Huelga de hambre y dieta taurina

Del m¨¢ximo beneficio al m¨ªnimo impacto. As¨ª se podr¨ªa definir el camino recorrido desde que el jefe del comando Madrid de ETA, I?aki de Juana Chaos, con 25 asesinatos a sus espaldas y una condena de 3.129 a?os de prisi¨®n, realiz¨® en 2007 la huelga de hambre m¨¢s productiva de un terrorista que se conoce, hasta la que estos d¨ªas ha llevado a cabo, con escasa repercusi¨®n y ninguna eficacia, Iosu Uribetxeberria, uno de los carceleros de Ortega Lara y condenado por los asesinatos de tres guardias civiles, que reclama la puesta en libertad por motivos humanitarios ya que padece un c¨¢ncer de ri?¨®n con met¨¢stasis en el pulm¨®n y el cerebro, en fase terminal.

El radio de acci¨®n hasta donde afecta la atracci¨®n de un agujero negro se denomina en ciencia el ¡°horizonte de sucesos¡±, algo as¨ª como un umbral de eficacia. Al trasladar ese concepto a la repercusi¨®n que tuvo la fotograf¨ªa de De Juana en el hospital publicada en 2007 por el diario brit¨¢nico The Times, hay que concluir que sus efectos fueron devastadores.

De Juana hab¨ªa realizado una huelga de 63 d¨ªas para reclamar su libertad en agosto y septiembre de 2006, tras haber pasado 18 a?os en prisi¨®n, en un momento en el que ETA hab¨ªa declarado una tregua. Todav¨ªa no se aplicaba la doctrina Parot, por lo que a De Juana, que no hab¨ªa seguido las directrices de la banda de renunciar a los beneficios penitenciarios ¡ªcomo s¨ª hicieron sus compa?eras de comando In¨¦s del R¨ªo o Inmaculada Noble, que siguen en prisi¨®n¡ª, le correspond¨ªa su excarcelaci¨®n. Sin embargo, el terrorista fue condenado de nuevo a 12 a?os ¡ªque el Supremo redujo luego a tres¡ª por unas cartas que la Audiencia Nacional consider¨® que constitu¨ªan amenazas terroristas, por lo que volvi¨® a la huelga de hambre.

ETA rompi¨® la tregua con el atentado de la T-4 de Barajas el 30 de diciembre de 2006 y la foto de De Juana en The Times fue publicada en febrero de 2007, mientras el Gobierno aseguraba que la ruptura con la banda era total. El etarra, para el que los jueces ordenaron la alimentaci¨®n forzosa si fuera necesaria, pas¨® del Hospital 12 de Octubre, en Madrid, al Donostia, en San Sebasti¨¢n, junto a su domicilio, donde daba paseos con su novia por los alrededores. El Gobierno de Zapatero le concedi¨® la prisi¨®n atenuada, lo que provoc¨® manifestaciones masivas en las principales ciudades espa?olas convocadas por el PP, y finalmente fue excarcelado el 2 de agosto de 2008, con recibimiento y homenaje en la Parte Vieja de San Sebasti¨¢n.

Ahora, Uribetxeberria ha pretendido hacer lo mismo, forzar la m¨¢quina con una huelga de hambre, auxiliado por la insaciable voracidad reivindicativa de la izquierda abertzale, que cuando ha perdido exige como si fueran los vencedores.

Pero su horizonte de sucesos es m¨ªnimo. El Gobierno del PP no tiene pudor ni complejos a la hora de mantener en prisi¨®n a medio centenar de etarras cuya prisi¨®n fue prorrogada varios a?os por aplicaci¨®n de la doctrina Parot que, seg¨²n el Tribunal de Estrasburgo, vulnera los derechos humanos.

En medio de la crisis econ¨®mica mundial m¨¢s importante desde el crack del a?o 29 del siglo pasado, con 5,5 millones de parados, la prima de riesgo por las nubes, la bolsa por los suelos, unos recortes que son hachazos, los precios de los servicios en alza permanente, igual que los impuestos, y un previsible rescate de la econom¨ªa espa?ola tipo Grecia, la huelga de hambre de Uribetxebarria, parec¨ªa un chiste. El mi¨¦rcoles pasado la abandon¨® para ¡°priorizar su vida¡±. Saldr¨¢ en libertad cuando lo diga el juez porque se est¨¢ muriendo, como en su d¨ªa sali¨® Esteban Esteban Nieto, compa?ero de comando de De Juana. Si los peri¨®dicos le han dedicado algo de espacio en sus p¨¢ginas es porque en agosto no hab¨ªa grandes noticias.

Pero es que ahora, adem¨¢s, Patxi L¨®pez ha adelantado las elecciones vascas, tras la ruptura del acuerdo con el PP.

As¨ª que parece que por solidaridad, varios presos de ETA han abandonado tambi¨¦n la huelga de hambre que realizaban. Aunque para algunos m¨¢s que una huelga de hambre era m¨¢s bien una dieta taurina. S¨ª, como dec¨ªa Acad¨¦mica Palanca, aquella que te la puedes saltar a la torera. Y estos la burlaban comprando comida en el economato.

Lo dicho, del m¨¢ximo beneficio al m¨ªnimo impacto.

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