Rajoy publicar¨¢ todos los contratos, subvenciones y sueldos p¨²blicos

La Administraci¨®n espa?ola es una de las m¨¢s opacas de los pa¨ªses avanzados. Una opacidad que permite esc¨¢ndalos como el del caso Palma Arena en Baleares, el caso G¨¹rtel en la Comunidad Valenciana y en Madrid o los ERE en Andaluc¨ªa. El Gobierno ha decidido promover una ley para intentar acabar con esa larga tradici¨®n de secretismo sobre c¨®mo se gasta el dinero p¨²blico. Una norma, la ley de transparencia, que ya tienen casi todos los pa¨ªses de nuestro entorno, y que el anterior Gobierno ten¨ªa ultimada pero nunca se anim¨® a aprobar.

El PP la sacar¨¢ adelante y, seg¨²n fuentes gubernamentales que la ultiman en estas horas, contendr¨¢ novedades muy relevantes. El Gobierno, por ejemplo, pondr¨¢ a disposici¨®n de los ciudadanos todos los contratos de la Administraci¨®n General del Estado, hasta el m¨¢s peque?o. Se publicar¨¢ cu¨¢l fue el procedimiento, el importe y el adjudicatario, tambi¨¦n de todas las subvenciones o ayudas p¨²blicas que cada departamento concede y convenios que suscribe.

Cada ministerio y cada direcci¨®n general tendr¨¢n que dar a conocer todos sus contratos, c¨®mo se gasta el dinero, con qu¨¦ organigrama trabaja, y cu¨¢l es el sueldo de su equipo directivo. Estar¨¢n todos en las webs de cada ministerio, pero para unificar y facilitar la consulta, el Gobierno crear¨¢ un portal de la transparencia, inspirado en el que tienen otros pa¨ªses (el de Estados Unidos, data.gov, es especialmente detallado), en el que estar¨¢n de forma accesible y f¨¢cil de consultar todos estos datos.

No todas estas informaciones son ahora secretas, pero la mayor¨ªa se publican de forma farragosa, llegan solo al Congreso, o son pr¨¢cticamente imposibles de consultar. Y muchas de ellas ni siquiera se publican, como es el caso de los sueldos, ya que solo se hace con el de los ministros.

Mariano Rajoy ha incumplido hasta ahora buena parte de sus promesas ¡ªno subir impuestos, no abaratar el despido¡ª pero con la ley de transparencia parece dispuesto a cumplir. De hecho, este asunto es uno de los ejes de sus discursos p¨²blicos. Ma?ana, antes de los 100 d¨ªas de su Gobierno, como prometi¨®, se aprobar¨¢ una norma fundamental para facilitar el control de la labor del Ejecutivo, precisamente en un momento en el que Rajoy, si el PP gana en Andaluc¨ªa el domingo, acumular¨¢ el mayor poder conocido por un partido en la historia de la democracia espa?ola.

La reforma ser¨¢ presentada el viernes por su principal responsable, la vicepresidenta Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa. Ha sido una norma elaborada por su equipo, en especial por Jos¨¦ Luis Ayll¨®n, secretario de Estado de Relaciones con las Cortes y su mano derecha en la oposici¨®n, cuando ella era portavoz parlamentaria.

La ley tendr¨¢ tres patas. Una, la de la publicidad activa, esto es, toda esa informaci¨®n que se va a publicar sin necesidad de que nadie la pida en ese portal de la transparencia. Otra, la del derecho a la informaci¨®n. Se establecer¨¢, como gran novedad y tambi¨¦n de forma similar a otros pa¨ªses [EE UU y Reino Unido la han llamado ley de libre acceso a la informaci¨®n], el derecho a esa informaci¨®n p¨²blica, de manera que las Administraciones estar¨¢n obligadas a contestar cuando un ciudadano reclame un dato del uso de dinero p¨²blico.

Y por ¨²ltimo, la pata del ¡°buen gobierno¡±, donde se incluir¨¢n las sanciones que ya anunci¨® en su d¨ªa Crist¨®bal Montoro ¡ªincluida la inhabilitaci¨®n¡ª para los malos gestores de las cuentas p¨²blicas.

La ley tardar¨¢ meses en entrar en vigor. Antes se abrir¨¢, durante 15 d¨ªas, un novedoso proceso de consulta p¨²blica electr¨®nica, en el que los ciudadanos ¡ªhay varias asociaciones muy interesadas¡ª podr¨¢n aportar sugerencias. Aunque la ley se pretende ambiciosa, no es presumible que se llegue tan lejos como en EE UU, donde por ejemplo se puede consultar qu¨¦ personas han visitado la Casa Blanca ¡ªincluidos representantes de lobbys¡ª, a qu¨¦ hora entraron y salieron.

La ley y el portal se concentran en la Administraci¨®n General del Estado. Sin embargo, la Administraci¨®n auton¨®mica y local, especialmente interesantes porque controlan los datos sobre sanidad, educaci¨®n o servicios sociales, estar¨¢n tambi¨¦n obligadas por esta norma a establecer sus propios mecanismos de transparencia, con lo que es presumible que el proceso de apertura se extienda poco a poco tambi¨¦n a las autonom¨ªas y Ayuntamientos.

En cualquier caso, costar¨¢ cambiar la cultura opaca. Este mi¨¦rcoles fue imposible saber el coste del v¨ªdeo institucional realizado por el Ministerio de Empleo para defender la reforma laboral.