La Audiencia ve delito en el asedio de 2011 al Parlamento de Catalu?a

El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ha acusado hoy de un delito contra las instituciones del Estado, penado con entre tres y cinco a?os de c¨¢rcel, a 22 de los manifestantes que asediaron el Parlamento de Catalu?a e impidieron por la fuerza durante varias horas la entrada de los diputados el 15 de junio de 2011. En un auto de 11 p¨¢ginas, el titular del Juzgado de Central de Instrucci¨®n n¨²mero 6, afirma que la ¡°intimidaci¨®n ambiental¡± que supuso la acci¨®n en grupo sobre parlamentarios en el ejercicio de su cargo a?ade gravedad delictiva a ¡°acciones que aisladamente ser¨ªan constitutivas de delitos menores o incluso de faltas¡±, como escupir, insultar, arrojar l¨ªquidos, bloquear o acosar a las personas. Fuentes jur¨ªdicas se?alan que esta consideraci¨®n podr¨ªa utilizarse en el futuro para definir penalmente los escraches (acosos a los pol¨ªticos en sus domicilios).

Velasco recuerda en su auto que la ma?ana del 15 de junio de 2011 cerca de 600 personas ocuparon todas las entradas del Parlament de Catalu?a con el objetivo de evitar la entrada de los diputados que ten¨ªan que aprobar los Presupuestos auton¨®micos para ese a?o. Las cargas policiales para despejar y desbloquear el recinto parlamentario en torno al Parque de la Ciutadella de Barcelona se saldaron con 45 heridos y seis detenidos por atentado, resistencia y desobediencia a agentes de la autoridad. Una decena de parlamentarios fueron rodeados, increpados e incluso golpeados por los manifestantes cuando trataban de acceder a pie al Parlament. El presidente de la Generalitat, Artur Mas, y la presidenta del Parlament, N¨²ria de Gispert, que no pudieron acceder al recinto en coche oficial, tuvieron que ser trasladados en helic¨®ptero, al igual que otros 30 parlamentarios. La sesi¨®n tuvo que suspenderse durante media hora, mientras en la calle prosegu¨ªan los disturbios.

Entre los diputados que sufrieron un mayor acoso figuran la secretaria segunda del Parlament, la socialista Montserrat Tura, a quien un manifestante pint¨® una cruz con esprai negro en la gabardina y el bolso; el independentista Alfons L¨®pez Tena, al que un manifestante golpe¨® y empuj¨® repetidamente y otro le sustrajo del bolsillo las llaves de su casa; o la convergente Ana Isabel Marcos, a la que arrojaron por encima ¡°gran cantidad de una sustancia l¨ªquida¡±, recuerda el auto.

Velasco recuerda que la Constituci¨®n garantiza el derecho de reuni¨®n ¡°pac¨ªfica¡± como cauce de expresi¨®n de las demandas ciudadanas. El magistrado lanza una puya a los pol¨ªticos al afirmar que en estos ¡°momentos de crisis (¡­) se exigen sacrificios (¡­) que no se ven generalizados a todos, ni especialmente a los que los han generado¡±.

Sin embargo, a rengl¨®n seguido a?ade que en el asedio al Parlament y a los diputados se produjo ¡°una violencia moral de alcance intimidatorio¡± contra la ¡°dignidad¡± y el ¡°normal funcionamiento¡± de un alto organismo de la Naci¨®n. ¡°El sujeto pasivo de la acci¨®n podr¨ªa serlo el parlamentario, pero el sujeto pasivo del delito como titular del bien jur¨ªdico es la misma Asamblea legislativa¡±, afirma Velasco.