Las voces de una tierra que tembl¨®
Escucha las voces de quienes sufrieron el se¨ªsmo, de las v¨ªctimas, de las personas que hace un a?o vieron c¨®mo el mundo se hund¨ªa bajo sus pies, de quienes a¨²n esperan las ayudas. Las voces de Lorca
Clemen Gonz¨¢lez estaba en casa con su madre. Juan Carlos L¨®pez entraba a Lorca conduciendo su coche. Mar¨ªa Josefa L¨®pez se encontraba trabajando en la peluquer¨ªa. Aquel mi¨¦rcoles, 11 de mayo de 2011, iba a ser un d¨ªa como los dem¨¢s. Pero de repente, la tierra tembl¨® y sus vidas cambiaron. Las suyas y las del resto de los habitantes de esta localidad murciana.
El primer terremoto fue a las cinco de la tarde. Dos horas despu¨¦s hubo una r¨¦plica a¨²n m¨¢s fuerte. Entre uno y otro temblor, a Juan Carlos L¨®pez (actualmente presidente de la asociaci¨®n 11 de Mayo. Somos Lorca), le dio tiempo a llegar a casa. ¡°El segundo me pill¨® en la cocina¡±, recuerda. Al salir al descansillo comprob¨® que las zonas comunes estaban muy deterioradas, ¡°con trozos de paredes ca¨ªdos¡±. Ya en la calle, el p¨¢nico se hab¨ªa apoderado de sus vecinos. ¡°Yo lo comparo con las primeras im¨¢genes, con perd¨®n de la comparaci¨®n, que sal¨ªan cuando los atentados del 11-S. La cara de la gente era muy similar¡±, afirma.
A¨²n hay gente pendiente de recibir una cobertura de sus necesidades¡± Aurelino Luna, Cruz Roja
Esa misma sensaci¨®n le ha quedado a Clemen Gonz¨¢lez. Esta agente de la Polic¨ªa Local tambi¨¦n abandon¨® su casa al producirse el primer se¨ªsmo. ¡°Llam¨¦ a mis hijos, a mi padre, y cuando vi que estaban todos bien, aunque estaba en el turno de noche, pens¨¦ que ten¨ªa que ir a trabajar¡±. Fue as¨ª como el segundo la sorprendi¨® en la comisar¨ªa. Entonces, corri¨® hacia una de las calles m¨¢s afectadas. Clemen Gonz¨¢lez intent¨® ayudar a los heridos, consolar a los familiares y amigos de los fallecidos y desalojar la zona. ¡°Aparte de que estaban cayendo escombros, ladrillos y cascotes, el peligro era que las tuber¨ªas de gas se hab¨ªan roto¡±. En 30 a?os de servicio, esta agente no hab¨ªa vivido una tragedia parecida.
¡°El momento m¨¢s duro fueron las primeras cuatro horas. Empezaba a constituirse el dispositivo de ayuda y era muy dif¨ªcil transmitir de forma clara d¨®nde se encontraban los recursos¡±. Es el recuerdo de Aurelino Luna, presidente de Cruz Roja en Murcia. Ese d¨ªa estaba en Zaragoza, de donde sali¨® hacia Lorca en cuanto supo lo que hab¨ªa ocurrido. Cruz Roja trabaj¨® intensamente en los campamentos que se levantaron para acoger a la gente que se hab¨ªa quedado sin casa y no ten¨ªa d¨®nde alojarse. El ¨²ltimo estuvo operativo hasta septiembre.
Aunque ya no haya campamentos, las ayudas de organizaciones como Cruz Roja y C¨¢ritas contin¨²an. ¡°Hay gente que todav¨ªa est¨¢ pendiente de recibir una cobertura de sus necesidades¡±, reconoce Aurelino Luna. Explica que ellos tienen programas de ayudas al alquiler, donaci¨®n de libros a ni?os, apoyo a personas mayores con dificultades para llevar a cabo los tr¨¢mites necesarios, e incluso siguen colaborando en los planes de retorno de aquellos inmigrantes que quieren regresar a sus pa¨ªses.
Entre esas ayudas que ofrece la organizaci¨®n est¨¢ el reparto de alimentos. Una de sus beneficiarias es Mar¨ªa Josefa L¨®pez. La tragedia dej¨® nueve fallecidos y unos 300 heridos y ella fue una de las heridas m¨¢s graves. Le cay¨® encima un trozo de cornisa de 19 metros y le aplast¨® la pierna derecha. Tuvieron que amput¨¢rsela desde la rodilla. Ella, de 37 a?os, su marido y sus dos hijos, de cuatro y nueve a?os, viven con los 900 euros que esta peluquera percibe al estar de baja. ?l tuvo que dejar de trabajar para cuidarla y ocuparse de los ni?os. Pese a estas circunstancias, su voz suena animada durante la entrevista telef¨®nica. Da gracias por haberse ¡°quedado aqu¨ª¡±.
Mar¨ªa Josefa L¨®pez tambi¨¦n ha conseguido ayuda de la Mesa Solidaria para poder colocar un ascensor en el edificio en el que vive. Esa mesa est¨¢ formada por partidos, asociaciones y ciudadanos de Lorca, y se ocupa de recoger donativos y distribuirlos entre los afectados. Hasta ahora, seg¨²n el Ayuntamiento, ha repartido unos 2,5 millones de euros.
A Diego Re Mu?oz le ha ayudado igualmente la Mesa Solidaria, en su caso, a pagar el alquiler. Viv¨ªa en San Fernando, uno de los barrios m¨¢s azotados por los terremotos, y su casa fue una de las que hubo que derribar. Desde entonces est¨¢ de inquilino en un estudio de unos 35 metros cuadrados en el que vive solo. ¡°Creo que estar¨¦ de alquiler otros tres a?os. Todav¨ªa no hemos empezado a construir¡±, lamenta.
Y es que la reconstrucci¨®n de Lorca est¨¢ siendo muy lenta. Jos¨¦ Miguel S¨¢nchez es presidente de la comunidad del primer inmueble de viviendas que va a empezar a levantarse, situado en la calle de la Benem¨¦rita. ¡°En 15 o 20 d¨ªas empezar¨¢n las m¨¢quinas a quitar lo que queda de estructura y comenzar¨¢n a construir¡±, se?ala.
?l no es vecino de Lorca. Ten¨ªa su piso alquilado a una familia a la que se ha comprometido a readmitir cuando el edificio est¨¦ nuevamente en pie, ¡°dentro de unos diez meses¡±. Se queja de que al tratarse de su segunda residencia no va a recibir ninguna ayuda: ¡°Se dan ayudas en caso de primera residencia, tanto si se ten¨ªa seguro como si no. Yo pago todos mis impuestos pero no voy a recibir ning¨²n tipo de ayuda si me falta dinero. El Consorcio de Seguros me ha dado 74.000 euros, pero si yo no hubiese tenido p¨®liza no me corresponder¨ªa nada¡±.
Aparte de lo aportado por las ONG mencionadas, el Consorcio de Seguros y la Mesa Solidaria, los lorquinos se quejan de que las ayudas no est¨¢n llegando. El alcalde de la localidad, Francisco J¨®dar (PP), conf¨ªa en que el nuevo real decreto ley aprobado por el Gobierno de Mariano Rajoy acelere las cosas. Mientras, colectivos de damnificados se manifestaron este jueves para denunciar esa falta de ayudas y la par¨¢lisis del proceso de reconstrucci¨®n un a?o despu¨¦s de la cat¨¢strofe.
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