¡°El concejal se repart¨ªa las comisiones con sus amigos del Ayuntamiento¡±
Nicol¨¢s G. S. detalla los pagos al edil del PP a cambio de obras
Nicol¨¢s G. S. recuerda a¨²n su trabajo en el servicio de drogas del Ayuntamiento de Sabadell. ¡°Los pacientes me dec¨ªan que empezaban casi sin querer y, luego, se enganchaban. Yo no les cre¨ªa, pensaba que lo hac¨ªan por decisi¨®n propia¡±. M¨¢s tarde se dio cuenta de su error, cuando le ocurri¨® algo similar con otro objeto de deseo: ¡°El dinero es como la droga. Si decid¨ª denunciar los chanchullos del Ayuntamiento fue para no volver a caer en la tentaci¨®n¡±.
A lo largo de 2009, Nicol¨¢s hizo de recadero de uno de los principales implicados en la Operaci¨®n Mercurio, de presunta corrupci¨®n urban¨ªstica. Se trata de Jordi Soriano, entonces concejal del PP en el consistorio. ¡°Soriano era la chica m¨¢s guapa del baile, te enamoraba. Le hab¨ªas invitado a nueve cubatas y ni te hab¨ªas dado cuenta¡±, explica para ilustrar el poder de seducci¨®n del hombre al que los investigadores consideran el intermediario entre los empresarios y la c¨²pula del Ayuntamiento.
Unas 40 personas est¨¢n imputadas; entre ellas, el alcalde socialista, Manuel Bustos, y tres de sus concejales. Anticorrupci¨®n investiga si los cargos p¨²blicos recibieron mordidas de hasta 120.000 euros a cambio de adjudicar obras. Nicol¨¢s sostiene que s¨ª. As¨ª lo denunci¨® hace tres a?os ante los Mossos ¡ªese fue el origen de Mercurio¡ª y as¨ª lo vivi¨® en la etapa en la que era, dice, el ¡°perro faldero¡± del exconcejal del PP: ¡°Soriano se repart¨ªa las comisiones de los constructores con sus amigos del Ayuntamiento. Dec¨ªa que el reparto se hac¨ªa a partes iguales¡±.
El arrepentido hizo de recadero del exconcejal del PP, clave en el caso
Nicol¨¢s (que pide no revelar su nombre completo) conoci¨® a Soriano mientras paseaba por la ciudad. Una amiga com¨²n les present¨®. ¡°Tropezamos unas cuantas veces m¨¢s en la Rambla. Sabadell no deja de ser un pueblo grande, aqu¨ª nos conocemos todos. Un d¨ªa me cont¨® que unas empresas estaban haciendo obras y necesitaban tirar unas tierras. Me pregunt¨® si pod¨ªa encontrar un vertedero¡±. No lo logr¨®. Hasta que un empresario local ¡ªque, como ¨¦l, tambi¨¦n est¨¢ imputado¡ª le dio la soluci¨®n: convertir terrenos agr¨ªcolas privados en vertederos mediante una solicitud para ¡°mejorar las fincas¡± del parque agrario de Sabadell. Ese es uno de los proyectos que est¨¢n siendo investigados por el juez.
¡°El movimiento de tierras ha generado much¨ªsimo dinero en Sabadell. El negocio era redondo. Si el constructor era listo, cobraba por dos lados: por vaciar los escombros de una obra y por rellenar con esa tierra los terrenos agr¨ªcolas¡±. Soriano, explica, hac¨ªa valer su influencia para que el ayuntamiento diera los permisos a las empresas afines. Por ese suculento negocio, el exconcejal del PP mantuvo una disputa con Melqu¨ªades Garrido, t¨ªo de Bustos, presidente del gremio local de constructores y tambi¨¦n imputado. ¡°Soriano dec¨ªa que era la pata del alcalde. Yo ve¨ªa que hablaba con ¨¦l por tel¨¦fono a menudo. Tres a?os antes incluso hab¨ªan veraneado juntos en un crucero¡±, explica Nicol¨¢s a EL PA?S.
