Con los pies al volante
David Rivas, nacido sin brazos, es el primer conductor en Espa?a que gu¨ªa su veh¨ªculo sin manos
Con sus pies lo controla todo: el volante, las marchas, el acelerador, el freno y las luces. E incluso toca el claxon. Con la misma habilidad que si de manos se tratara. David Rivas (Madrid, 1977) naci¨® sin brazos. Pero con su tenacidad ha allanado el camino a otras personas con la misma discapacidad: es el primer conductor en Espa?a que gu¨ªa su veh¨ªculo solo con sus pies ¡ªen la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT) no recuerdan ning¨²n caso similar¡ª y el primero que dispone de un coche adaptado para esta minusval¨ªa.
¡°El mayor reto¡± de su vida comenz¨® en el verano de 2010, cuando descubri¨® en internet que la autoescuela Irrintzi, en Basauri (Bizkaia), hab¨ªa instalado una nueva tecnolog¨ªa a uno de sus veh¨ªculos para personas con poca movilidad en los brazos. ¡°Habl¨¦ con ellos un martes y el s¨¢bado ya estaba all¨ª para hacer unas pruebas¡±, explica David.
Irrintzi, que desde hace m¨¢s de 30 a?os se dedica a la ense?anza de la conducci¨®n para personas con discapacidades f¨ªsicas, era la ¨²nica autoescuela en Espa?a que dispon¨ªa de un coche con el sistema Space Drive, una tecnolog¨ªa que fabrica la empresa alemana Paravan, y que consiste en la instalaci¨®n de un joystick, a modo de volante, para manejar la direcci¨®n del veh¨ªculo. Cuando los profesores de la autoescuela vieron la habilidad de David con los pies, supieron que podr¨ªa cumplir su reto.
¡°Su discapacidad es m¨¢s espectacular, pero hay otras personas con otras discapacidades incluso m¨¢s dif¨ªciles que tambi¨¦n pueden llegar a conducir con un veh¨ªculo adaptado¡±, explica el director de Irrintzi y profesor de David, Jos¨¦ Mari Andr¨¦s Marticorena.
El veh¨ªculo con el que practic¨® David Rivas era un Ford Mondeo con un joystick instalado y dispositivos en las zonas de los pedales que se activan con los pies, siempre descalzos para que la sensibilidad sea la mayor posible. Las posiciones del cambio autom¨¢tico se accionan con los dedos del pie derecho. El pie izquierdo maneja un pedal que al ser presionado funciona como acelerador o freno. Con otro dispositivo se controlan las luces, los limpiaparabrisas y el claxon.
Examen individual
Pista cerrada
¡°No se dan tratamientos generales para personas con la misma lesi¨®n, sino que se mira caso por caso¡±, aseguran fuentes de Tr¨¢fico. Los ex¨¢menes de conducir para personas con una discapacidad son individualizados, con el objetivo, seg¨²n la DGT, de que ¡°a toda persona que se le concede el permiso de conducir lo haga en las m¨¢ximas condiciones de seguridad¡±.
El de David Rivas, el primer conductor en Espa?a que obtiene el carn¨¦ manejando su coche con los pies, es el m¨¢s ¡°complicado¡± que hasta ahora se le ha presentado a la DGT, seg¨²n admite el jefe de Tr¨¢fico de Bizkaia, Adolfo Pe?aranda. Pero, seg¨²n subraya, nunca hay dos situaciones iguales: ¡°Si otra persona que no tiene brazos quiere obtener el permiso, hay que comprobar si tiene suficiente fuerza y habilidad en los pies¡±.
Seg¨²n Adolfo Pe?aranda, el primer paso que una persona con una discapacidad debe seguir para conseguir su carn¨¦ es pasar un examen psicof¨ªsico en un centro m¨¦dico especializado en reconocimiento de conductores, que debe emitir un informe ¡°muy detallado¡± con las discapacidades del aspirante y las adaptaciones que suplen esa discapacidad. A continuaci¨®n, el candidato debe acudir a una autoescuela especializada, que gestionar¨¢ el proceso de examen.
Una vez aprobado el examen te¨®rico, el aspirante debe superar una prueba en un circuito cerrado con un m¨¦dico, un t¨¦cnico de evaluaci¨®n y un examinador de la DGT. El candidato debe realizar pruebas para comprobar su pericia a la hora de frenar y de esquivar obst¨¢culos. ¡°A una velocidad de 40 o 50 kil¨®metros por hora se pide que se frene en un punto, o que se sorteen iconos en una l¨ªnea vertical para ver si el futuro conductor es efectivo a la hora de girar en un radio peque?o de acci¨®n¡±, explica Adolfo Pe?aranda, que reconoce que las personas con una discapacidad son sometidas ¡°a pruebas un poco m¨¢s estrictas¡±.
