ganador¡ª y el hecho de que esta ¨²ltima era la heredera m¨¢s declarada del expresidente y ex secretario general, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Su derrota se ha producido a pesar de haber contado con apoyos org¨¢nicos importantes en las federaciones m¨¢s numerosas: Andaluc¨ªa, Valencia, Madrid y, desde luego, Catalu?a.
En todo caso, el PSOE ha elegido limpiamente al l¨ªder con el que intentar¨¢ remontar sus derrotas. Su situaci¨®n como partido es sumamente dif¨ªcil. Pero lo que ha mostrado el congreso de ayer es la firme voluntad del PSOE para volver a situarse en la corriente central de la pol¨ªtica espa?ola.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.