La relaci¨®n entre Bustos y Soriano es una de las claves del caso. En su declaraci¨®n ante el juez, el alcalde dijo que le conoc¨ªa de los plenos: Soriano era entonces portavoz del grupo municipal. Pese a estar en la oposici¨®n, sin embargo, el PP local dio apoyo a Bustos en los asuntos que m¨¢s pod¨ªan perjudicarle. Ante ese pacto extra?o y no escrito, el partido decidi¨® prescindir de Soriano antes de las municipales de 2011.
En tres a?os, seg¨²n fuentes de la investigaci¨®n, Soriano pudo haberse embolsado cerca de 800.000 euros en comisiones. Si ese dinero se lo quedaba ¨¦l ¡ªcomo sostienen fuentes cercanas a Bustos¡ª o, por el contrario, se repart¨ªa en un ¡°fondo com¨²n¡± entre pol¨ªticos, cargos de confianza y funcionarios es otra de las preguntas clave. El alcalde est¨¢ imputado, entre otros delitos, por tr¨¢fico de influencias y malversaci¨®n de fondos. ¡°Ahora, con el tiempo, creo que Soriano le daba a Bustos lo que quer¨ªa y el resto se lo quedaba. Se usaban mutuamente¡±, a?ade el empresario arrepentido.
Le dije a uno que, si no pagaba 48.000 euros, su tema quedar¨ªa parado
Mientras los movimientos de tierras segu¨ªan su curso, Soriano hizo a Nicol¨¢s una nueva propuesta: ¡°Me dijo que ¨¦l, el alcalde y otras personas de su confianza formaban un grupito que pod¨ªa conseguir adjudicaciones de obras de forma legal. Al principio pensaba que todo aquello era legal. Luego vi que no¡±. Nicol¨¢s se dedicaba entonces a la compraventa de inmuebles, a las peque?as reformas del hogar y al sector del ocio nocturno. Pero cuando Soriano se lo pidi¨®, fue su mano derecha. ¡°Le llevaba los sobres cerrados con el dinero que me daban los empresarios¡±, detalla.
Por las manos de Nicol¨¢s pasaron (sin quedarse) muchos billetes. Seg¨²n su testimonio, los constructores deb¨ªan pagar ¡°una cantidad como anticipo para obtener una adjudicaci¨®n¡±. Afirma que, en algunos casos, los empresarios acabaron obteniendo el premio por el que hab¨ªan pagado. Pero admite que, en otras ocasiones, la cosa se complicaba: ¡°S¨¦ de dos empresarios que pagaron para que les dieran una misma obra¡±. Una vez concluidos los trabajos, a?ade, el empresario deb¨ªa abonar el 3% sobre el importe de adjudicaci¨®n.
Nicol¨¢s sostiene que sabe que se pagaron comisiones en, al menos, dos grandes proyectos: una promoci¨®n de viviendas para personas mayores en el Parc Central y las obras de ampliaci¨®n del cementerio. ¡°Como siempre, el mejor bocado eran los movimientos de tierras¡±. Las obras de mejora del cementerio municipal tambi¨¦n est¨¢n siendo investigadas por el juez. ¡°Soriano dec¨ªa que el alcalde quer¨ªa que esos empresarios, adem¨¢s, patrocinasen al CE Sabadell¡±, el equipo de f¨²tbol de la ciudad, a?ade Nicol¨¢s.
A finales de a?o, las cosas cambiaron: ¡°Por indicaci¨®n de Soriano, le dije a un empresario que, si no llevaba 48.000 euros, su tema quedar¨ªa parado. Aquello ya era chantaje¡±. Adem¨¢s, dice, ¡°me sent¨ªa mal cuando llegaba a casa y miraba a mi familia¡±. Decidi¨® poner fin a ese negocio sucio. Y denunciarlo. Por eso aport¨® decenas de documentos que obraban en su poder (correos electr¨®nicos, expedientes de obras) a Iniciativa per Catalunya Verds y ofreci¨® los detalles a los Mossos. Alguien le dej¨® una nota en su coche. ¡°Me dec¨ªa que por mi renuncia hab¨ªan quedado temas parados y que lo iba a pagar¡±. La polic¨ªa auton¨®mica le ofreci¨® protecci¨®n. La rechaz¨®. ¡°Yo me he metido en esto y me da igual lo que me pase¡±.
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