Si el aspirante se defiende bien a velocidades peque?as, se hace otra prueba m¨¢s en el exterior, a mayor velocidad. ¡°Comprobamos que pueda ir bien colocado en los carriles, que tenga buena perspectiva de observaci¨®n, que es capaz de reducir la velocidad o de incorporarse a otra carretera¡±, contin¨²a el jefe de Tr¨¢fico de Bizkaia. Una vez que el candidato aprueba esta fase, se puede someter al examen pr¨¢ctico de conducir, ¡°como cualquier otro aspirante¡±.
El carn¨¦ de conducir de una persona con discapacidad puede incluir alguna limitaci¨®n, por ejemplo de velocidad, y es v¨¢lido para toda la Uni¨®n Europea.
La DGT estudi¨® su caso. ¡°Es el m¨¢s complejo que hemos tenido hasta ahora, pero vimos que las adaptaciones que se hab¨ªan hecho al coche pod¨ªan ser v¨¢lidas¡±, explica Adolfo Pe?aranda, jefe provincial de Tr¨¢fico de Bizkaia, donde David se examin¨®.
Y con el visto bueno de la DGT, el joven madrile?o pidi¨® una excedencia de un mes a la empresa para la que trabaja, la Fundaci¨®n DKV Integralia, y se traslad¨® a Basauri en marzo de 2011. ¡°Gestion¨¦ con Irrintzi un curso intensivo, daba diez horas diarias de clase, tres te¨®ricas y siete pr¨¢cticas¡±, cuenta David, que ese mismo mes aprob¨® el examen te¨®rico. Gast¨® unos 12.000 euros durante su estancia.
El examen pr¨¢ctico fue m¨¢s complejo porque tuvo que enfrentarse a dos pruebas. La primera es en un circuito cerrado y otro abierto para comprobar su capacidad para conducir y en la que estuvo presente la subjefa de Tr¨¢fico de Bizkaia, por la excepcionalidad del caso. ¡°No fue f¨¢cil, pero sirve para demostrar que conduces con seguridad¡±, admite David.
La otra prueba es el examen pr¨¢ctico, igual que el del resto de los aspirantes. Aprob¨® a la segunda, el 18 de julio de 2011, en Bilbao. ¡°No tuve ni una falta leve y eso que fue complicado¡±, seg¨²n recuerda, porque ¡°hab¨ªa una manifestaci¨®n frente a la sede del Gobierno vasco y muchas calles estaban cortadas¡±. La ¨²nica limitaci¨®n que le impuso la DGT es la de una velocidad m¨¢xima de 80 kil¨®metros por hora, seg¨²n se?ala el jefe de Tr¨¢fico de Bizkaia.
David ahora conduce un Ford C-MAX de 140 caballos de potencia, adaptado a su discapacidad. El sistema de joystick fue fabricado en Alemania e instalado por la autoescuela Irrintzi, distribuidora del producto en Espa?a. Ford asumi¨® el coste del veh¨ªculo, 30.000 euros, y la aseguradora m¨¦dica DKV pag¨® la mitad de la adaptaci¨®n, que en total supuso 40.000 euros, seg¨²n el director de Irrintzi. ¡°Su historia de tenacidad y coraje nos inspira¡±, afirm¨® el presidente de Ford Espa?a, Jos¨¦ Manuel Machado, durante la presentaci¨®n del coche.
¡°Maneja el veh¨ªculo con una soltura pasmosa¡±, subraya V¨ªctor Piccione, gerente de Comunicaci¨®n de Producto de Ford. De hecho, David no encontr¨® ning¨²n problema para asegurar su autom¨®vil ¡°con una compa?¨ªa normal y con una p¨®liza normal¡±.
Aunque la ¨²nica condici¨®n para adaptar un veh¨ªculo para una persona discapacitada es que sea autom¨¢tico, Piccione defiende las bondades del C-MAX. ¡°Tiene una serie de tecnolog¨ªas, como el sistema de aparcamiento autom¨¢tico o el reconocimiento por voz que facilitan las adaptaciones¡±, defiende Piccione. Y pone un ejemplo muy claro: ¡°El hecho de que des a un bot¨®n y el coche aparque solo o que si tienes calor digas ¡®temperatura 18 grados¡¯ ayuda a las personas de movilidad reducida¡±, asegura. Y aunque no es el primer Ford que se adapta, el gerente de comunicaci¨®n reconoce que no hab¨ªan tenido ning¨²n caso similar. El ¨²nico coche de las mismas caracter¨ªsticas era el de la autoescuela Irrintzi.
¡°La vida me ha cambiado desde que puedo conducir¡±, reconoce David Rivas. Ahora, se traslada en coche desde su casa, en Parla (Madrid), hasta su trabajo, a 40 kil¨®metros. ¡°Antes iba en transporte p¨²blico, pero a veces, por mi discapacidad, es muy inc¨®modo¡±, admite. Y no solo le ha cambiado la vida a ¨¦l, otras tres personas con su misma minusval¨ªa se preparan ahora en Irrintzi para poder conducir.
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