Vuelve el ¡®sudoku¡¯ presupuestario

La lenta cadencia del tr¨¢mite parlamentario pondr¨¢ ma?ana, martes, al Gobierno en un aprieto inoportuno: el pleno del Congreso debatir¨¢ la toma en consideraci¨®n de una reforma del Estatuto de Valencia para fijar un criterio objetivo para las inversiones en esta comunidad. El PP acepta ahora lo que Pedro Solbes llam¨® el sudoku que deb¨ªa cuadrar para repartir inversiones por autonom¨ªas en el Presupuesto.

La reforma fue aprobada hace un a?o en el Parlamento aut¨®nomo cuando gobernaba Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero; iban a celebrarse elecciones auton¨®micas; el PP estaba liderado por Francisco Camps y se explotaba el victimismo frente al Gobierno socialista del Estado. Se aprob¨® una nueva disposici¨®n que asegura que ¡°la inversi¨®n del Estado en la Comunidad Valenciana, excluido el Fondo de Compensaci¨®n Interterritorial, ser¨¢ equivalente al peso de la poblaci¨®n de la autonom¨ªa sobre el conjunto del Estado por un periodo de siete a?os. Con esta finalidad se constituir¨¢ una comisi¨®n integrada por la Administraci¨®n estatal y auton¨®mica¡±. Votaron a favor el PP y el PSOE y el martes se debatir¨¢ en el pleno la toma en consideraci¨®n. Fuentes socialistas y populares aseguran que el momento no puede ser m¨¢s inoportuno, puesto que se tramitan normas como los Presupuestos que limitan y recortan las inversiones con criterios distintos de los territoriales. Gobierna Mariano Rajoy y las comunidades del PP ya tienen dif¨ªcil mantener la tesis del agravio.

Tambi¨¦n es inoportuno porque el Gobierno negocia con CiU el apoyo a los Presupuestos y, precisamente, con exigencias de los nacionalistas catalanes vinculadas a cl¨¢usulas del Estatuto que fijan la f¨®rmula de c¨¢lculo de las inversiones en esa comunidad. CiU exige que el Gobierno de Rajoy admita inversiones por valor de m¨¢s de 900 millones de euros en Catalu?a como consecuencia de acuerdos firmados por Zapatero. La reforma del Estatuto de Valencia contradice tambi¨¦n la tesis del PP en su minucioso recurso contra el de Catalu?a ante el Constitucional. En ese recurso, el PP sosten¨ªa que no era posible condicionar los Presupuestos del Estado al contenido de un Estatuto. Tambi¨¦n contradice su rechazo a la bilateralidad entre el Estado y Catalu?a que se admite ahora en la comisi¨®n que se crea para que Valencia negocie las inversiones en su territorio. En Andaluc¨ªa, el PP cambi¨® su oposici¨®n e incluy¨® una cl¨¢usula que ahora se copia en Valencia. Por eso, el pre¨¢mbulo de la reforma que se vota el martes dice que ¡°el pueblo valenciano aspira leg¨ªtimamente a recibir del Estado el mismo trato que el pueblo catal¨¢n o el andaluz¡±.